El contexto global es cada vez más desafiante dado que a la presión inflacionaria se le suman los temores de recesión producto del alza en las tasas de interés. Esto golpeó las cotizaciones de varias compañías y las lleva a tener ratios más atractivos. Ante este escenario, la cartera en base a recomendaciones de la encuesta de analistas de Bloomberg aprovecha estos descuentos para proyectar un mayor rendimiento de cara al mediano y largo plazo. 

En lo que va del año los principales índices estadounidenses sufrieron fuertes pérdidas producto de la suba de tasas de la FED y el deterioro en las perspectivas de crecimiento. El Nasdaq acumula una caída de 27%, mientras que el S&P volvió a ingresar en terreno de bear market al marcar un retroceso de 20,5%. Esto afectó la mayor parte de los sectores que componen al S&P a excepción del energético, favorecido por el fuerte impulso que marcó el precio del petróleo luego de estallar la invasión a Ucrania. 

Dado el fuerte ajuste en las valuaciones, este escenario también otorga interesantes oportunidades de entrada a aquellas firmas que acumulan caídas de entre 20% y 40% en lo que va del año. Muchas de ellas, con sólidas proyecciones de crecimiento, se vieron afectadas negativamente por la desaceleración de la actividad pero aún mantienen interesantes ratios para aprovechar como inversión una vez superado el contexto actual. 

Cartera CEDEARs BBG – Bloomberg

Nuestra cartera de CEDEARs BBG fue seleccionada en base a un listado de compañías que tienen un promedio de recomendaciones de ¨compra¨ en más del 80% de los casos de acuerdo a la encuesta realizada por la plataforma Bloomberg. En dicha selección se destacan compañías de gran capitalización que resaltan dentro de sus industrias no sólo por su sólida posición de mercado sino también por el atractivo que muestran sus ratios financieros principalmente ante la caída que sufrieron durante este año.

Esto lleva a que las firmas sean consideradas como las más atractivas para el mediano a largo plazo y con un Price target por encima de su valor actual. Entre las firmas seleccionadas se estableció una importante diversificación de sectores para así disminuir el riesgo intrínseco de una misma firma o industria económica. Concretamente, su tenencia de compañías tecnológicas asciende hasta el 50%, mientras que el restante se distribuye en consumo defensivo (17%), salud (17%), consumo discrecional (8%) y financiero (8%). Esto lleva a que la cartera tenga un tercio de la posición en una estrategia defensiva, lo que la lleva a disminuir la volatilidad ante un escenario de mayor desaceleración económica. 

Respecto a la tenencia de tecnológicas, dada la caída de casi 28% que viene marcando el sector en lo que va del año, se vuelve un momento atractivo de ingreso para así aprovechar el rebote que pueda marcar esta industria en un futuro. Dentro de las firmas que componen al sector, las mismas tienen la característica de un mayor poder de mercado, bajo endeudamiento y balances atractivos. Esto las vuelve menos fluctuantes ante un contexto de suba de tasas que termina por impactar en mayor medida a las empresas que presentan altos ratios de endeudamiento dado el encarecimiento de la renovación de esta deuda. 

Dada la diversificación de activos que componen a la cartera se seleccionó como benchmark de la misma al S&P, el cual marca un recorrido similar en lo que va del 2022 (-21,8% vs. -21,2% SPY). Sin embargo, dado el fuerte impulso que marcaron las compañías tecnológicas en los últimos tres años, la cartera viene mostrando una fuerte diferenciación en relación al índice. 

Por su alta ponderación de tecnológicas, la cartera marca un P/E mayor al benchmark (33,3 vs. 20,7), ratio principalmente impulsado por Amazon (105,5). Sin embargo, según Bloomberg estas firmas aún demuestran sólidas estructuras para el largo plazo gracias a ser consideradas compañías de ¨alta calidad¨, destacando así su posición frente al mercado. Esto les da un beneficio en un escenario aún inflacionario, ya que su poder de mercado les permite traspasar parte del encarecimiento de sus costos a precios finales. 

Todas estas compañías pueden adquirirse como CEDEARs en moneda local, lo que también otorga cobertura ante un aumento del dólar CCL ya que son activos que no sólo dependen de la acción subyacente sino también del alza de este dólar financiero. Esta cartera se recomienda para perfiles más agresivos ya que puede verse afectada en el corto plazo por el escenario contractivo a nivel internacional, llevando así a una mayor volatilidad que otras carteras más conservadoras. Sin embargo, se recomienda aprovechar el rally alcista que pueden llegar a producir estas firmas ante un mayor optimismo en el mercado global para el largo plazo.