La Fed anunció una nueva suba de tasas, esta vez de 50 pb, alcanzando así el rango de 4,25% a 4,5%. Con el objetivo de controlar la inflación histórica que afectó a EE.UU. después de la pandemia, en lo que va del año las tasas de interés registraron un alza de 425 pb, alcanzando su máximo valor desde 2007. Sin embargo, esta nueva suba ya estaba descontada dentro de las expectativas del mercado,  que reaccionó favorablemente ante la menor magnitud del anuncio en comparación a las reuniones anteriores. Luego de cuatro subas consecutivas de 75pb, el alza de 50pb fue tomado con optimismo por los inversores que empiezan a ver una mayor flexibilización en la política monetaria de la Fed. 

Sin embargo, Jerome Powell indicó que la entidad aún tiene un largo camino por recorrer antes de empezar a reducir las tasas, contrario a lo que espera el mercado. Esto se demostró en las proyecciones que presentó la entidad ajustando al alza las tasas para 2023 a 5,1%, lo que implicaría que aún tendría margen para continuar con su política al mismo tiempo que recién comenzaría a reducir las tasas en 2024 (4,1%). A esto se le sumó la contracción en el crecimiento que proyectó la Fed para 2023, pasando de un PBI esperado de 1,2% en septiembre a 0,5% publicado ayer. Por su parte, el desempleo se pronosticó en 4,6% vs. 4,4% el dato previo, mientras que el PCE se corrigió 0,3% al alza hasta 3,1%. La fuerte caída en el dato de crecimiento licuó el optimismo del mercado llevando a que los índices reviertan sus ganancias del inicio del día.

Con este marco de fondo, los principales índices cerraron a la baja encabezados por el Nasdaq (-0,7%) y seguidos por el S&P (-0,6%) y el Dow Jones (-0,5%). Dentro de los sectores, sólo el de salud logró ubicarse en terreno positivo (0,2%), mientras que los sectores de comunicaciones (-1,3%) y financiero (-1,3%), dos de los más afectados ante una mayor caída de la actividad económica, fueron las mayores bajas. Quedó así demostrada la sobre reacción del mercado luego del dato de inflación, licuando luego parte de las ganancias acumuladas durante la primera jornada del día.

Con el anuncio de ayer, las tasas de interés proyectadas por la Fed superan ampliamente las estimadas por el mercado según los futuros de tasas. Se espera que este escenario golpee a las compañías en el mediano plazo ya que, ante un ajuste de expectativas, afectaría negativamente las valuaciones de las firmas, especialmente aquellas compañías growth y de menor capitalización, las más golpeadas por una mayor tasa de descuento. 

Respecto a la renta fija, las reacciones fueron dispares ya que mientras los bonos corporativos más riesgosos cerraron a la baja (-0,6%), los de mayor calidad quedaron prácticamente sin cambios (-0,1%). Por su parte, la curva de rendimientos de bonos del Tesoro cerró el día a la baja mostrando la mayor demanda que tuvo el mercado por activos menos riesgosos. Así la USD10YR cerró en 3,48% mientras que la USD2YR lo hizo en 4,22%, llevando al spread de ambas a 74pb, uno de los mayores niveles del año.