Las ventas minoristas en EE. UU. sorprendieron al mercado al anotar una caída nominal en enero de 0,8 % m/m – con una inflación mensual de 0,3 %, en términos reales la retracción fue mayor – revirtiendo el aumento revisado a la baja del 0,4 % en diciembre y peor que las previsiones del mercado de una caída del 0,1 %. Se trata de la mayor caída en las ventas minoristas desde marzo del año pasado, impulsada principalmente por las consecuencias de la temporada de compras navideñas y el clima frío. Compensan esta sorpresa negativa las solicitudes de desempleo que en la última semana cayeron en 8.000 a un total de 212.000, muy por debajo de las estimaciones del mercado de 220.000.

En este contexto, los mercados tuvieron una jornada positiva con suba de acciones y bonos. El S&P 500 subió un 0,6 % y el Dow Jones subió 200 puntos (0,9 %), mientras que el Nasdaq subió un 0,3 %.

El sector de energía y los bancos estuvieron entre los que más ganaron, con ExxonMobil y Wells Fargo sumando más del 2 % y el 7 %, respectivamente. Alphabet cayó un 2,5 % después de que Third Point disolviera su participación en la empresa, mientras que los informes de que el creador de ChatGPT, OpenAI, está considerando lanzar un motor de búsqueda también presionaron a las acciones. En el frente de las ganancias, Cisco cayó un 2 % después de que las previsiones de la compañía para todo el año no cumplieron con las expectativas del mercado y Deere & Company bajó 5,8 % después de proporcionar una perspectiva pesimista para todo el año.

Los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE.UU. retrocedieron. El UST10Y bajó en 3 pb hasta el 4,24% y el UST2Y de 2 años disminuyó en 1 pb, alcanzando el 4,57%. En consecuencia, los índices de renta fija registraron un incremento del 0,5%, mientras que los bonos emergentes ganaron 0,8%.

El US Dollar Index descendió 0,4% hasta los 104,3, mientras que el oro experimentó un aumento del 0,6%, alcanzando los USD 2.004 por onza. Por otro lado, el WTI registró una ganancia del 1,8%, llegando a los USD 78 por barril, impulsado por la debilidad del dólar. No obstante, estas ganancias se vieron limitadas debido a un informe de la Agencia Internacional de Energía (AIE), el cual sostiene que la demanda mundial de petróleo está perdiendo impulso, llevando a la agencia a revisar a la baja su pronóstico de crecimiento para 2024 a 1,22 M bpd desde 1,24 M bpd. La AIE también proyectó un aumento en la oferta de 1,7 M bpd este año, superando su estimación previa de 1,5 M bpd.

En Europa, la economía británica se contrajo un 0,3% t/t en el 4Q23, tras una caída del 0,1% 3Q23, y peor que las previsiones del mercado de una caída del 0,1 %. De esta forma, la economía entró en recesión en medio de una caída generalizada de la producción, concretamente de los servicios (-0,2%, igual que en el tercer trimestre) y producción industrial (-1% vs 0,1%). Por el lado del gasto, hubo una caída de las exportaciones (-2,9% vs -0,8%), las importaciones (-0,8% vs -1,8%) y el gasto de los hogares (-0,1% frente a -0,9%). Considerando todo el año 2023, el PBI del Reino Unido aumentó un 0,1 %.

Tampoco fueron buenas las noticias en Japón donde el PBI en el 4Q23 marcó una caída de 0,1% t/t anualizada – el consenso de analistas esperaba un alza de 0,3% t/t -. Esta fue la segunda caída consecutiva luego de que en el trimestre anterior había marcado una contracción de 0,8% t/t por lo que por primera vez en 5 años Japón está en una recesión técnica explicada por el retroceso que viene marcando el consumo desde junio del año pasado.