Internacional
¿Qué pasó?

Si bien el aumento de casos de COVID-19 en EE.UU sigue generando incertidumbre entre los inversores, la primera semana de agosto terminó con el mercado de equity al alza (impulsado por el buen dato de empleo publicado el viernes). El de renta fija, por su parte, recibió el impacto del alza en los rendimientos de los bonos del Tesoro. Tras cerrar julio con un promedio de 78.900 nuevos casos diarios, en la primera semana de agosto la cantidad de contagiados por COVID subió a 110.000 casos por día (incluso el viernes se registraron más de 250 mil nuevos casos, el registro más alto desde enero), en tanto que la cantidad de fallecidos pasó de 330 a 500 por día.

Si bien hasta ahora no se decretaron medidas de confinamiento, este contexto demora la vuelta a la normalidad y ya hay varias empresas que definieron que la vuelta a la presencialidad se estire un mes más. Mientras tanto, la actividad económica continúa mostrando buen dinamismo: el PMI manufacturero en julio marcó un récord al alcanzar los  63,4. El PMI de servicios se ubicó en 59,9 y, si bien marca una moderación respecto a los dos meses previos, continúa reflejando un muy buen dinamismo de la actividad en el arranque del tercer trimestre.

Sin dudas, lo más importante de la semana pasó el viernes con el dato de empleo no agrícola, que superó todas las expectativas: concretamente, en julio se crearon 943 mil nuevos puestos de trabajo no agrícolas, el mejor desempeño desde agosto del año pasado, en tanto que la tasa de desocupación cayó a 5,4%, el nivel más bajo desde que arrancó la pandemia. El sector público contribuyó con 240 mil nuevos puestos -el mayor incremento desde junio de 2010- y el sector privado aportó otros 703 mil, levemente por debajo de los 724 mil creados durante junio. El dato de empleo sorprendió, dado que el consenso esperaba 870 mil, mientras que la encuesta de ADP publicada el martes había pronosticado la creación de sólo 330 mil.

Ante este resultado, el rendimiento de los bonos del tesoro revirtió la tendencia que veníamos marcando (llegaron a ubicarse por debajo de 1,20%), cerrando la semana en 1,30%, y retomando los niveles de mediados de julio. Con este marco de fondo, el S&P acumuló en la semana una ganancia de 0,9%, cerrando en un nuevo récord impulsado por el sector bancario que, tras el aumento de la UST10Y, las acciones subieron 2% y cerraron la semana con un alza de 3,7%. Si bien el alza de la UST10Y impactó negativamente en el Nasdaq, en la semana subió 1%.

En el mercado de renta fija se registraron bajas generalizadas, especialmente los de mayor duration. Los commodities arrancaron el mes con bajas generalizadas (sólo los agrícolas se diferenciaron), entre los que se destacaron la caída del petróleo -de casi el 8%- y del cobre, que retrocedió 3,2%. El dólar se fortaleció contra la mayoría de las monedas: el DXY -que mide el desempeño del dólar respecto a las 6 principales monedas del mundo- cerró en 92,9, 1,2% por encima del cierre de la semana previa. Esta tendencia también se reflejó respecto a las monedas emergentes, entre las que destacamos la performance del real, que finalizó en la semana en USDBRL 5,23, 2% más que la semana anterior.

Desde el lado corporativo, el 80% de las empresas que componen el S&P500 ya presentaron sus balances del 2Q21: el 90% tuvo resultados por encima a lo esperado, los ingresos subieron 23% i.a. y las ganancias tuvieron un salto del 85% i.a., impulsadas por las del sector energético, bancos y consumo discrecional. 

Lo que viene

El dato de empleo del viernes pasado le pone más expectativa a la publicación del IPC del miércoles: el mercado espera un alza de 0,5%, la mitad que el de junio, y 5,3% i.a. Si el dato supera nuevamente las expectativas del mercado, le pondrá más presión a la FED y a los rendimientos de los bonos del Tesoro. 

Local
¿Qué pasó?

De a poco el mercado cambiario deja atrás el fuerte excedente de los últimos seis meses, cuando el BCRA compró más de USD 1.100 M mensuales (permitieron recuperar reservas internacionales). Si bien en la última semana logró revertir el mal desempeño del cierre de julio, con la liquidación del agro moderando su ritmo, el mercado cambiario empieza a mostrarse más tenso. Concretamente, en la última semana el agro liquidó casi USD 700 M, 10% menos que la semana anterior, y el BCRA compró USD 115 M, muy poco en comparación con las primeras semanas de los meses anteriores y considerando el refuerzo del cepo de principios de julio.

Detrás de estos resultados se encuentra una demanda de divisas que viene en ascenso, de la mano de la recuperación del nivel de actividad y la incertidumbre que genera una inflación muy alta. Con las intervenciones en el mercado de cambios, el BCRA pudo compensar en parte el pago de USD 350 M de intereses al FM, y las reservas internacionales cayeron USD 527 M, misma caída que la semana anterior, cerrando la semana con un stock bruto de USD 42.069 M. El tipo de cambio oficial subió 0,2% en la semana (promedió un alza diaria del 12,7% anualizado), mientras que el MEP y el CCL -medido con el AL30- subieron 1%, ampliando la brecha al 76%. En tanto, el CCL promedio de otras operaciones sin restricciones cayó 1,7% -la primera caída desde junio-, finalizando la semana en $177.

Mientras tensa el mercado de cambios, el mercado de pesos también se va complicando, y le pone una luz amarilla al BCRA. Con un déficit fiscal que irá tomando impulso en los próximos meses, debido a la mayor suba del gasto, se le irá cargando la mochila al Tesoro, que además deberá afrontar los vencimientos de deuda en moneda local. En la primera licitación del mes, el Tesoro sólo pudo refinanciar el 64% de los $230.000 M que vencían, lo que lo obliga a lograr muy buenos resultados en las próximas dos licitaciones para no presionar al BCRA con más emisión.

Al respecto, la asistencia del BCRA al Tesoro viene en franco ascenso: en abril y en mayo la asistencia neta al Tesoro generó una contracción de base monetaria de $13.000 M, en junio pasó a ser expansiva por $48.600 M, en julio -a pesar del que la recaudación continuó mostrándose muy dinámica, con un alza de 67% i.a.- subió a $188.000 M y ya en la primera semana de agosto generó una expansión de $40.000 M.

Mientras tanto, con un contexto electoral que va tomando forma, el riesgo país continúa lateralizando, aunque en la última semana bajó a 1.575 pb, en el nivel más bajo del último mes y medio.

Lo que viene

Lo más importante de la semana pasará el jueves 12, cuando el INDEC publique el IPC de julio. Nuestras estimaciones apuntan a un alza del 3%, igual a la del consenso.