Segunda semana consecutiva de caídas para los mercados globales. Los datos publicados en EE. UU. confirmaron que la actividad económica mantiene un ritmo de crecimiento sostenido, impulsado por el consumo en un contexto de leve presión al alza en los precios. Los datos laborales de octubre sorprendieron negativamente, con una creación de empleos no agrícolas menor a la esperada, aunque esto se atribuye al impacto de los huracanes y la huelga en Boeing, por lo que no afectó las expectativas generales. Sin embargo, el desempleo se mantuvo en mínimos y los salarios aceleraron nuevamente, superando la inflación. Con estos datos y los inversores viendo mayores probabilidades de triunfo para Trump, se moderaron las expectativas de recortes de tasas por parte de la Fed, llevando los rendimientos de los bonos del Tesoro al alza, con la UST10Y alcanzando casi 4,40%, su nivel más alto en cuatro meses. En este contexto, los bonos continuaron en baja y las acciones retrocedieron de manera generalizada, especialmente en las de mayor capitalización. El dólar se mantuvo firme y los commodities registraron retrocesos. Con este marco, comienza la semana más importante de los últimos cuatro años, dado que EE. UU. elegirá a su próximo presidente en un escenario de paridad extrema entre Trump y Harris, lo cual podría demorar el anuncio del ganador y añadir incertidumbre y volatilidad al mercado. Además, la Fed anunciará su decisión de tasa de interés tras la baja de 50 pb en septiembre, y el mercado descuenta una reducción de 25 pb.

Sube el gasto y repunta la inflación. En septiembre, los ingresos de las familias aumentaron un 0,3% m/m, ligeramente por encima del 0,2% m/m de agosto, mientras que el gasto nominal subió un 0,5% m/m, acelerando respecto al 0,3% m/m del mes anterior. Esto redujo la tasa de ahorro al 4,6% de los ingresos. En el último año, los ingresos crecieron un 5,5% impulsados principalmente por los salarios, y el gasto subió un 5,1%, lo que permitió una mejora del 10% en la tasa de ahorro familiar. Medido a precios constantes, el consumo privado creció un 0,4% m/m (4,3% anualizado), el doble que en agosto, gracias al buen desempeño del consumo de bienes, que subió un 0,7% m/m (8,2% anualizado), mientras que el de servicios aumentó un 0,2% m/m (2,6% anualizado), manteniendo el ritmo de meses anteriores. La mala noticia de esta publicación fue el leve repunte de la inflación implícita: el PCE general subió un 0,2% m/m y un 2,2% i.a., mientras que el PCE Core y el Super Core (sin vivienda) aceleraron su marcha con aumentos de 0,25% m/m y 0,31% m/m, respectivamente, el peor resultado en cinco meses, acumulando en el último año alzas de 2,7% y 2,1%, respectivamente. 

No landing confirmado. La primera estimación del PBI del 3Q24 publicada la semana pasada confirmó la fortaleza de la actividad económica en EE. UU., que continúa creciendo a buen ritmo pese al entorno de tasas de interés más altas. En concreto, durante el 3Q24, la economía estadounidense se expandió un 2,8% t/t anualizado. Aunque ligeramente inferior al 3,0% t/t registrado en el 2Q24, superó las expectativas de mercado de 2,5% t/t. Entre los factores de demanda, destacó la aceleración del consumo privado, que creció un 3,7% t/t, su mejor desempeño desde el 1Q23 y casi 1 punto porcentual más que en el 2Q24, aportando 2,5 pp al crecimiento del PBI. Este repunte se debió al aumento del 6% t/t en el consumo de bienes, mientras que el de servicios mantuvo un sólido dinamismo con un alza del 2,6% t/t. El consumo público también contribuyó al crecimiento, aumentando un 5,0% t/t y aportando 0,85 pp al PBI, impulsado por un alza del 11% t/t en el gasto en defensa. Las exportaciones tuvieron un desempeño notable, expandiéndose un 8,9% t/t (frente al 1,0% del 2Q24), aunque su efecto fue compensado por el incremento del 11,2% en las importaciones, resultando en una contribución negativa de 0,56 pp de las exportaciones netas al crecimiento del trimestre. La aceleración del consumo privado y del gasto público contrastó con la desaceleración de la inversión, que, tras expandirse un 8,3% t/t en el 2Q24, apenas creció un 0,3% t/t, debido a una moderación en la inversión fija (afectada por la caída de la inversión residencial, aunque con crecimiento en maquinaria) y un aporte negativo de los inventarios. Con estos resultados, el PBI acumuló un alza del 2,9% i.a. en los últimos cuatro trimestres, en línea con el crecimiento observado en 2023.

Malo, pero transitorio. Los datos del mercado laboral de octubre sorprendieron al mercado, aunque esta vez por la negativa, mostrando un desempeño muy pobre. Sin embargo, la lectura es difusa debido al impacto de los huracanes y la huelga en Boeing, por lo que se espera una recuperación en noviembre. En detalle, la creación de empleo no agrícola en octubre fue de apenas 12 mil puestos, muy por debajo de los 223 mil creados en septiembre y siendo el registro más bajo desde diciembre de 2020. El empleo agrícola tampoco mostró buenos resultados, con una pérdida de 380 mil puestos. A pesar de estos malos datos, la tasa de desocupación se mantuvo en 4,1% —aunque en términos absolutos aumentó en 150 mil personas— debido a una reducción de 218 mil personas en la Población Económicamente Activa durante el mes. A pesar de las distorsiones causadas por los huracanes, los salarios continuaron al alza, con un incremento de 0,4% m/m (frente al 0,3% m/m de los dos meses anteriores), acumulando una suba de 4,1% en los últimos doce meses, lo que sostiene la mejora de los salarios reales y respalda el consumo familiar.

Menos recortes y higher for longer. Ante la sólida performance del nivel de actividad, el leve repunte de la inflación y las incertidumbres que plantea la situación fiscal en EE. UU. –especialmente si gana Trump, dado su programa fiscal más expansivo y su política comercial más restrictiva que podría añadir presión sobre los precios–, el mercado continúa ajustando sus expectativas de recortes de tasas de la Fed. Para este año, los inversores anticipan dos recortes de 25 pb cada uno –el primero se espera esta semana–, mientras que para el próximo año ahora proyectan solo tres recortes de 25 pb en marzo, junio y octubre, lo que llevaría la tasa de referencia a un cierre de 3,75% en 2025. Esto representa una fuerte revisión respecto a las expectativas de principios de octubre, cuando se preveían siete recortes de 25 pb hasta septiembre de 2025. En este contexto, los rendimientos de los bonos del Tesoro continuaron al alza: la UST2Y aumentó 11 pb llegando a 4,20%, y la UST10Y subió 13 pb para cerrar la semana en 4,36%, su nivel más alto en cuatro meses, acumulando un alza de 68 pb desde la última reducción de la tasa de referencia de la Fed.

Dólar estable y commodities en baja. El dólar mantuvo su presión alcista. Aunque en la última semana mostró un comportamiento estable con un leve retroceso frente al euro, el DXY ha subido 3,5% en los últimos 30 días. El avance más notable se dio nuevamente frente al yen japonés, que cerró la semana en USDJPY 152, un 0,4% más que la semana anterior y 6,5% por encima del mes pasado. Frente a las monedas emergentes, el dólar avanzó 2,8% contra el real brasileño, acumulando un alza de 7,7% en el último mes y cerrando la semana en USDBRL 5,87, su nivel más alto desde mayo de 2020. En cuanto a los commodities, todos registraron bajas semanales: el WTI retrocedió 3,2%, volviendo a situarse por debajo de los USD 70 por barril ante las posibles decisiones de Arabia Saudita de aumentar la producción y el impacto de un menor crecimiento en China. La soja cayó 0,5%, acumulando una baja mensual de 7%, mientras que el cobre subió 0,2% pero ha perdido 3,3% en el último mes. Finalmente, el oro retrocedió 0,5%, aunque sigue cotizando en niveles máximos históricos.

Sigue el ajuste en el mercado. Segunda semana negativa para Wall Street, con caídas en bonos y acciones. El índice agregado de bonos retrocedió 0,9% en la semana, acumulando una baja de 3,5% en los últimos 30 días. Los más afectados fueron nuevamente los bonos Investment Grade, que cayeron 1,2% en la semana y 4,4% en el último mes, mientras que los bonos del Tesoro y los High Yield bajaron 0,9% y 0,7%, respectivamente, acumulando caídas de 3,3% y 1,9%, respectivamente, en el mismo período. En el mercado de acciones, los tres principales índices también cerraron con pérdidas: el Nasdaq fue el más golpeado con una caída de 1,5%, seguido por el S&P 500 que retrocedió 1,4%, mientras que el Dow Jones perdió 0,2%. En cuanto al rendimiento semanal por sectores, la mayoría operó en baja, destacándose el tecnológico, que perdió 2,8% debido a la caída en las Megacaps: Apple retrocedió 3,7%, Nvidia 4,3% y Microsoft 4,2%. Por otro lado, el sector de comunicación lideró las ganancias con un avance de 1,7%, impulsado por Alphabet, cuyas acciones subieron 3,6% y compensaron la caída de 1,1% en Meta. En el sector de consumo discrecional, Tesla bajó 7,5%, aunque la pérdida fue parcialmente compensada por el alza de 5,4% en Amazon.

Sigue la temporada de balances. La semana fue crucial para la temporada de reportes corporativos, con 5 de las 7 magníficas presentando sus resultados: Alphabet (positivo), Meta (neutral), Microsoft (neutral), Apple (neutral) y Amazon (positivo). Hasta ahora, 176 empresas del S&P 500, que representan el 35% del índice y alcanzan el 70,2% de su capitalización, ya publicaron sus balances. En general, las ventas aumentaron 5,3% i.a. y los beneficios 8,5% i.a., aunque con una marcada disparidad entre sectores: comunicación y consumo discrecional mostraron incrementos del 26% y 22%, respectivamente, mientras que energía e industrial registraron contracciones del 20% y 11%, respectivamente.

Trump, Harris y Powell. Esta semana será decisiva para los mercados globales, ya que EE. UU. elegirá a su próximo presidente, y las encuestas muestran una paridad extrema entre Trump y Harris, aunque Trump tendría una ligera ventaja y el mercado ya lo percibe como favorito. La estrecha competencia en varios estados clave podría retrasar los resultados, añadiendo incertidumbre y volatilidad en un contexto de dos semanas de caídas en medio de un año de máximos históricos para las acciones. Además, el jueves, la Fed anunciará su política monetaria, y se anticipa un recorte de 25 pb en la tasa de interés, tras la reducción de 50 pb en septiembre. En cuanto a los datos económicos, se espera que el PMI de servicios del ISM indique crecimiento en el sector, aunque en desaceleración. También se publicarán el índice preliminar de confianza del consumidor de Michigan, datos comerciales, los PMI finales de servicios globales y cambios en el crédito al consumo. La temporada de reportes corporativos continuará, con el foco en grandes y medianas empresas como Vertex Pharmaceuticals, Palantir, Zoetis, Marriott, AIG, Apollo, Ferrari, Qualcomm, Toyota, CVS y Gilead Sciences.