La semana pasada, la curva de precios operó con ligeras subas en todos los contratos. La suba promedio de la curva fue del 0,48%, destacando las alzas de 1,2% y 1,3% en los contratos de noviembre y febrero 2024, que señalan una mayor corrección devaluatoria esperada en el proceso de cambio de administración.
El contrato de marzo cotiza en $209,38, implicando un ritmo de devaluación esperada del 6,2% para el resto de marzo, algo por encima del 5,6% que mantuvo hasta ahora. La curva de tasas implícitas señala un ritmo de devaluación mensual promedio de 6,7% hasta junio, acelerándose a 7,4% entre julio y diciembre. Estos precios reflejan temores a que la inflación se acelere y/o el Gobierno se vea obligado a devaluar para corregir las cuentas externas.
Con una suba promedio de 1,3 puntos en las tasas implícitas, esta semana vimos una ampliación de la curva. La tasa del contrato de marzo se ubica en 75,2%. En tanto que, desde abril hasta julio quedan entre 82,2% y 91,1%. El tramo restante hasta febrero 2024 se ubica entre 95,6% y 121,2%.