A la espera del informe de empleo, los resultados macroeconómicos en la jornada de ayer fueron variados. La noticia positiva fue la caída en el PCE, índice de precios del consumo personal y el dato analizado por la Fed, que resultó en 0,3% m/m igualando al mes previo pero por debajo de las expectativas de 0,5% m/m. El acumulado alcanzó un 6% i.a., logrando así el menor dato desde febrero de este año. La misma sorpresa marcó el PCE Core que se ubicó en 0,2% m/m vs. expectativas de 0,3% m/m, registrando una suba interanual de 5%. Por su parte, los ingresos personales superaron a las expectativas –0,7% m/m vs 0,4% m/m–, al mismo tiempo que el gasto personal superó al dato de septiembre de 0,6% m/m y se ubicó en 0,8% m/m. Sin embargo, la preocupación radica en la caída que está registrando el nivel de ahorro, que se ubica en los menores niveles de los últimos diez años. Esto implicaría que el nivel de consumo podría estar alcanzando un límite, llevando a desacelerar su ritmo o a aumentar el endeudamiento de los consumidores en los próximos meses.

Entre otros datos, la actividad industrial retrocedió durante noviembre con el PMI (ISM) marcando 49 puntos, su peor registro de los últimos dos años (un resultado por debajo de los 50 puntos representa una contracción de la actividad económica). Las fábricas anunciaron una menor demanda de bienes durante el último mes del año, lo que llevó a que el índice de precios del sector manufacturero también retroceda hasta 43 puntos vs. 47,5 esperados.  

Este escenario arrojó resultados dispares con el Nasdaq avanzando un 0,1% mientras que el Dow Jones y el S&P retrocedieron 0,5% y 0,1%, respectivamente. Las empresas value fueron las más afectadas de la jornada luego de que la firma Salesforce recortara sus perspectivas de ingresos para el 4Q22 y anunciara la renuncia de su vicedirector. Esta empresa indicó que el encarecimiento del dólar viene afectando negativamente al nivel de ganancias, impactando directamente en la recaudación del último trimestre del año. A pesar de haber publicado datos del 3Q22 por encima de las expectativas, el mercado tomó estas noticias con escepticismo llevando a que ayer la firma caiga un 8,3%. 

Las novedades impactaron de forma dispar a los sectores: el de comunicaciones (0,6%) y el de salud (0,3%) marcaron las mayores subas del día, mientras que los sectores de consumo defensivo (-0,5%) y financiero (-0,6%) tuvieron las mayores bajas. Dentro del consumo defensivo, el sector de retail fue el principal detractor de la jornada cayendo un 1,4% y acumulando una baja de 0,4% en la última semana.   

En el marco global, China registró un dato de actividad por encima de las expectativas, con el PMI manufacturero de Caixin resultando en 49,4 puntos. A esto se le sumó la noticia de que el gobierno anunciaría una relajación en las restricciones por COVID-19 dentro de los próximos días. El rumor no sólo impulsó al mercado chino (0,5%) sino que hizo avanzar al precio del crudo (0,8%) ante lo que sería una mayor demanda energética futura.   

Respecto a Latinoamérica, la noticia negativa fue el adelanto del PBI del 3Q22 de Brasil que no alcanzó los pronósticos al ubicarse en 0,4% t/t, lo que implicaría una suba anual de 3,6% vs el 3,7% esperado. Esto se sumó a que el PMI manufacturero de ese país registró su peor valor desde junio de 2020 al ubicarse en 44,5 puntos. De esta manera, Brasil empieza a verse afectado por los efectos de una fuerte política monetaria contractiva. Como consecuencia, ayer el mercado registró una caída de 0,8%. Sin embargo, cabe destacar que este país continúa marcando una de las políticas más eficientes contra la inflación, lo que podría llevarlo a recortar las tasas de interés en el mediano plazo.