Rendimiento de los mercados

Durante el mes de diciembre, el escenario global se vio afectado por un gran aumento en los casos de COVID-19, fundado principalmente por la contagiosidad de la variante Ómicron. Sin embargo, la lateralización de las muertes y descenso de las hospitalizaciones concluyó en un escenario optimista, que impactó en los mercados. A pesar de haber iniciado el mes con una alta volatilidad, los mercados de renta variable terminaron mostrando una excelente performance. Los principales índices bursátiles americanos se recuperaron de la caída de noviembre y principios de diciembre y anotaron nuevos máximos. El S&P, medido en el ETF SPY, cerró el mes retornando un 4,4%, acumulando en todo el año una ganancia de 27,7% i.a. El Nasdaq 100, que está más concentrado en empresas tecnológicas, siguió el mismo comportamiento, ganando 1% en diciembre y 27,9% en todo 2021. 

Si bien en diciembre todos los sectores mostraron rendimientos positivos, en el marco de incertidumbre por el aumento de contagios, los que se vieron más favorecidos fueron los defensivos: mientras salud anotó un alza de 9%, utilidades y consumo discrecional subieron en torno al 8%. Un escalón más abajo se encontraron las acciones de los sectores de materiales e industriales, con una ganancia promedio del 5% en el mes. Comunicación y tecnológicas, por su parte, subieron en torno al 4%.

Con estos resultados, el 2021 fue uno de los mejores años para la renta variable. El gran impulso se lo dieron las empresas big growth, que ganaron un 32%, seguidas por las empresas value, que lograron un retorno del 23%. Las small growth, por su lado, tuvieron un alza de sólo 5%. A nivel sectorial, la suba fue generalizada, aunque se destacó el sector energético, con una suba del 46% -impulsada por el alza del precio del petróleo que superó el 55% i.a.-, el tecnológico -con un 35%- y el financiero -con una suba del 34% i.a-. 

Dentro de las compañías, en 2021 algunas mostraron rendimientos sobresalientes. La empresa productora de chips y semiconductores NVIDIA rindió un 125%, encabezando la lista favorecida por la escasez de chips a lo largo del mundo, lo que revalorizó su producción. En segundo lugar se ubicó Pfizer, con un rendimiento del 59%, impulsada especialmente por la alta demanda de sus vacunas durante este año. Otras empresas, como Tesla y Microsoft, registraron alzas en torno al 55% gracias a sus excelentes resultados por sobre las expectativas del mercado. Por último, Apple igualó al sector con un rendimiento anual del 35%. 


Performance de nuestras carteras Cedears

Con este marco de fondo, nuestras carteras Cedears obtuvieron rendimientos mixtos durante el último mes y a lo largo del 2021. La cartera que logró un mejor desempeño durante diciembre fue la A (replica al S&P 500), con un alza de 4,3%, y un 25,25% en el acumulado de 2021. Esta cartera se vio favorecida tanto por el crecimiento del sector tecnológico como el de salud, destacándose Pfizer como la principal ganadora de la cartera -con un rendimiento de 58,5% durante 2021-. 

En segundo lugar se ubicó la cartera Q (Quality), que combina 17 Cedears de empresas consideradas Value, tanto por su buena calidad de negocios como por sus balances, performó 3,5% en el último mes y 33,4% en el 2021, quedando así como la principal ganadora del año anterior -y destacándose NVIDIA con un rendimiento del 128%-. Esta cartera se destacó también por lograr rendimientos similares en ambos semestres -17% en el primero y 16,4% en el segundo-, a pesar de haberse dado distintos contextos, tanto internacionales como en el mercado norteamericano. Las carteras C (Cyclicals), T (Nasdaq) y G (Gold) ganaron entre 3,3% y 2,5% en el mes. Mientras que las primeras dos se vieron favorecidas por el crecimiento de las últimas semanas, la cartera Gold logró la mayor parte de su rendimiento a principios del mes, favorecida por el aumento en la demanda del oro ante contextos de incertidumbre. Sin embargo, mientras las primeras obtuvieron rendimientos anuales de 16,4% y 21,4% respectivamente, la cartera que replica a las mineras de oro cerró el año con un retroceso del 10%. 

En los últimos lugares del mes se ubicaron las carteras B (Brasil) y F (Financials). La primera registró un suba de 2% mientras que la cartera F, que replica a distintos bancos, retrocedió 0,9%. Pese al mal desempeño de diciembre, la cartera F terminó en segundo lugar con respecto a los rendimientos anuales logrando una performance de 32,9%. Cabe destacar que este crecimiento se acumuló principalmente durante el primer semestre, donde se esperaba un contexto de expansión económica sumado a una posible suba de tasas de interés. Por su parte, la cartera B obtuvo el peor rendimiento del año retrocediendo un 18,4% respecto al 2020. 

Conclusión 

A pesar del contexto internacional que azotó a las economías durante el último año, la mayoría de nuestras carteras Cedears lograron interesantes rendimientos en dólares, que se sumaron a baja volatilidad, como fue el caso de la cartera Q (Quality) y la A (S&P 500).

De cara a los próximos meses, se espera que este contexto de incertidumbre continúe marcado no sólo por el aumento de contagios, sino también por la inflación -que está golpeando a la mayoría de las economías- y por el endurecimiento de la política monetaria por parte de la FED y otros bancos centrales. Por esta razón es que continuamos recomendando posicionarse, principalmente, en tres de nuestras carteras: 

I. Cartera A (S&P 500). Al incluir una gran cantidad de sectores dentro de sus activos, con esta cartera se logra disminuir el riesgo intrínseco de cada mercado, por lo que termina destacándose por su relación riesgo/retorno, y se vuelve interesante para inversores que buscan disminuir la volatilidad de sus inversiones. 

II. Cartera Q (Quality). Se sigue manteniendo dentro de nuestras recomendaciones, dada la estabilidad que muestran las compañías que la componen y su habilidad para diversificarse. Estas empresas, como Apple, Microsoft o Amazon, suelen ser refugio ante contextos de incertidumbre, por lo que se verán menos afectadas que otras, categorizadas más como empresas Growth.

III. Cartera F (Financials). Agrupa 5 de las mayores entidades financieras. Dado el contexto de inflación en aumento, el mercado especula con un aumento de tasas, que se estaría dando durante los primeros meses del 2022. Este escenario favorece notablemente a los bancos, ya que estos se endeudan con la tasa de la FED a corto plazo (hoy ronda en 0,025%), mientras prestan a la tasa de Treasuries a largo plazo (sumado a una prima de riesgo). De esta forma, un contexto de suba de tasas lleva a un empinamiento de la curva, que aumenta la rentabilidad de las entidades gracias al spread de ambas tasas. Por esta razón, consideramos que en los primeros meses del año el sector financiero logrará un repunte, tal como lo hizo en 2021.