En una rueda volátil marcada por la publicación de resultados de las empresas y las perspectivas de los próximos pasos de la política económica de la Fed –tras la publicación de importantes datos económicos–, las acciones americanas lograron cerrar al alza. El S&P 500 avanzó 0,5%, mientras que el Nasdaq y el Dow Jones subieron 0,4%. Entre las empresas, Meta ganó un 1,6% después de superar las expectativas de ganancias y señalar una ambiciosa apuesta de inversión en IA de código abierto, y Tesla aumentó un 2,9% a partir de su informe de ganancias, a pesar de no cumplir con las expectativas. Por otro lado, Microsoft se hundió más del 6,2% debido a su decepcionante pronóstico de ingresos, lo que refleja cierto pesimismo sobre la gran apuesta de la compañía por Azure. Por último, Apple bajó ligeramente antes de sus resultados después de la campana.

En cuanto a la renta fija, los rendimientos de los bonos del Tesoro Americano tuvieron un leve retroceso, lo que permitió que los principales índices de bonos tuvieran una jornada al alza. Concretamente, el rendimiento de la UST2Y y el UST10Y bajaron 3 pb y 4 pb, respectivamente, cerrando la rueda en 4,20% y 4,51%, siendo estos los niveles más bajos del mes. Con esto, el índice agregado de bonos compuesto por bonos del Tesoro y corporativos marcó un alza de 0,2%. Esto también impulsó a los bonos emergentes, que ganaron 0,4% en el día.

Los precios de los commodities tuvieron una rueda mixta, con un avance promedio de 0,1%. El petróleo quebró una racha de cuatro ruedas a la baja y repuntó 0,2% hasta USD 72,7 el barril de WTI. Los inversores esperan la reunión de la OPEP+ prevista para el 3 de febrero, anticipando que mantendrán su actual política de suministro, con aumentos adicionales de la oferta recién a partir de abril. Por su parte, el cobre mantuvo la tendencia al alza y ganó 0,7%. La soja fue la perdedora de la jornada, que retrocedió 1,6% hasta USD 384 la tonelada, al tiempo que el oro salió favorecido, marcando una suba del 1,3% y finalizando la jornada en USD 2.794 la onza, nuevo récord histórico.

El dólar a nivel global volvió a retroceder. El DXY perdió 0,2% y quedó en 107,8, impulsado por el retroceso de 0,6% frente al yen y de 0,3% contra el euro y la libra esterlina. En comparación con el real brasileño, subió 0,3% y terminó cotizando en USDBRL 5,85.

El dato económico del día fue la publicación de la primera estimación del PBI de EE. UU. del 4Q24, que marcó una expansión de 2,3% t/t anualizada, muy por debajo de nuestras expectativas de una suba superior al 3,0% y de las del mercado, que esperaban un alza de 2,6%. También lo es comparado con los dos trimestres previos, en los que marcó una expansión promedio de 3,0% t/t anualizado. Vale remarcar que la desaceleración se explicó principalmente por la contribución de los inventarios, que le restaron 0,9 pp al PBI del trimestre. El consumo privado siguió siendo el principal motor del crecimiento, al marcar un alza de 4,2% t/t, acelerando respecto al 3,7% que había presentado en el trimestre anterior y siendo el mejor desempeño desde el 1Q23. Asimismo, fue positivo el aporte del consumo público, que, si bien moderó el ritmo de crecimiento respecto al trimestre anterior, avanzó 2,5%. Con el resultado del último trimestre, en todo 2024 el PBI de EE. UU. observó un crecimiento del 2,8% i.a., prácticamente el mismo que había marcado en los dos años anteriores.

Por el lado de los indicadores laborales, las solicitudes iniciales de desempleo en EE. UU. correspondientes a la semana pasada se redujeron en 16.000 con respecto a la semana anterior, quedando en 207.000, por debajo de las expectativas del mercado de 220.000. Mientras tanto, las solicitudes recurrentes cayeron en 42.000 desde el máximo de más de tres años alcanzado la semana anterior, situándose en 1.858.000 en el período que finalizó el 18 de enero. El resultado fue consistente con la declaración de la Reserva Federal de que el mercado laboral estadounidense se ha estabilizado cerca de niveles sólidos, lo que da margen para que las tasas se mantengan en el nivel restrictivo durante un período más largo.

Paralelamente, en Europa se publicaron los datos del PBI del 4Q24 de la Eurozona, que marcó un crecimiento nulo (aunque quedó 0,9% por encima del 4Q23), interrumpiendo la recuperación que había mostrado en el 3Q24, cuando creció 0,4% t/t (1,6% anualizado). Entre los países, destacó la contracción de 0,2% t/t de Alemania, en tanto que España logró un avance de 0,8%. En este contexto, el BCE recortó 25 pb la tasa de interés de referencia hasta 2,75%, siendo el cuarto recorte consecutivo, y señaló la posibilidad de una mayor flexibilización en los próximos meses, indicando que el proceso de desinflación seguía en marcha.