- La política monetaria presentó un sesgo contractivo en marzo para contrarrestar el impulso inflacionario iniciado en diciembre 2021. Es esperable que, ante un nivel alto de inflación mensual, se reaccione comprimiendo el mercado monetario.
- Las reservas internacionales netas se recuperaron tras la recepción de las partidas del programa con el FMI. Las estimaciones de los activos netos de marzo presentan una incipiente recuperación respecto al mes previo situándose en torno a los U$S 4.920 millones.
Resumen
- La gestión monetaria del mes de marzo evidenció un marco contractivo en la cantidad de dinero y en el ajuste de tasa de interés en aras de contrarrestar la dinámica inflacionaria ascendente desde diciembre 2021.
- En ese marco, el análisis de Federico De Cristo de la Universidad Austral remarca el sesgo contractivo de la política monetaria con una importante contracción mensual de la base monetaria del orden de los $ 158.216 millones.
- El torniquete monetario de marzo se establece en el contexto de estabilizar el mercado monetario vía la eliminación gradual de la asistencia al sector público, contraer la cantidad de dinero y la convergencia hacia tasas de interés reales positivas.
- Durante marzo el nivel de Reservas Internacionales brutas presentó una recuperación de 16,5% respecto de febrero 2022, registrando un aumento de U$S 6.119 millones tras el ingreso de U$S 6.247 millones del desembolso del FMI.
- Las Reservas brutas se registran en los U$S 43.137 millones en el cierre de marzo, representando un aumento acumulado de U$S 4.176 millones respecto de diciembre 2021.
- La estimación del nivel neto de reservas internacionales resultaría en U$S 4.920 millones en el cierre de marzo, registrando una recuperación importante en relación al mes anterior debido al aumento bruto generado por el primer cobro del préstamo del FMI.
- La asistencia al Tesoro Nacional en concepto de adelantos transitorios y utilidades correspondiente al primer trimestre del año resultó en $ 122.000 millones. Esto representó una disminución de 10% respecto del promedio de mismo trimestre de 2021.
- El Banco Central reiteró la suba del nivel de tasa de interés de política monetaria a los efectos de intentar establecer incentivos en el mercado local situándola en 47%, mientras que la tasa de referencia efectiva anual es de 58,7%.
- En esa misma dinámica, la tasa de interés BADLAR (depósitos mayoristas) asciende a 54,8% lo cual genera una rentabilidad incipiente frente al mercado de cambios y la inflación anual de marzo.
- En el objetivo de contraer la cantidad de dinero la autoridad monetaria sigue constituyendo deuda con el sector bancario (LELIQ/NOTALIQ) la cual asciende a $ 4,18 billones en el cierre de marzo, nivel sustancialmente superior respecto al promedio del año 2021, $ 2,01 billones.
- La gestión cambiaria continuó bajo el sistema de pequeñas depreciaciones diarias (crawling peg) del 0,1% promedio en el segmento formal derivando un atrasado respecto al índice de precios minorista.
- Durante el mes de marzo las presiones sobre el mercado de cambios informal evidenció un retroceso aunque se espera una reversión hacia la fase ascendente. En el final de marzo la cotización se situó en $/U$S 200, constituyendo una brecha de 72% respecto a la cotización oficial.
- El riesgo país medido por el EMBI+Arg aún se establece en un nivel alto respecto a la región arribando a 1.718 p.b. en el cierre de marzo. Se espera mayor volatilidad durante el primer trimestre del año dado el panorama político nacional y las condiciones macrofinancieras de nuestro país.
- Las Reservas Internacionales brutas registran un saldo de U$S 43.137 millones en cierre de marzo lo cual se traduce en un aumento mensual de U$S 6.119 millones debido, principalmente, al primer desembolso acordado con el FMI que representó una recuperación de U$S 6.247 millones.
- Luego de seis meses consecutivos de caídas en los activos externos, los activos internacionales notaron una recuperación en términos interanuales de U$S 3.544 millones, representando 9% respecto de marzo 2021.
- La estimación del nivel neto de reservas internacionales correspondiente con el descuento de asignaciones por derechos especiales de giro del FMI, obligaciones monetarias con otras entidades (swaps) y los depósitos por encajes en moneda extranjeras de entidades financieras resultaría en U$S 4.918 millones en el cierre de marzo. Esto a pesar del aumento registrado durante agosto debido a la recepción de los DEG del FMI de U$S 4.319 millones y de U$S 6.752 millones pues, ambas partidas se contabilizaron como aumento bruto de reservas.
- Durante el primer bimestre del año la asistencia al Tesoro Nacional en concepto de adelantos transitorios y utilidades se registró en $ 122.000 millones, representando una disminución del 10% respecto del promedio del mismo trimestre de 2021, el cual se había situado en los U$S 135.000 millones. Esto se traduce en la anulación de uno de los canales de expansión monetaria en virtud del acuerdo con el FMI.
- La gestión monetaria del mes de marzo evidencio un sesgo netamente contractivo en aras de afectar el impulso inflacionario. El análisis de Federico De Cristo, economista y profesor de la Universidad Austral, evidencia el sesgo contractivo de la política monetaria con una importante contracción mensual de la base monetaria del orden de los $ 158,216 millones y un efecto acumulado de la tasa de los depósitos a plazo que, a su vez, contribuyó a minimizar la demanda de divisas.
- El torniquete monetario de marzo se establece en el contexto de estabilizar el mercado monetario vía la eliminación gradual de la asistencia al sector público, contraer la cantidad de dinero y la convergencia hacia tasas de interés reales positivas. Aspecto que en el mediano plazo no está libre de riesgo en relación a incumplimientos derivados de un mayor peso relativo de los servicios de deuda.
- Sin embargo, desde la estrategia de contraer la cantidad de dinero para digerir los excesos monetarios, el Banco Central sigue constituyendo pasivos con el sector bancario (LELIQ/NOTALIQ) devengando intereses. En efecto, los pasivos con los bancos en el cierre de febrero se establecen en $ 4,18 billones, representando un 108% por encima del nivel promedio del año 2021, $ 2,01 billones.
- La depreciación nominal promedio de marzo continuó en 0,1%, nivel similar al primer bimestre del año y menor a la dinámica de los demás precios de la economía, implicando un atraso cambiario. Concretamente, el mercado minorista en el cierre de marzo registró una depreciación de 8% respecto de principios de año, con una cotización promedio de cierre en $ 116,45 aunque luego del impuesto País y la nueva retención, la cotización efectiva resulta en $ 192,15.
- En el mes de marzo se establecieron menos presiones cambiarias sobre el mercado informal como consecuencia de la gestión monetaria y el influjo de divisas. No obstante, la cotización en este mercado sigue influenciada por el ciclo político, la incertidumbre sobre el rumbo inflacionario y económico, generando una nueva fase de volatilidad en la cotización en la segunda parte de abril. En concreto, la cotización informal en el cierre de marzo registró $/U$S 200 desde los $/U$S 211 de febrero.
- El nivel de tasa de política monetaria reiteró ascensos hacia el final de marzo y principios de abril para establecerse en 47%, es decir, por encima del 42,5% de febrero. Las expectativas en relación a aumento del nivel de tasa vuelven a activarse dada la necesidad del programa monetaria del año en curso.
- En ese mismo sentido, la tasa de interés por depósitos mayoristas se presenta con cierta rentabilidad frente al mercado de cambios y el nivel de inflación. La misma se establece en 55% en su valor efectivo anual.
- El riesgo soberano medido por el EMBI+Arg se establece en 1.718 p.b. en el cierre de marzo 2022. Esto nota cierta disminución respecto de fines de febrero 2022 cuando el índice se situó en los 1.816 p.b. No obstante, se espera mayor volatilidad del índice derivado del alto nivel de incertidumbre de mercado que generan las tensiones del espacio político de gobierno y la falta de cohesión con la gestión económica.