Las energéticas presentan uno de los mejores desempeños sectoriales en lo que va del año (XLE +28%, Exxon +39%, Vista +77%), sin embargo, el sector viene de un caótico 2020 y aún no alcanza sus valores previos a la pandemia.

Llamativamente, petroleras como Exxon (-11%), Petrobras (-27%) y Vista (-42%) cotizan con importantes bajas desde los precios en que comenzaron en 2020, mientras que el petróleo se ha recuperado en su totalidad y, de hecho, actualmente vale 13,5% más que a principios de 2020.

La diferencia no se debe a los fuertes pagos de dividendos de la industria, que están contemplados en las variaciones mencionadas, sino principalmente a un deterioro de las expectativas futuras del sector de combustibles fósiles frente al ascenso de fuentes alternativas de energía. 

En el caso de Petrobras, a lo anterior se suma la incertidumbre sobre su capacidad de fijación de precios en Brasil y, en lo concerniente a Vista, debemos incorporar también el riesgo argentino.

El Salvador adopta el Bitcoin como moneda de curso legal

En una rueda bajista para las criptomonedas, el Bitcoin se diferenciaba y subía hasta superar los USD 52.000 por unidad luego de que El Salvador se convierta en el primer país del mundo en adoptar una criptomoneda como dinero de curso legal.

La nación, dolarizada desde hace 20 años, cuenta con una población de 6,5 millones de habitantes y desde hoy entra en vigencia una Ley que dicta: “todo agente económico deberá aceptar Bitcoin como forma de pago cuando así le sea ofrecido por quien adquiere un bien o servicio”.

Uno de los grandes beneficios citados por el presidente Nayib Bukele es que las remesas giradas por los más de 2 millones de salvadoreños residentes del extranjero, en su mayoría en Estados Unidos, dejarán de pagar las comisiones bancarias habituales. Dado que estas remesas representan alrededor de 20% del PBI, se trata de un cambio no menor.

Dada la volatilidad de las criptomonedas, el experimento cuenta con importantes riesgos. El Bitcoin llegó a caer más de 50% durante 2021 y actualmente se encuentra 20% por debajo de sus máximos de principios de año. Parte del capital de la población y empresas estarán sujetos a estas fluctuaciones.