¿Qué pasó?
Internacional

Semana positiva para los mercados globales. Tras varias semanas de preocupación en cuanto a un ajuste monetario más severo, las últimas declaraciones de miembros de la Fed bajaron la probabilidad de un alza de 50 bp y todo se encamina a que el 22 de marzo la tasa de referencia suba 25 pb hasta 5,0%. Esto le quitó presión a los bonos del Tesoro americano cuyos rendimientos se estabilizaron, aunque en los niveles más altos de los últimos 15 años. En este contexto, los mercados tuvieron un respiro: el dólar se debilitó, subieron los commodities y las acciones, mientras que los bonos tuvieron un comportamiento estable. Igual tendencia mostraron el resto de los mercados globales que tuvieron una semana positiva con importante repunte de China y Europa, mientras que América Latina volvió a cerrar a la baja arrastrada por la mala performance que viene marcando Brasil. Lo importante de esta semana: el discurso que Powell dará ante el congreso americano el miércoles y, aún más importante, el informe de empleo de febrero que se publicará el viernes. Se estima que se crearon 200 mil nuevos puestos de trabajo y que la tasa de desocupación quedará en 3,4%. 

Si bien los indicadores económicos presentados en la última semana volvieron a marcar que la economía sigue creciendo y presiona sobre los precios, los inversores festejaron las declaraciones de miembros de la Fed que le bajaron el tono a un ajuste monetario más severo, asegurando que en la próxima reunión del 22 de marzo subirán la tasa 25 pb. Esto le quitó presión a los bonos del Tesoro que tras el fuerte repunte que tuvieron en febrero, se estabilizaron aunque en niveles elevados y con el diferencial de rendimientos entre los bonos cortos y largos cada vez más pronunciado. Los principales índices de renta fija tuvieron una semana positiva entre los que se destacaron los High Yield y los TIPS –bonos ajustables por inflación–. En cuanto a estos últimos, son los que menos cayeron en el último mes dado que las expectativas de inflación subieron más que la tasa nominal, lo que hizo que caer la tasa real. La estabilidad que tuvieron las tasas permitieron que repunten las acciones con subas en los sectores cíclicos y tecnológicos, que vienen siendo los ganadores en lo que va de 2023. El dólar se debilitó contra todas las monedas y los commodities operaron al alza especialmente el petróleo y los metales ante los buenos indicadores presentados por China. Esto también le dio impulso a la renta variable global que tuvo una semana con subas generalizadas entre las que se destacaron China y Europa.  

Local

En el plano local, la fragilidad de la economía empeora ante el agravamiento de la sequía. La estimación de cosecha de soja y maíz volvió a ajustarse a la baja y traerá mayor caída en las exportaciones, en la recaudación y en el nivel de actividad en general. Malas noticias para una economía que padece la falta de dólares y tiene que ajustar las cuentas públicas. Lejos de marcar un sendero de corrección fiscal, en la última semana se aprobó una moratoria previsional que implicará un alza de 0,4% del PBI. Mientras tanto, las reservas internacionales continuaron en baja, la inflación se acelera y el clima electoral va tomando temperatura. Con este marco de fondo, sumado a los rumores de suspensión de compra de bonos en moneda extranjera por pedido del FMI, los activos locales tuvieron una mala semana. Los bonos soberanos en moneda extranjera volvieron a caer y el riesgo país cerró por encima de los 2.000 pb; el Merval ajustó y la brecha cambiaria operó al alza. Sólo escaparon a la tendencia general los bonos en moneda local que tuvieron una buena performance, entre los que se destacaron los de vencimiento posterior a 2023. Esta semana el foco estará en la evolución del mercado cambiario y el casi seguro cambio de metas de reservas que acordará el gobierno con el FMI. Además, se publicará el IPC de la Ciudad de Buenos Aires que le marcará el pulso a la inflación de febrero, que estimamos estará en torno al 6,5% m/m. En cuanto a la deuda en moneda local, volverá la tensión ante el nuevo comunicado de JxC alertando sobre la ventaja que se le daría a los bancos al contar con la posibilidad de venderle los títulos al BCRA en cualquier momento, lo que viola la ley de Administración Financiera y la propia Carta Orgánica del BCRA.

La sequía no cede y los pronósticos de cosecha son cada vez peores: ahora se prevé que la producción de soja y maíz sea de apenas 30 MT y 40 MT, respectivamente, por lo que ahora el piso de caída de exportaciones del agro pasa a USD 15.000 M y con esto la recaudación por retenciones caería USD 5.000 M. Esto no sólo es problema para las cuentas externas y fiscales, sino también para el nivel de actividad que se verá muy afectado por lo que esperamos una mayor caída del PBI, especialmente en el 2Q23. En el mercado cambiario, por primera vez en dos meses, el BCRA tuvo una semana con compras netas de divisas. Esto no fue por aumento de la oferta, que siguió cayendo por el derrumbe de la liquidación del agro –están 80% abajo que un año atrás–, sino por ajuste en la demanda, lo cual inexorablemente se asocia con la menor actividad económica. Las reservas internacionales netas cerraron en torno a los USD 3.200 M por lo que se hace evidente que habrá un nuevo ajuste en las metas con el FMI para poder cumplirlas, aunque se estima que se pondrán limitaciones a las recompra de deuda en moneda extranjera. El ritmo de devaluación se mantuvo en torno al 6% mensual –en línea con las semanas previas–, en tanto que el MEP y el CCL operaron al alza presionando sobre la brecha cambiaria que cerró en torno al 85% y 90%, respectivamente. Se viene el dólar Malbec, una señal de que las economías regionales padecen el atraso cambiario, aunque el impacto macro es muy bajo dado que las exportaciones de vinos no llegan a USD 1.000 M al año y las regionales a USD 6.000 M. En cuanto a la inflación, las estimaciones privadas apuntan a un alza de 6,5% en febrero en tanto que la media del REM espera 6,08% –vs. 5,5% que esperaba hace un mes–. Respecto a esto último, hoy se publica el adelanto del IPC de CABA –recordemos que en enero marcó 7% m/m– que será un buen termómetro de lo que publique el INDEC el próximo martes 14. La aceleración inflacionaria no se detendría en marzo ya que con los ajustes de precios regulados se espera un alza similar a la de febrero. Con este marco de fondo, los activos locales tuvieron una semana negativa: los bonos soberanos en moneda extranjera cayeron 3,8% y el riesgo país cerró en 2.090 pb, en tanto que el Merval tuvo una caída de 2,4% medido en dólar CCL. Sin duda, lo más destacado fueron los bonos en moneda local: los Boncer que vencen a partir del año que viene lo hicieron 5,6% en la semana y 11% en el último mes; el TV 24 subió 9% en la semana y 18% desde el 3 de febrero, mientras que el Dual 24 ganó 5,2% en la semana y 11% durante los últimos 30 días.