A diferencia de las últimas semanas donde habían aparecido distintos datos que exhibían una desaceleración de la actividad en EE. UU., hubo buenos datos de actividad empresarial –nuevos pedidos de bienes durables y PMI– que, en conjunto con los datos de inflación que todavía muestran rigidez a la baja, redujeron las expectativas de recorte de tasas para el 2024. En este contexto, y tras la publicación de las minutas de la Fed –mostrando disposición a endurecer aún más la política monetaria si fuese necesario–, los rendimientos del Tesoro experimentaron un aumento, especialmente en el tramo corto, lo que provocó una caída en los precios de los bonos. Las acciones cerraron de manera mixta, impulsadas principalmente por los buenos resultados trimestrales de Nvidia. Sin embargo, los mercados globales se vieron perjudicados. En este contexto, el dólar se fortaleció y el oro perdió valor. Los commodities agrícolas, por otro lado, fueron los más beneficiados. La próxima semana se esperan importantes datos económicos, incluyendo el índice de precios del gasto en consumo personal (PCE) y los datos de ingresos y gastos del consumidor, junto con la segunda estimación del PBI estadounidense. Cabe destacar que este lunes no habrá actividad bursátil debido a un feriado.

Buenos datos de actividad en EE.UU. En la semana hubo datos positivos referidos al andar económico que esquivaron la mirada relacionada con signos de desaceleración en la actividad. Concretamente, los nuevos pedidos de bienes duraderos manufacturados aumentaron un 0,7% m/m en abril, tras un aumento del 0,8% en marzo y desafiando las expectativas del mercado de una disminución del 0,8%, marcando el tercer avance mensual consecutivo e impulsado principalmente por la sólida demanda de equipos de transporte. Además, el PMI compuesto global del S&P subió a 54,4 en mayo, frente al 51,3 previo, lo que marca el nivel más alto desde abril de 2022 y superó las expectativas del mercado de 51,1 según datos preliminares. El sector servicios impulsó la recuperación con un PMI de 54,8, mostrando el mayor crecimiento de la producción en un año, mientras que el sector manufacturero también mostró un fuerte crecimiento con un PMI de 50,9. De otro modo, el sector de la construcción evidenció en las ventas de casas unifamiliares nuevas una contracción del 4,7% m/m en abril (vs +5,4% previo) a una tasa anualizada desestacionalizada de 634.000 en abril de 2024. Finalmente, en el mercado laboral, el número de personas que solicitaron prestaciones por desempleo sigue cayendo desde el pico de hace 2 semanas, llegando hasta 215.000, por debajo de las expectativas del mercado (220.000). 

Tono Hawkish de las minutas. Las actas publicadas el pasado miércoles por la Reserva Federal (Fed) sobre la reunión de principios de mes, en la cual se mantuvo el rango objetivo en 5,25-5,50% por sexta vez consecutiva, reflejan un creciente nivel de preocupación del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) respecto a la falta de progreso en la reducción de la inflación en la economía estadounidense. Varios responsables políticos expresaron su disposición a endurecer aún más la política monetaria si fuese necesario. Esta postura más hawkish de la Fed provocó un cambio significativo en las expectativas del mercado. Hace una semana, la probabilidad de una reducción de 25 puntos básicos en la reunión de septiembre era del 81%, mientras que ahora ha disminuido al 53%. Para las reuniones de noviembre y diciembre, las probabilidades de una reducción se sitúan en el 77% y el 69%, respectivamente.

Tasa subiendo, sufren los bonos. Tras datos económicos más sólidos de lo esperado y las minutas de la Fed con un tono más restrictivo, las tasas de interés experimentaron una presión alcista, especialmente en el tramo corto, debido al temor de una inflación más persistente. La tasa de los bonos del Tesoro a 2 años (UST2Y) subió 12 pb durante la semana, cerrando en 4,95% después de haber estado en 4,83% a principios de mes. La tasa de los bonos del Tesoro a 10 años (UST10Y) avanzó 5 pb, terminando en 4,47%, aunque muestra una baja de 19 pb en el último mes. En este contexto, los bonos finalizaron una semana negativa, con una caída promedio del 0,3%, aunque acumulan una subida del 1,4% en el mes. Desglosando los datos, los bonos High Yield, de menor calidad crediticia, registraron una baja semanal del 0,2%, pero se mantienen positivos en un 1% en mayo. Los bonos Investment Grade, que tienen una mayor duración, cedieron también un 0,2% semanal, pero acumulan una subida del 1,9% en el mes. Por su parte, los bonos del Tesoro estadounidense tuvieron una dinámica similar, con una caída semanal del 0,2% y un aumento del 1,2% en el mes. Los más perjudicados fueron los bonos emergentes, que bajaron un 0,5% en la semana, aunque mostraron un alza del 2,1% en el mes.

El impulso de Nvidia no alcanzó a traccionar el mercado. La menor expectativa de una baja de tasas y los datos económicos favorables del PMI generaron un comportamiento mixto en el mercado. El S&P 500 se mantuvo con una leve caída del 0,1%, aunque acumula un alza del 5,5% mensual. Por su parte, el Dow Jones cayó un 2,3%, pero se mantiene en verde con un 3,3% en el mes. En contraste, el Nasdaq fue el único índice que subió, con un avance del 1,4% en la semana y un sólido 7,9% acumulado mensual. En cuanto a los sectores, el tecnológico y de comunicaciones fueron los únicos en terreno positivo, con un avance del 1,6% y 0,4% respectivamente. Las tecnológicas fueron impulsadas por Nvidia (+15,1%), destacando su balance positivo con énfasis en la inteligencia artificial, y empresas de energía solar como First Solar (+40%) debido a la mayor demanda de paneles para centros de datos. En el sector de comunicaciones, mientras que Meta avanzó un 1,3%, Google cedió un 0,6%, aunque se destacan empresas de entretenimiento como Netflix (+4,1%). El resto de los sectores tuvo una semana negativa. El sector inmobiliario cayó un 3,6%, afectado por las altas tasas hipotecarias y la menor confianza de los constructores. El sector financiero bajó un 2,1%, con una disminución en bancos como JP Morgan (-2%) tras una perspectiva negativa del CEO sobre la economía estadounidense, así como Wells Fargo (-1,4%) y Visa (-2%). El consumo discrecional también se vio afectado, con una baja del 1,8%, influenciada por la caída en automotrices como General Motors (-3,6%) y Ford (-1%), a excepción de Tesla (+1%). En el sector de restaurantes, McDonald's disminuyó un 5,2%. La industria bajó un 0,7%, con Boeing (-5,6%) siendo particularmente afectada después de que su director financiero pronosticara un flujo de caja libre negativo y ninguna recuperación en las entregas de aviones en el segundo trimestre, citando desafíos de producción en curso. Por tamaño de capitalización, el S&P equiponderado cedió un 1,2%, las small caps bajaron un 1,4%, y el S&P top 50 ganó un 1%.

Actividad europea a toda marcha. Los datos semanales en la eurozona siguen mostrando cada vez más fortaleza, indicando que el producto estaría volviendo a crecer nuevamente. Específicamente, el PMI compuesto del HCOB aumentó a 52,3 en mayo (vs 51,7 previo), el nivel más alto en un año y superando las previsiones de 52, según mostraron las estimaciones preliminares. El crecimiento siguió centrándose en el sector de servicios (53,3 frente a 53,3), pero la producción manufacturera se acercó a la estabilización (47,4 frente a 45,7), cayendo solo marginalmente y en menor medida en el actual período de 14 meses de contracción. Además, la confianza del consumidor en la zona del euro aumentó hasta -14,3 en mayo (vs -14,7 previo), rondando su nivel más alto desde febrero de 2022, impulsado en parte por las expectativas de recortes de tipos a corto plazo por parte del BCE. Finalmente, se registró un superávit comercial de 24,100 millones de euros en marzo, mejor que las previsiones del mercado y siendo el mayor superávit comercial desde diciembre de 2020.

Mercados globales arrastrados. Los mercados internacionales no lograron escapar de la tendencia bajista observada en Wall Street. El índice global de acciones cayó un 0,8%, y excluyendo a EE. UU., la caída fue más pronunciada, alcanzando el 1,3%, aunque en el último mes acumula subidas del 4%. En los países desarrollados, Europa registró una caída del 1,1%, a pesar de un mejor momento económico, aunque acumula un aumento del 5,2% en el mes. Japón, por su parte, bajó un 0,8%, con un modesto aumento del 0,7% en mayo. Los mercados emergentes tuvieron una caída del 1,6% semanal, manteniendo la misma merma que en lo que va de mayo. Excluyendo a China, los mercados emergentes experimentaron una caída del 0,6%, aunque muestran un incremento del 3,3% en el mes. En América Latina, la pérdida fue del 2,7%, afectada principalmente por Brasil (-3,3%), que se encuentra en una tendencia bajista arrastrada por bancos como Itaú (-5%), y por empresas como Petrobras (-1,3%) y Vale (-3%). China también registró una fuerte caída del 4,4% en la semana, impactada por empresas tecnológicas como Alibaba (-8,2%) y NetEase (-13,8%), así como por el sector de consumo discrecional, especialmente Nio (-8,5%) y JD.com (-14,2%). En cuanto a los bonos globales soberanos, excluyendo a Estados Unidos, la caída fue del 0,35%, mientras que los bonos High Yield internacionales apenas subieron un 0,1%.

Dólar fortalecido y oro levemente a la baja.  El índice dólar se ubicó en 104,7, habiendo subido por cuatro ruedas consecutivas, salvo el viernes que cedió 0,4% y borró buena parte de las ganancias. De esta forma, acumuló un alza del 0,3% en la semana mientras los inversores continúan evaluando el momento del primer recorte de tasas de la Fed. En cuanto a su desempeño frente a otras monedas, el dólar se fortaleció frente al euro (+0,2%), cerrando en EUR 1,08, dado que los datos recientes sugieren la posibilidad de que el BCE realice menos subidas de tasas este año. Contra el yen (+0,8%), ganó impulso después de los datos de inflación, mientras que frente a la libra esterlina perdió (-0,3%), cotizando en GBP 1,27, ligeramente por debajo de los niveles de principios de semana, pero aún cerca de un máximo de dos meses. Por otro lado, el real brasileño continuó depreciándose un 1,3% en la semana, terminando en BRL 5,17. En contraste, el oro experimentó una semana con caídas del 3,3%, alcanzando los USD 2.335 y acercándose a mínimos de dos semanas.

Commodities agrícolas, los más favorecidos.  Durante la semana, el índice Dow Jones de commodities experimentó una caída del 0,5%, aunque acumuló un aumento del 4,1% en el mes. Los energéticos también cayeron un 2%, mostrando una baja del 1,3% en mayo. Los metales también fueron perjudicados con una caída del 2,2%, aunque registran un aumento del 4,5% en el mes. Por otro lado, los granos fueron los más beneficiados, registrando una ganancia semanal del 3,1% y un 7,7% en lo que va de mayo. El WTI cayó un 2,9%, arrastrado por un aumento en los inventarios semanales en EE. UU. En cuanto a la soja, aumentó un 1,6% hasta los USD 458 la tonelada, sumando un 9% en el mes, aunque muestra una caída anual del 5%. Este incremento se relaciona con las recientes inundaciones en Rio Grande do Sul en Brasil, que afectaron al 34% de la cosecha aún sin recolectar. Además, el informe WASDE de mayo prevé que la producción mundial de soja crezca a 687 millones de toneladas en 2024/2025, debido a un aumento en la producción en América del Sur, Estados Unidos y Sudáfrica, y anticipa que las exportaciones mundiales de soja se incrementen un 4% respecto al año anterior. Finalmente, el cobre experimentó una reducción del 5,5% en la semana debido a que la demanda de importaciones en China, el principal consumidor de cobre del mundo, se mantuvo en niveles bajos a pesar de la escasez de suministro de mineral y los bajos volúmenes de tratamiento en la enorme industria de refinación del país. Sin embargo, acumula un aumento del 4,7% en mayo y un 23% en el año.

Temporada de balances llegando a su fin. Actualmente, el 96% de las compañías del S&P 500 han reportado sus resultados y, en general, ha sido una temporada positiva para el índice. La sorpresa en beneficios se sitúa en el 8,34%, con el 80,1% de las empresas superando las estimaciones. Las ventas han mostrado un aumento del 4,09% interanual, mientras que los beneficios, impulsados por Nvidia, lo hicieron en un 7,71% interanual, superando el 3,2% esperado previo al inicio de la temporada. Sin embargo, es importante destacar la amplia dispersión en cuanto al crecimiento en beneficios, con industrias como Salud, Energía y Materiales presentando amplias caídas, mientras que Comunicaciones, Consumo Discrecional, Servicios Públicos y Tecnología han experimentado crecimientos importantes. En la semana, el informe más destacado fue el de NVIDIA, que publicó los mejores resultados de la temporada y superó las exigentes estimaciones del mercado. Las acciones aumentaron un 9,3% el día posterior al reporte, cotizando por encima de los USD 1000 por primera vez. Las ganancias en el primer trimestre de 2024 fueron un 262% interanual y superaron en un 5,4% las expectativas. Se destacaron los ingresos provenientes del centro de datos, el principal motor de crecimiento debido a la inteligencia artificial, con un total de USD 22,600 millones, mostrando un crecimiento del 23% trimestre a trimestre y del 424% interanual. Además, se anunció un split de acciones de 10 a 1 y un aumento del dividendo anual de USD 0,16 a USD 0,40. Otra empresa destacada fue Palo Alto Networks en ciberseguridad, que publicó resultados por encima de lo esperado tanto en ingresos como en beneficios, pero las acciones cayeron un 6% debido a la expectativa de una menor facturación para el próximo trimestre. Aun así, la empresa subió un 1,2% en la semana.

Lo que viene. Esta semana en EE. UU., tendremos varios datos económicos clave. El índice de precios (PCE), el indicador preferido de la Fed, se espera que registre un aumento del 0,3%, manteniendo el mismo valor que los dos últimos meses anteriores. También se espera un aumento del 0,3% tanto en el ingreso como en el gasto personal, marcando una desaceleración respecto al 0,5% y 0,8%, respectivamente, en marzo. Estos datos son importantes para evaluar las presiones sobre los precios en la economía tras los PMIs positivos de la semana pasada. Además, conoceremos la segunda estimación de crecimiento del PIB en el primer trimestre, y se espera una leve revisión a la baja hasta el 1,5% (desde la estimación anticipada del 1,6%). Varios funcionarios de la Fed también hablarán a lo largo de la semana. En cuanto a la temporada de resultados, aunque está llegando a su fin, conoceremos nuevos balances de empresas como Salesforce, Costco Wholesale y Dell. Es importante tener en cuenta que los mercados estadounidenses estarán cerrados el lunes en conmemoración del Día de los Caídos. A nivel mundial, la atención estará centrada en las tasas de inflación de Alemania y de la zona del euro. En Japón, se prestará atención a las palabras de apertura del Gobernador Ueda en una conferencia organizada por el Banco de Japón, así como a la publicación de datos sobre la confianza del consumidor, el IPC de Tokio, las ventas minoristas, la tasa de desempleo y la producción industrial.