Ayer se dio a conocer el dato de inflación de septiembre que en un primer momento encendió las alarmas al resultar en 0,4% m/m, superando tanto al dato previo de 0,1% m/m como a las expectativas de 0,2% m/m. Con este resultado, en los últimos doce meses el IPC acumuló un alza de 8,2%. Peor fue el resultado del IPC Core, que igualó el resultado de agosto en 0,6% m/m, superando el pronóstico de 0,5% m/m y acumulando en el último año un alza de 6,6% i.a., el mayor registro desde 1982.

Pese al mal dato, que seguramente presione a la FED con más ajuste de tasas, los mercados cerraron una sólida jornada al acumular importantes ganancias: Dow Jones (2,8%), S&P (2,5%) y Nasdaq (2,3%). Todos los sectores que componen al S&P cerraron con resultados positivos a pesar de haber iniciado la jornada a la baja. Dentro de estos, el sector financiero y el energético marcaron las mayores alzas del día (4,1%), este último favorecido por la suba de 1,9% que registró el petróleo ante la publicación de menores inventarios de petróleo a los esperados en EE.UU. El rebote que marcó el mercado se debe a factores técnicos dado el fuerte registro de venta que marcaba el mercado norteamericano. A esto se le suma que la fuerte suba llevó a considerar que el IPC finalmente había alcanzado un techo, lo que fue tomado como una señal optimista por el mercado. Cabe destacar que durante la última publicación del IPC los mercados registraron una fuerte suba a pesar del dato negativo. Aunque a la jornada siguiente terminaron desplomándose, perdiendo la totalidad de las ganancias acumuladas. Por esta razón, recomendamos ser cautos a la volatilidad que pueda darse a lo largo de la jornada de hoy. 

Dentro de los ítems que componen al índice, energía marcó el mayor retroceso mensual (-2,1% m/m) aunque moderando su caída respecto a la contracción que registró en agosto (-5% m/m). Esto se debió principalmente a que el precio del crudo marcó una menor contracción, registrando una baja de 4,9% m/m vs. -10,7 m/m en agosto. Por su parte, el sector vivienda, el cual registra una mayor ponderación dentro del índice (42%), igualó el dato de agosto en 0,7% m/m. A pesar de que las tasas de hipotecas se ubican en torno al 7%, máximo de los últimos 20 años, no se espera que el sector viviendas marque una fuerte desaceleración en el corto plazo. Esto se debe al rezago de ajuste de precios del sector, lo que genera mayor incertidumbre respecto a la dificultad de hacer retroceder al IPC Core. 

Respecto a los rendimientos de bonos del tesoro, se registró un alza para todos los tramos de la curva, especialmente en la parte corta de la misma. A pesar de los sólidos resultados en el mercado de renta variable, aumentaron las proyecciones de suba de tasas para las próximas reuniones de la FED, lo que terminó impactando negativamente en los bonos norteamericanos. De esta manera, la USD 10 YR volvió a acercarse al 4% (3,95%) mientras que la USD 2 YR marcó un fuerte avance de 18pb hasta 4,47%, llevando al spread entre ambos a 53pb. Esto se dio porque el resultado del IPC aumentó las expectativas de inflación en el corto plazo, impactando fuertemente en los rendimientos a dicho plazo.