Con una rueda menos por el feriado del viernes, los contratos futuros de dólar finalizaron la última semana con avances del orden del 2,1% en términos de TNA, quedando estas últimas en el rango del 62% al 67% si tomamos los contratos que van desde agosto a mayo de 2023.

Creemos que lo ocurrido en términos de precios fue consecuencia de la última suba de tasas que llevó adelante el BCRA (+300 pbs), ya que el volumen respecto a la semana anterior se mantuvo estable (apenas subió 2%). En cuanto al interés abierto, el valor aumentó en un 15%, denotando el aumento de exposición en los contratos. 

Esto se dio en un contexto en el que el BCRA aumentó el ritmo devaluatorio semanal al 70% (TEA) – vs el 60% que mantenía en las semanas anteriores –.

En lo que respecta a la devaluación esperada en los próximos meses, los contratos descuentan una variación de 5,9% en agosto y de 5,3% en septiembre, siendo los meses donde más caros están los contratos, en relación al 4,5% que lleva devaluando el BCRA en lo que va del mes.

La incapacidad del BCRA para acumular reservas, en un contexto en el que las presiones de las importaciones se hacen cada día más pesadas, lleva a que la autoridad monetaria se pueda anticipar en sus movimientos planeados para los próximos meses. 

De todas maneras, el margen de intervención en futuros es amplio, por lo que creemos que el mercado no se ha adelantado a tomar una postura tan de cobertura, como lo está haciendo a través de bonos dollar linked.