¿Qué pasó?
Internacional

Semana con elevada volatilidad. Mientras la FED dio pistas de una política monetaria más restrictiva, los buenos balances de las empresas le dieron impulso a los mercados hacia el cierre de la última semana, permitiendo cerrar en alza por primera vez en el año.

El plano sanitario está dejando de ser la principal preocupación de los inversores, dado que los contagios diarios comenzaron a ceder, al tiempo que se mantiene baja la mortalidad. A su vez, la proporción de vacunados alrededor del globo continúa en aumento, y ya alcanza al 50% de la población con las dos dosis. Sin contar una tercera vacunación, este número continúa al alza en relación a las muertes, lo que lleva a considerar que el COVID-19 dejaría de ser una preocupación para los mercados durante los próximos meses.

Con respecto al marco económico, en la última semana se publicó el PBI del 4Q21, que marcó un crecimiento de 6,9% t/t, acelerando el ritmo desde el 2,3% t/t que había marcado en el 3Q21, y por encima de las expectativas (5,5%). Con este resultado, en 2021 la economía americana creció 5,7% i.a., recuperándose de la caída de 3,4% i.a. registrada en 2020. Vale destacar que gran parte del crecimiento del 4Q21 tuvo que ver con la acumulación de inventarios, que contribuyó con 4,9 pp, mientras que el consumo y la inversión, si bien mejoraron respecto al 3Q21, marcaron un crecimiento muy modesto: el consumo privado subió 3,3% t/t y la inversión sólo 1,3% t/t. El flojo desempeño del consumo en diciembre se vio reflejado en la publicación del ingreso y consumo personal, que resultaron en 0,3% m/m y -0,6% m/m, ambos por debajo tanto de las expectativas como del mes previo. Esto se justificaría con la aparición de la nueva cepa, que llevó a un menor consumo y a mayores restricciones en la economía. El Índice de Precios Implícitos del Consumo (PCE), que es de referencia para la FED, en diciembre subió 0,4% m/m y cerró 2021 con un alza de 5,5%, en tanto que el PCE core subió 0,5% en el mes y 4,9% en el año, superando las previsiones de la FED.

Lo más importante de la semana fue la minuta de la reunión de la FED, que anunció la suba de tasas que se efectivizaría en marzo. Jerome Powell, presidente de la entidad, aclaró que el riesgo inflacionario que está sacudiendo al país no volvería a los niveles prepandemia en el corto plazo, por lo que las medidas de política contractiva se volverían inminentes para controlar esta variable. A su vez, comentó que aún existe el riesgo de que la inflación continúe en aumento, aunque desde la entidad no creían que esto pudiese ocurrir en el país. Sumado a esto, indicó que la resolución de los inconvenientes con las cadenas de suministros tomarían un mayor tiempo de lo esperado, lo que presionaría aún más los precios al alza. 

Bajo este escenario, los mercados de renta fija reaccionaron y la USD10YR alcanzó un nuevo máximo para los rendimientos de los últimos dos años. Sin embargo, la estabilidad de los últimos días llevó a un leve aumento de la demanda de estos bonos, que terminaron la semana en 1,78%, sólo 1 pb respecto a la semana previa. La USD2YR sí marcó un repunte en la última semana, al subir 11 pb y cerrar en 1,17%. De esta forma, la comprensión del spread de tasas lleva a un mayor aplanamiento de la curva, que muestra el debilitamiento de la economía norteamericana esperado por los inversores. 

Con respecto a la renta variable, los mercados lograron cerrar en verde después de tres semanas: mientras el Dow Jones avanzó un 1,4%, el S&P lo hizo en un 0,9%, en tanto que el índice Nasdaq se mantuvo sin variaciones. Sin embargo, los índices acumulan caídas en lo que va de enero de 4,7%, 7,2% y 12,1%, respectivamente, lo que demuestra el débil mes que presentaron. Dentro de los sectores, el energético (5,1%) volvió a destacarse, seguido por el tecnológico (2,4%), que se vio impulsado por resultados de balances clave, que repuntaron en los últimos días. Estos fueron los casos de Apple (5,1%), Microsoft (4%) y Visa (13%), que lograron resultados por sobre las expectativas del mercado, llevando así a un repunte en el sector. Mientras Apple se destacó por su repunte en las ganancias por el iPhone, su principal producto, Visa logró alcanzar los USD 7 MM gracias a la masiva venta de pasajes aéreos durante el último trimestre. En contrapartida, dentro de los principales perdedores se encontraron los sectores industrial (-1,5%) y de consumo discrecional (-1,3%). Este último retrocedió luego de que la firma Tesla -que representa un 18% del sector- cayera un 9% semanal tras presentar menores expectativas para el año 2022.

El ETF de mercados emergentes EEM cerró con una baja de 3,5% mensual, aunque LATAM se destacó nuevamente con el ETF ILF, que marcó una suba de 1,2%. El principal impulsor de esta suba fue Brasil que, medido en su ETF EWZ, alcanzó un alza de 4,1% en la semana, impulsado por las acciones del sector bancario y Petrobras, que marcaron subas de entre el 6% y 9%. Con esta performance, en lo que va del mes el índice de Brasil acumula un alza de 11%, siendo la bolsa de mejor desempeño global.

En el mercado de commodities el petróleo volvió a cerrar al alza, marcando una suba semanal de 2,4% y alcanzando 14,5% en lo que va del mes. El gas natural subió 16% en la semana, afectado principalmente por el conflicto geopolítico que se está dando entre Rusia -principal proveedor de Europa- y Ucrania. La tensión existente entre estos países hace considerar posibles problemas de suministros por toda Europa, lo que impulsó el precio al alza hasta acumular un 20,8% en lo que va de enero.

Local

Tras tres semanas de extrema tensión, el anuncio de un memorando de entendimiento con el FMI y el pago del vencimiento de deuda evitaron el escenario de default. Se dieron los primeros pasos para alcanzar un acuerdo, en el que se plantean metas fiscales y monetarias que permitirán estirar 2 años los vencimientos de deuda con el organismo, en tanto y cuanto el gobierno cumpla con los objetivos planteados. Ahora el gobierno deberá presentar los detalles al Congreso, que lo deberá aprobar, y luego lo tendrá que presentar al directorio del FMI, para que este lo confirme. Es un primer paso de varios que faltan dar, por lo que la tensión seguirá presente hasta que se logre el acuerdo definitivo. Mientras tanto, en un contexto en el que la brecha cambiaria se mantiene por encima del 100%, el BCRA continuó vendiendo divisas y, tras el pago de deuda del viernes, el stock de reservas netas quedó prácticamente en cero. 

En la última semana de enero el mercado cambiario continuó deteriorándose debido a la mayor demanda de divisas. El agro liquidó USD 537 M (vs 552 M la semana previa) y se perfila para terminar enero con liquidaciones mayores a USD 2.500 M, 20% superiores a las de enero de 2021. Pese al buen ritmo en la oferta de divisas, la demanda para importaciones, viajes y pagos de deuda obligaron al BCRA a vender USD 192 M en la semana, por lo que en enero acumula ventas por USD 126 M. Con estas intervenciones, además de los pagos netos de deuda por USD 780 M, las reservas internacionales cayeron USD 1.324 M, cerrando la semana en USD 37.621 M, en tanto que las netas bajaron a USD 115 M. Con el pago de intereses por USD 380 M que deberá realizar esta semana, las reservas netas pasarían  a ser negativas por primera vez desde diciembre de 2015. Pese a la fragilidad que muestra el mercado de cambios, el BCRA mantuvo el ritmo de devaluación en torno al 28% anualizado. Con la buena recepción que tuvo el hecho de evitar el default, el dólar MEP y el CCL cayeron más de 3% el viernes, terminando la semana levemente por debajo del cierre de la semana previa, por lo que la brecha cambiaria se mantiene por encima del 100%.

En el mercado de renta fija, casi todos los bonos se encuentran en verde. Dentro de los bonos en dólares, tanto los de ley extranjera como los de ley local terminaron al alza, con los de largo plazo promediando subas de 9%. Con respecto a los bonos en moneda local, los dollar linked resultaron negativos, con el T2V2 cayendo un 2,4% y el TV23 un 4,2%. La razón detrás de este movimiento es que el acuerdo disipó las probabilidades de una devaluación inminente, lo que culminó en una caída en la demanda de estos activos. Los bonos CER a largo plazo, como el PARP o el DICP, fueron los principales ganadores entre los de moneda local, gracias a las perspectivas de alta inflación que subyacen en el mediano y largo plazo. 

En cuanto al mercado de renta variable, el Merval cerró la semana con una suba de 5,6% en moneda local y de 7,5% en USD. Todos los sectores terminaron al alza, encabezados por el energético (7,2%) -impulsado también por el contexto internacional- y el financiero (8,5%). Dentro de los principales ganadores, aparece YPF, con una suba semanal de 11,1% -acumulando así un alza en enero de 21,5%-, y Grupo Financiero Galicia, que avanzó un 11%, logrando así revertir el rendimiento negativo que venía mostrando y acumulando un 7,6% en lo que va del mes. En sentido opuesto, Laboratorio Richmond fue el principal perdedor, con una caída de 1,6%, viéndose afectado -entre otros factores- por la baja en la mortalidad que está mostrando el COVID-19. De esta forma, la firma acumula una suba mensual de sólo 1,5%.

Lo que viene
Internacional

Con más del 80% de los balances publicados, se espera que en la semana entrante los mercados no muestren una volatilidad tan alta. En cuanto a los datos económicos, se publicará el PMI manufacturero, el de servicios y el compuesto -tanto de Markit como de ISM- del mes de enero. El de servicios, que es considerado de mayor relevancia para el mercado norteamericano, se proyecta levemente por debajo al mes previo. Los datos más importantes se conocerán el viernes, cuando se publiquen los indicadores laborales de enero: se espera que la tasa de desempleo se mantenga en 3,9%. 

Local

La semana será importante por el seguimiento a la letra chica del acuerdo con el FMI, especialmente sobre la forma en la que el gobierno piensa encarar la reducción del déficit fiscal, dado que esto puede generar presiones internas. Se publicará, además, la recaudación de enero, el saldo comercial con Brasil y se conocerán las primeras estimaciones privadas respecto a la inflación de enero. Nuestras estimaciones apuntan a un alza de 3,8% en el IPC.