A pesar del retroceso que marcó la inflación en el último mes, la suba que continúa marcando el petróleo vuelve a poner al encarecimiento energético en la mira. En la jornada de ayer el WTI avanzó un 4,7% hasta ubicarse nuevamente en USD 97.

Las razones de esta fuerte suba se debieron nuevamente a conflictos geopolíticos. Se dieron a conocer disturbios en la capital de Libia, uno de los mayores productores de petróleo del mundo y miembro de la OPEP. La preocupación respecto a una nueva guerra civil en el país derivó en los inconvenientes que esto tendría en su producción de crudo, dando así un mayor impulso al precio del commodity.

A esto se le sumó la noticia que un influyente religioso iraquí anunció su retirada definitiva del escenario político del país. Siendo Irak un país sumamente influyente por la religión musulmana, la noticia derivó en conflictos políticos y disturbios generalizados. Al igual que para Libia, en caso de continuar esto podría interrumpir parte de la producción de petróleo del país. Al ser el segundo mayor productor de petróleo del mundo, la noticia terminó por afectar aún más al precio del commodity.

Cabe destacar la suba que viene teniendo el petróleo desde mediados de julio. Nuevos conflictos geopolíticos sumados a un posible recorte de producción por parte de la OPEP+ llevaron al crudo a avanzar un 10% en lo que va del mes de agosto. Esto vuelve a poner en la mira el efecto del encarecimiento energético sobre la presión inflacionaria global y, en caso de avanzar con esta tendencia, las políticas más agresivas que deberán tomar los bancos centrales para controlarla.