Luego de que Trump anunciara una pausa de 90 días en la aplicación de los aranceles para aquellos países que no tomaron represalias, los mercados registraron un fuerte rebote, con una suba histórica del 10% en un día para el S&P 500. La medida representa una nueva reversión en el cambiante enfoque de política económica de la administración. Además, suspendería las tasas sobre proveedores de bienes a EE. UU. que son clave y que inicialmente habían sido afectados por impuestos agresivos, como Vietnam y Camboya. Aun así, Trump continuó escalando la guerra comercial con China al elevar sus aranceles al 125%, mientras que las medidas contra la Unión Europea probablemente no sean suspendidas tras el anuncio de represalias por parte de Bruselas. Esta nueva decisión impulsada por el presidente Trump también empujó al petróleo, al oro y la soja. En tanto, las tasas de los bonos del Tesoro continuaron en alza. Por último, las minutas de la Fed mostraron preocupación por la presión inflacionaria.

Las acciones se dispararon el miércoles, rebotando tras haber tocado mínimos de más de un año más temprano en la jornada. Luego de la noticia de la pausa por 90 días en los aranceles, el S&P 500 subió un 10% y el Dow Jones un 6,9%. El Nasdaq 100 fue el que más se destacó, con un alza de hasta el 10,2%, impulsado por el renovado interés por activos de riesgo en las tecnológicas. En este sentido, Nvidia se disparó un 17%, Tesla un 19% y Apple un 9,4%.

Al igual que en las acciones, en commodities se vio un fuerte rebote en el precio del petróleo WTI, el oro y la soja. En concreto, el WTI avanzó un 4,3% y cerró en USD 62,5, favorecido por la suspensión transitoria de aranceles. También fue respaldado por el repunte del último informe de la EIA, que reveló una caída mayor a la esperada en los inventarios de gasolina y destilados, lo que ayudó a compensar un leve aumento en los inventarios de crudo. El oro, por su lado, aumentó un 3,7% a raíz del contexto general y del informe del World Gold Council, que señala que los ETFs respaldados en oro registraron inversiones por 226,5 toneladas métricas, valuadas en USD 21.100 M durante el primer trimestre. En los agrícolas, la soja subió un 2,0% hasta USD 372,1.

El rendimiento de la UST10Y llegó a tocar el 4,40% y cerró la rueda en 4,35%, en tanto que la UST2Y subió 24 pb y terminó en 3,92%. Informes sobre ventas de deuda por parte de extranjeros y señales de un desplazamiento hacia posiciones en efectivo sugieren que los inversores están liquidando activos, lo que alimenta el temor de que los bonos del Tesoro de EE. UU. estén perdiendo su estatus tradicional de refugio seguro. Con esto, el mercado ahora descuenta tres recortes de tasas por parte de la Fed para este año. En contraposición a la deuda del Tesoro, los High Yield ganaron un 2,0%, Emergentes un 1,8% e Investment Grade un 0,8%.

En monedas, el índice DXY perdió un 0,1%, explicado por una caída del 0,5% frente a la libra, que lo dejó en un nivel de 102,86. En Brasil el dólar también cedió terreno, con una caída del 2,9%, cerrando en USDBRL 5,84. Por su parte, el yuan siguió depreciándose ante el dólar, con una baja del 0,2%.

En la noticia económica del día, las minutas de la reunión de marzo de la Reserva Federal reflejaron una creciente preocupación por las presiones inflacionarias, impulsadas por el impacto de aranceles más altos. Aunque persiste la incertidumbre sobre la magnitud y duración de estos efectos, la mayoría de los funcionarios considera que los riesgos inflacionarios están sesgados al alza, mientras que los riesgos sobre el empleo apuntan a la baja. La Fed mantuvo sin cambios la tasa de referencia en 4,25%-4,5% y, pese a recortar su previsión de crecimiento para 2025, mantuvo su proyección de recortes de tasas por 50 pb en el año.