Internacional
¿Qué pasó?
El avance de las vacunas, los buenos indicadores económicos de EE.UU, el comunicado de la FED y los muy buenos balances de las empresas generaron las condiciones para que abril cierre con resultados altamente positivos, tanto en renta fija como en renta variable. Concretamente, con las expectativas de inflación en EE.UU. estabilizadas en torno al 2,5% anual para los próximos cinco años (venían de subir de 2% a 2,5% en el primer trimestre), la UST10 se movió en torno al 1,60%, cerrando abril en 1,63% (vs 1,75% de fines de marzo). Con ello, los índices de renta fija tuvieron el mejor mes del año al marcar un alza en torno al 2% en abril. En cuanto a la renta variable, impulsado por los muy buenos balances presentados por las principales empresas (a sorpresa en las ventas viene 3,9% por encima de lo esperado, mientras que las ganancias muestran un avance de 23,8%), el S&P500 culminó el mes en niveles récord acumulando en abril un alza de 5,3% y de 12,2% en el año. Las subas fueron generalizadas entre los sectores, aunque se destacó la performance de Comunicación, Consumo discrecional y Financieras que marcaron subas superiores al 6%. Entre las empresas, sobresalió el muy buen desempeño de Google (+14,1%), Facebook (10,4%), Amazon (12,1%) Tesla (6,2%), Microsoft (7,0%), Apple (7,6%) mientras que la de Netflix, con un balance poco promisorio, fue la excepción y marcó una caída del 1,6%.
El buen clima para los mercados también se reflejó en la bolsa de Brasil, que se recuperó de un mal primer trimestre y subió un 6,3%. También fueron buenos los resultados en Europa, que de la mano de la normalización de la distribución de las vacunas, buenos resultados de las empresas y repunte de la actividad, le dio aire a la bolsa para que suba un 4,7%. El mayor optimismo global quebró la fortaleza que venía marcando el dólar y en abril se debilitó contra la mayoría de las monedas: 2,1% frente a las principales monedas (3,2% frente al Euro), 1,4% frente a las asiáticas, 1,2% frente al Yuan y 3,5% frente al Real Brasileño, mientras que con el resto de las monedas tuvo una ligera apreciación. El buen clima de los mercados también se reflejó en los commodities, que tuvieron muy buen desempeño de la mano del cobre y la soja (marcaron subas de 12,1% y 9,3% respectivamente), en tanto que el petróleo lo hizo 7,2%. La mejora también se extendió hasta el oro, que tras varios meses de caída logró un alza del 5,0%.
En cuanto a la pandemia, si bien existe preocupación por el alza de contagios en la India (lo que impulsa el número de contagios a nivel mundial), en el resto del mundo los datos son más alentadores, al apreciarse cierta estabilización y un leve descenso de los casos mientras el proceso de vacunación avanza, tal como sucede en Europa, México y Brasil. Mientras tanto, tal como se esperaba, la reunión de la FED no trajo grandes novedades pero sirvió para despejar dudas, ya que continuarán las medidas de estímulo monetario con compras mensuales de activos por USD 120 MM. La entidad conducida por Powell destacó el buen desempeño que viene mostrando la economía americana. Además, atribuyen la suba de la inflación a factores transitorios, dejando en claro también que no piensan reducir las compras de activos -el tapering- ni mover las tasas hasta 2024.
Entre los datos económicos de la semana en EE.UU se destacó que el PBI del 1Q21 marcó un alza anualizada del 6.4% respecto al trimestre anterior (levemente por encima a las estimaciones del mercado) y del 0,4% respecto a un año atrás. Se lució también el consumo privado con un incremento de 24% t/t y 7,0% i.a. El combo de buenas noticias llegó hacia el cierre de la semana con el dato de que el ingreso personal subió un 21% m/m en marzo de la mano de la mayor asistencia derivada del Plan fiscal de Biden, lo que permitió acelerar la recuperación del consumo (subió un 4%) y, a su vez, llevar el ahorro al 28% de los ingresos (el segundo valor más alto de la historia, sólo superado por el de abril del año pasado cuando había llegado al 34%). Los buenos datos económicos de EE.UU contrastan con el mal desempeño que marcó el PBI de la Eurozona, que en los primeros tres meses del año marcó una caída anualizada del 2,4% t/t entre la que se destacó la baja de 6,6% en el PBI de Alemania.
Lo que viene
El dato más importante de la semana se conocerá el viernes con la publicación de empleo de abril (se espera la creación de casi 1 millón de puestos de trabajo y que la tasa de desempleo baje al 5,7%), que marcará la fortaleza de la economía americana en un contexto de normalización de las actividades y fuerte estímulo fiscal. También se conocerán el PMI de abril de EE.UU, Europa y el de China. En Brasil se destaca la publicación del intercambio comercial, ventas minoristas, producción industrial y la decisión del BCB sobre la tasa de interés (se espera que la vuelva a subir). En cuanto a los balances corporativos, esta semana publican Pfizer, General Motors, PayPal, Uber y Berkshire Hathaway.
Local
¿Qué pasó?
Pese a que el agro aceleró la liquidación, el BCRA moderó el ritmo de compra de divisas y las reservas internacionales prácticamente no se movieron. Concretamente, en la última semana el agro liquidó USD 800 M -acumulando en todo abril ventas por más de USD 3.100 M-, en tanto que el BCRA compró sólo USD 150 M, lo que marcó una importante caída respecto a las semanas previas (había adquirido a razón de USD 450 M por semana). Con estas intervenciones, las reservas internacionales cerraron en USD 40.263 M, muy similar al nivel de la semana previa. Pese a modesto desempeño de la última semana, abril fue un muy buen mes para el BCRA dado que compró casi USD 1.500 M - el mejor mes durante la actual la gestión- que le permitieron sumar USD 670 M de reservas brutas en tanto que las reservas netas aumentaron en USD 1.300 M finalizando abril por encima de los USD 4.500 M. En este contexto y con el claro objetivo de moderar el impulso inflacionario, el BCRA redujo el ritmo de devaluación al 22% anualizado, el más bajo desde enero del año pasado, aunque en la última semana le dio mayor volatilidad con una leve aceleración. Mientras tanto, la cotización del CCL y MEP que hasta marzo venían en baja, en abril despertaron y marcaron subas de 7,0% y 5,9% elevando la brecha con el tipo de cambio oficial al 67% y 63% respectivamente.
Con este marco de fondo, en el que las expectativas de inflación se mantienen elevadas y la brecha cambiaria presiona al alza, al Tesoro le está costando cada vez más financiarse en mercado que le pide más tasa y plazos más cortos: en la última licitación no renovó en su totalidad los vencimientos de esta semana (consiguió AR $107,7 mil millones de los AR $121,8 mil millones que vencían). Los datos de actividad estarían mostrando que en marzo se recuperó tras el tropiezo de febrero de la mano del mejor desempeño que mostró la industria. La mala noticia es que las perspectivas para abril y mayo dependerán en parte de las restricciones que imponga el gobierno a la circulación, especialmente en el AMBA.
Lo que viene
A la delicada situación sanitaria se le suma el conflicto interno dentro del gobierno por los ajustes tarifarios que enfrenta al ministro Guzmán con el Secretario de Energía. La tensión genera volatilidad e incertidumbre en cuanto al futuro, tanto del ministro de economía como del rumbo de la política monetaria. También comenzarán a llegar las primeras estimaciones privadas de la inflación de abril que, de acuerdo a los primeros avances, se habría ubicado en torno al 4%, levemente por encima de nuestra estimación de 3.5%. Hoy se conocerá los datos de la recaudación de abril que se destacaría el resultado del pago del impuesto a las grandes fortunas. El miércoles 5, la Secretaría de Finanzas tendrá una nueva prueba y hará la primera licitación de bonos de mayo.