Ante un mercado que viene previendo una política de recorte de tasas más fuerte, en la jornada de ayer la Fed mandó señales más agresivas. Bostic, presidente de la Fed de Atlanta, afirmó que no anticipa una baja de tasas hasta el 3Q24 y Waller recalcó que la fortaleza de la economía estadounidense da a las autoridades flexibilidad para actuar “cuidadosa y lentamente”. Estos comentarios siguieron dando impulso a los rendimientos de los bonos del Tesoro, que alcanzaron el nivel más alto desde el 12 de diciembre y redujeron las expectativas de un recorte de tasas para marzo –la probabilidad de que recorten la tasa bajó a 57% desde el 75%–. En este contexto, la UST2Y cerró en 4,36% y la UST10Y en 4,14%. En este contexto, los bonos del Tesoro anotaron una caída de 0,2%, idéntico resultado al que tuvieron los Investment Grade, mientras que los High Yield y Emergentes lograron cerrar con un alza de 0,2% y 0,1%, respectivamente.
Impulsado por los buenos resultados de las empresas tecnológicas, los mercados tuvieron una jornada mayormente positiva. En cuanto a las acciones, el S&P 500 tuvo la mejor jornada de la semana al marcar un alza de 0,9%, el Dow Jones 0,6%, mientras que el Nasdaq volvió a ser la estrella de la rueda con una alza de 1,4%. El buen desempeño de las tecnológicas se apoyó en Apple, cuyas acciones subieron un 4% después de que Bank of America las elevara a una calificación de compra, proyectando un alza de más del 20% en los próximos 12 meses. Además, las acciones de TSMC que cotizan en EE. UU. se dispararon un 10,08% tras la publicación de sólidos resultados corporativos por parte del productor de chips.
Los commodities cerraron con alzas generalizadas. Se destacó el petróleo que subió 2,1% hasta USD 74 el barril, continuando su tendencia alcista debido a las fuertes estimaciones de demanda tanto de la AIE como de la OPEP. La AIE revisó su proyección de crecimiento de la demanda de petróleo para 2024 a 1,24 millones de bpd, un aumento de 180.000 bpd y la OPEP mantiene su pronóstico de un crecimiento de la demanda de 2,25 millones de bpd en 2024, con una fuerte expectativa de crecimiento de 1,85 millones de bpd en 2025. Los riesgos geopolíticos en Medio Oriente -los ataques de militantes hutíes en el Mar Rojo obligaron a desviar cargamentos, aumentando los tiempos y costos de los viajes- y las perturbaciones en la producción estadounidense ante la ola de frío impulsaron aún más el aumento de precios. El oro subió 0,8% y cerró en USD 2.022 la onza mientras que la soja tuvo un respiro y logró un alza de 0,6% hasta USD 445 la tonelada.
En EE.UU., el número de nuevas solicitudes de prestaciones por desempleo cayó a 187.000 (16.000 menos que la semana previa), la menor cantidad desde septiembre de 2022 y muy por debajo de las expectativas (207.000). Las solicitudes continuas cayeron en 26.000 a 1.806.000 en la semana anterior, la menor cantidad desde octubre de 2023, lo que subraya la rigidez histórica del mercado laboral estadounidense, agregando margen para que la Reserva Federal prolongue su postura firme hasta el segundo trimestre, si es necesario, para reducir la inflación.
En tanto, el índice manufacturero de la Reserva Federal de Filadelfia subió 2,2 puntos hasta -10,6 en enero (comparado con -12,8 en diciembre), pero resultó peor que las estimaciones del mercado (-7). En el último año, solo en agosto de 2023 el índice mostró un valor positivo.
Por su parte, los permisos de construcción aumentaron un 1,9% a una tasa anual ajustada estacionalmente de 1,495 millones en diciembre, revirtiendo parcialmente la caída del 2,1% de noviembre y superando las expectativas de mercado (1,48 millones).