El barril de crudo WTI subía esta mañana 2,7% y superaba los USD 68, valores no vistos desde finales del año 2018.
El impulso se explica principalmente por la expectativa que genera la decisión de la OPEP y sus aliados en la reunión que tiene lugar el día de hoy. A pesar de la mayor demanda y menores inventarios, la entidad no mantendría la producción en los niveles definidos durante su reunión previa.
Un panel especializado del grupo expuso esta mañana que el exceso de inventarios acumulado globalmente durante la pandemia ya se habría depurado prácticamente por completo y que los niveles actuales de inventarios se reducirán rápidamente en la segunda mitad del año producto de la recuperación económica y el final de las medidas de aislamiento en Europa y Estados Unidos.
Mejoran las perspectivas en Brasil
Tanto funcionarios públicos como analistas privados están aumentando sus proyecciones de crecimiento para la economía de Brasil durante 2021.
Según estimaciones de esta semana, el PBI del país crecería 3,96% este año (previamente se esperaba 3,52%) y la tasa de interés Selic finalizaría el año en 5,75%, es decir, 0,25% por encima de la estimación previa. La proyección de esta semana reigstró la sexta suba consecutiva en las estimaciones de crecimiento.
El ministro de economía, Paulo Guedes, comentó en exposición frente a inversores que la economía probablemente termine expandiéndose más del 4%, generando además una mayor recaudación, que reduciría el déficit primario a menos de 3% del PBI.
Respecto de la tasa de interés, el Banco Central subió el valor de referencia a 3,5% durante mayo y proyecta una suba de 0,75% adicional durante junio, aportando a la calma cambiaria y a la contención de la inflación.
Finalmente, los valores elevados de commodities generan que los términos de intercambio para el país sean altamente favorables (ver gráfico), permitiendo un fuerte ingreso de divisas por comercio exterior que contribuyen positivamente al nivel de actividad.