- Las derivaciones del conflicto bélico actual y las tensiones políticas del espacio de gobierno representan mayores costos para la política fiscal. La búsqueda de equilibrio en el frente fiscal debe ser una premisa fundamental para la estabilización macroeconómica.
- El intento de la política de ingresos en matizar el deterioro social es solo un instrumento temporal dada la dinámica inflacionaria mensual. El conjunto de la política fiscal debe arribar a un espacio de minimizar gasto y evitar mayor presión impositiva.
Resumen
- Las dificultades actuales en el desempeño de la gestión fiscal se derivan principalmente de la falta de cohesión política sobre el programa macroeconómico derivado del acuerdo con el FMI.
- El intento de recomposición de ingresos mediante el anuncio de un nuevo IFE o bonos temporales a los sectores sociales de menores ingresos, solo es una medida transitoria que debe estar integrada en un programa económico con medidas de mayor alcance.
- La recaudación impositiva de marzo de 2022 totalizó $1.241.089 millones lo cual se tradujo en un crecimiento de 62,5% respecto de marzo de 2021. El aumento nominal interanual de la recaudación se sostiene por encima del aumento de precios.
- El poder adquisitivo interanual de la recaudación tributaria evidencia una recuperación de 7,5% debido a que la inflación interanual en ese mismo período se situó en 55%. Esto genera una recuperación relativa para los ingresos fiscales.
- El resultado primario de febrero 2022 registró un déficit de $76.284 millones y un déficit financiero de $136.899 millones luego de incluir los intereses netos de deuda pública de $60.615 millones.
- Durante el primer bimestre el año el déficit primario acumulado se sitúa en los $ 92.982 millones, mientras que el resultado financiero presenta es de -$287.563 millones, lo cual evidencia una tendencia negativa de mayor intensidad respecto de los años previos.
- Las dificultades en el desempeño de la política fiscal no solo se derivan de la crisis económica que plantea la estanflación y el nuevo contexto internacional, sino que la falta de cohesión sobre el programa macroeconómica derivado del acuerdo con el FMI expone mayores dificultades para la gestión.
- La política de ingresos deberá trascender el anuncio de bonos e ingresos de emergencia adicionales, pues en una economía de inflación sostenida se transforman en paliativos de corto alcance y magnitud. Contrariamente, la generación de nuevos impuestos no solo establece incertidumbre sobre su alcance temporal, sino que afecta las perspectivas de rentabilidad e inversión.
- En efecto, el aumento de precios expone un ajuste mensual de los ingresos derivados del trabajo y sobre los costos operativos de las empresas con lo cual impulsar la recuperación de los ingresos y el consumo debe incluir medidas adicionales.
- La recaudación impositiva de marzo de 2022 totalizó $1.241.089 millones lo cual se tradujo en un crecimiento de 62,5% respecto de marzo de 2021. El aumento nominal interanual de la recaudación se sostiene por encima del aumento de precios del mismo período.
- El poder adquisitivo interanual de la recaudación tributaria evidencia una recuperación de 7,5% debido a que la inflación interanual anual del período se situó en 55%. Mientras que el crecimiento mensual de los ingresos registró 6,4%. Esto genera una recuperación relativa para los ingresos fiscales.
- El peso relativo de los subsidios energéticos ante un panorama de un aumento súbito de los costos derivados del conflicto Rusia-Ucrania puede determinar una mayor necesidad de recursos fiscales, pues los últimos años el peso promedio fue del 2% del PIB. Esto circunscripto en el programa de meta fiscal puede ser un factor de desalineamiento sustancial y nueva necesidad de emisión monetaria.
- El resultado primario de febrero registró un déficit de -$76.284 millones donde las prestaciones sociales explican el 41% del gasto corriente total. Mientras que los intereses netos de deuda registraron $60.615 y, en consecuencia, el déficit financiero fue -$136.899.