Ayer se publicó el Índice de Confianza del Consumidor de EE. UU., que elabora The Conference Board. El indicador, utilizado para cuantificar el grado de optimismo de los consumidores respecto del estado actual de la economía, arrojó un resultado de 102,3, por encima del 99,1 que estimaba el consenso de los analistas y desacelerando desde el 103,7 informado en la publicación de abril.
También se difundieron los datos del Índice Nacional de Precios de la Vivienda del mes de marzo. El resultado marcó un aumento del 0,6% m/m, superior al 0,2% m/m que se proyectaba y por debajo del 0,7% m/m registrado en febrero. Con esta información, la variación interanual de este índice se encuentra en el 3,6%, mostrando una desaceleración respecto del 4,2% i.a correspondiente al último informe.
En este escenario, los índices de renta variable cerraron la rueda en forma mixta. Con el sector de Consumo Discrecional (+0,8%) como el más destacado y el de Consumo Básico (-1,1%) como el más afectado, el S&P 500 finalizó la jornada estable. Por su parte, el Nasdaq avanzó un 0,3% y el Dow Jones cedió un 0,2%.
A su vez, se registró una caída en la curva de rendimientos de los títulos de renta fija emitidos por el Tesoro de EE. UU. La tasa a 10 años cayó 8 pb, tomando un valor de 3,69%, y la tasa a 2 años perdió 13 pb, situándose en el 4,46%. Por otro lado, el US Dollar Index retrocedió un 0,2% y cotiza a 104,05.
Con respecto a los commodities, la soja se negocia a un precio de 476 USD/tonelada en el mercado de Chicago, marcando una baja del 3,1% respecto del cierre anterior y alcanzando su valor mínimo desde julio de 2022. Mientras tanto, el petróleo, tensionado por la incertidumbre ante la reunión de la OPEP de la semana próxima, cedió un 4,3% a 69,5 USD/barril, y el oro avanzó un 0,8% y se encuentra cotizando a 1.980 USD/onza.