Primeros movimientos

Futuros auguran para hoy una rueda calma, con el S&P 500 neutral y el Nasdaq corrigiendo marginalmente a la baja. La tasa de Treasuries a 10 años ronda el 1,56% y los commodities operan mixtos.  El petróleo sube levemente hasta USD 64,2 por barril, al tiempo que la plata y el oro caen.

Ayer, las tecnológicas tuvieron un sorprendente rally. Tesla subió 20% en la rueda y pasó de estar -36% a solo -23%, respecto de su máximo registrado dos meses atrás. Empresas como Apple, Facebook y Qualcomm subieron más de 4%, Paypal subió 7%. El Nasdaq cerró con un alza de 3,9% y se encuentra ahora -7,3% desde su máximo de mediados de febrero.

El CEO de BioNTech, la empresa alemana asociada a Pfizer en la elaboración de una vacuna contra el COVID-19, remarcó ayer que su compañía podría producir hasta 3.000 millones de dosis en 2022, si existe necesidad y demanda suficiente.

Panorama global

EEUU a tasas Chinas

Faltando 4 días para que finalicen los beneficios suplementarios por desempleo aprobados en diciembre de 2020, la Cámara Baja está lista para aprobar definitivamente el nuevo programa de estímulo fiscal por USD 1,9 trillones. Por la mayoría que tienen en ambas cámaras, los demócratas lograron que la magnitud del estímulo no sufra modificaciones pese a la negativa de los republicanos en varios puntos.

El presidente, Joe Biden, firmaría hoy mismo el proyecto y los primeros cheques por USD 1.400 comenzarían a llegar a más de 150 millones de habitantes en las próximas semanas.

Ante la inminente aprobación, la OCDE duplicó su proyección de crecimiento para el PBI de Estados Unidos en 2021 (de 3.2% a 6.5%). Ayer, fue el banco Morgan Stanley quien corrigió al alza su estimación, pasando de 6,5% a 7,3%, un ritmo de expansión no visto desde 1951.

China

El crecimiento económico de China sigue intacto. Los hogares aumentaron notablemente su ahorro durante la pandemia y existe mucha demanda de consumo reprimida que está comenzando a liberarse. Por otro lado, las intenciones de inversión del sector corporativo se encuentran en máximos, en línea con un aumento en la rentabilidad.

La Asamblea del Partido Comunista Chino, que está teniendo lugar en Beijing, definió para 2021 un objetivo de crecimiento por encima del 6%,  junto con un déficit fiscal de 3,2% del PBI; lo cual no implica una fuerte contracción desde el 3,7% registrado en 2020, esto debería traer alivio al mercado.

No obstante, el escenario monetario es menos claro y genera incertidumbre. Los comentarios recientes de autoridades bancarias alertando sobre una “burbuja de especulación" en el sector inmobiliario, sentaron las bases para una suba potencial de tasas y generaron una corrección en el mercado chino, que tiene un impacto cada vez mayor sobre las bolsas globales.

Afortunadamente, las autoridades parecen haber aprendido del pasado que subas repentinas en las tasas de interés generan más daño que beneficios, no solo en las cotizaciones sino también en la economía. Es por esto que las autoridades se están inclinando por medidas diferentes. Estas últimas van desde requerir mayores pagos iniciales para acceder al crédito hipotecario, hasta directamente restringir el crédito y la oferta de tierras a determinados grupos de desarrolladores inmobiliarios.

De momento no vemos signos preocupantes en las condiciones monetarias de China. Más allá de las palabras hawkish de sus autoridades, el rendimiento de los bonos soberanos se mantuvo estable en los últimos meses, sin sentir el efecto de la suba de tasas en USA. Además, las tasas interbancarias continúan en mínimos al tiempo que la tasa SHIBOR a 7 días (referente de la tasa de política monetaria) se normalizó, desde un pico de 3% durante el año nuevo lunar, hasta 2% anual. El spread de rendimientos corporativos ha estado comprimiéndose, indicando que no hay estrés en el mercado financiero.

Más allá de ello, el temor de un alza en las tasas de interés se sumó a valuaciones que habían subido fuertemente en los primeros 45 días del año (MSCI China +20%, China Tech +31%) desencadenando una corrección importante. Las tecnológicas chinas (CQQQ) acumulan una baja de 18% desde los máximos de febrero, valor que contrasta con la baja de -7,3% que acumula el Nasdaq norteamericano.

No obstante, a pesar de la abrupta baja reciente, las tecnológicas chinas acumulan un retorno de 70% desde que comenzó el año 2020, superando ampliamente al Nasdaq (+47%).

Panorama local

No encuentran piso. Los bonos soberanos volvieron a padecer una jornada de caídas. En lo que va del año, estos bonos acumulan bajas promedio de un 14%.  El consenso de que no habría un acuerdo con el fondo ni con el Club de París, hasta después de las elecciones, fue en detrimento de las expectativas de los inversores, alejando al país del sendero de mayor responsabilidad fiscal y monetaria que dichos acuerdos impondrían.

Suben los paralelos. Tanto el dólar MEP como el CCL tuvieron leves subas en torno en torno al 0,3%, cerrando en 145,4 el MEP y 148,5 el CCL.

Mejoraron los bonos CER mientras los bonos tasa fija operaron dispares. Los bonos CER retomaron la senda alcista, con subas de hasta 0,5%. Los bonos a tasa fija operaron dispares, con el TO21 subiendo 1,2% y el TO23 cayendo 2,2%. Los bonos dollar linked fueron los más destacados, con subas de más de 1%.

Respiró el Merval. Ayer, el Merval tuvo un pequeño rebote, de 0,4%, que parece bajo comparándolo con el 1,4% promedio que subieron las bolsas LATAM. Las principales subas estuvieron en Edenor (+3,2%), ByMA (+3,2) y Banco Macro (+2,3%).

Apuntando al 35%

Ayer, el BCRA devaluó 9 centavos. El ritmo de devaluación semanal anualizada, tras haber tocado el 32% ayer, subió a 34%. Los contratos de dólar futuro de ROFEX operaron -en su mayoría- con leves subas. Un punto para destacar es que ROFEX venía mostrándose muy sensible al ritmo devaluatorio del gobierno, es decir, caía mucho cuando este se reducía; si bien es temprano para obtener conclusiones, el mercado no reaccionó a la baja del ritmo devaluatorio de esta semana, lo cual indica que se percibe que la misma será temporal.

Más agrodólares

El USDA estima que la cosecha de soja en Argentina llegará a 47.5 M de tn - 0.5 menos de lo que preveía en febrero y 3% menor a la del año pasado- en tanto que dejó sin cambios las estimaciones de la producción de trigo y maíz que quedaron en 17.2 M de tn y 52.7 M de tn respectivamente, lo que implica una caída superior del 10% respecto a la campaña anterior.

Con esta producción y los actuales  precios internacionales, la producción agrícola de este año sería de USD45.000 M, la más alta de la última década. En este contexto, las exportaciones del sector (sumando los derivados de soja) llegarían a USD 50.000 M, 25% superior a las registradas en 2020.