Tras la moderación de Trump en su tono hacia China, los mercados rebotaron con fuerza, liderados por el sector tecnológico. Los commodities mostraron un desempeño positivo, el oro alcanzó un nuevo máximo histórico y el dólar volvió a fortalecerse.

Trump insinuó una posible distensión en las tensiones comerciales con China, tras haber amenazado días antes con tarifas del 100%, lo que permitió un rebote de los mercados en EE. UU. Sin embargo, persisten los riesgos: China impuso controles a minerales estratégicos, nuevas tarifas y medidas contra empresas estadounidenses, mientras ambas potencias mantienen gravámenes elevados a la espera de un eventual acuerdo. En este contexto, otros países, como Canadá, buscan equilibrar sus vínculos con China e India sin generar fricciones con Washington.

Así, los principales índices de acciones estadounidenses cerraron con fuertes subas el lunes, recuperándose tras la abrupta caída del viernes. El Nasdaq lideró con un avance de 2,2%, seguido por el S&P 500 con 1,6%, y por último el Dow Jones, que ganó 1,3%. Las alzas fueron impulsadas por el sector tecnológico, con Nvidia y AMD subiendo 2,9% y 0,8%, Oracle escalando 5,1% y Broadcom disparándose 9,9% tras confirmar su asociación en IA con OpenAI.

Por el feriado federal no se operó en el mercado de deuda soberana. No obstante, la deuda de mercados emergentes avanzó 0,7%, los bonos corporativos High Yield subieron 0,6% y los Investment Grade registraron una ganancia de 0,3%.

El dólar se fortaleció nuevamente debido a la debilidad del euro y del yen. Concretamente, el DXY aumentó 0,3% gracias a la caída de 0,4% en el euro y al alza de 0,8% del dólar frente al yen, alcanzando un nivel de 99,28. Por su parte, el oro continuó con el impresionante rally de las últimas ruedas y avanzó otro 2,3%, cerrando en USD 4.110 la onza. Con esto, acumula en el año una suba de 56,6%.

El petróleo WTI se incrementó 1,3% hasta USD 59,6 por barril, tras tocar un mínimo de cinco meses, gracias a expectativas de menor tensión comercial entre EE. UU. y China luego de los comentarios más moderados de Trump y Vance. Aun así, persisten presiones bajistas por la mayor oferta: la OPEP+ aumentó la producción en 630.000 bpd en septiembre, generando temores de sobreabundancia. Además, la tregua entre Israel y Hamas redujo los riesgos geopolíticos en Medio Oriente. En paralelo, el cobre subió 5,2% y recuperó la pérdida anterior después de que Trump dejara abierta la puerta a negociar con China. Previamente, el metal había caído más de 4% por la amenaza de aranceles del 100% a productos chinos desde el 1° de noviembre, lo que avivó temores de guerra comercial y menor demanda global.

En la noticia económica del día, China registró en septiembre un superávit comercial de USD 90.450 M, por debajo de lo esperado pero por encima del nivel del año previo. Esto se debió a un fuerte crecimiento de las exportaciones (+8,3% i.a., mayor ritmo desde marzo) y un repunte de las importaciones (+7,4%, máximo desde abril) gracias a una mayor demanda interna previa a la Golden Week –un feriado extendido por festividades nacionales, durante el cual gran parte del país detiene su actividad económica–. Aun así, el superávit con EE. UU. se amplió a USD 22.820 M, pese a la fuerte caída del intercambio bilateral. En el acumulado del año, el superávit alcanza los USD 875.100 M.