El jueves fue una jornada marcada por la volatilidad en los mercados locales, en medio de las declaraciones acerca del acuerdo con el FMI y de una licitación desafiante para el Tesoro. Sin embargo, al cierre de la rueda, la deuda soberana en pesos registró variaciones marginales, mientras que la deuda en dólares mostró un leve repunte. En tanto, se publicó el EMAE de enero y se dieron a conocer los saldos de la cuenta corriente de 2024.

En la licitación de ayer, el Tesoro adjudicó $6,2 billones, logrando un rollover del 100,2% sobre los vencimientos del mes. Se identifican dos puntos clave a monitorear: primero, el 18% del total adjudicado corresponde a los dollar-linked de junio 2025 (TZV25) y enero 2026 (TZVD5), que se colocaron a tasas negativas (-1,98% TIR y 0% TIR, respectivamente), lo que evidencia una mayor demanda de cobertura. Segundo, el mercado continúa mostrando resistencia a extender duration, posicionándose en Lecaps cortas, lo cual responde a la presión al alza en las tasas de corto plazo que se viene observando y a la incertidumbre respecto a la continuidad del esquema cambiario actual.

En enero, la economía creció 0,6% m/m desestacionalizado y encadenó su novena suba mensual consecutiva. Desde abril, el nivel de actividad acumula una mejora de 7,8% y se ubica 3,7% por encima del registrado en noviembre de 2023. En la comparación interanual, el avance fue del 6,5% i.a. Por otro lado, a nivel sectorial destacaron las subas en intermediación financiera (+25,7% i.a.), comercio (+11,3% i.a.) y construcción (+1,9% i.a.), que volvió a mostrar crecimiento tras más de un año de retrocesos. Por el contrario, cinco sectores registraron caídas interanuales, entre los cuales sobresale hoteles y restaurantes (-2,8% i.a.).

Asimismo, la cuenta corriente registró en 2024 un superávit de USD 6.285 M, revirtiendo el déficit de USD 20.956 M observado en 2023. La mejora, de más de USD 27.000 M, estuvo explicada por un superávit comercial de bienes de USD 18.870 M, que contrastó con el rojo de años anteriores. Pese a este saldo positivo, la cuenta de rentas continuó mostrando un fuerte déficit (USD 19.126 M), principalmente por intereses y utilidades giradas al exterior. También persistió el desequilibrio en la balanza de servicios, influido por el déficit turístico en un contexto de tipo de cambio real apreciado. En línea con esto, la cuenta financiera mostró una dinámica diferente respecto de años previos: cerró con un ingreso neto de USD 4.061 M, tras una salida de USD 26.737 M en 2023.

En cuanto a la deuda soberana en pesos, tuvo una jornada estable. La curva a tasa fija registró subas del 0,2%, impulsadas mayormente por el tramo largo, al tiempo que los duales repuntaron un 0,8%. La curva CER también se mantuvo casi invariable, aunque el tramo corto registró subas del 0,4%. En tanto, la demanda de cobertura dollar-linked se mantiene firme y avanzó un 0,8%, siendo el TZVD5 el más destacado, con ganancias del 2%.

Los futuros de dólar en Rofex habían comenzado la rueda a la baja y terminaron con subas promedio del 0,38%. El impulso provino del tramo largo, con alzas del 1,2% para febrero de 2026 y del 1,1% para noviembre de 2025. De esta forma, la devaluación mensual implícita promedio a diciembre de este año creció al 2,8%. Los volúmenes se mantienen por encima de 1.000 M de contratos y el interés abierto cercano a los USD 4 M.

Con respecto a la deuda soberana en dólares, tanto los Bonares como los Globales tuvieron una jornada volátil, comenzando con alzas de hasta el 1% para luego revertir parte de esas ganancias y cerrar con una suba del 0,4%. Los BOPREAL, por su parte, fueron los mayores ganadores, con un repunte del 1,3%. Mientras, el riesgo país cayó tan solo 10 pb, cerrando en 759 pb.

En paralelo, el BCRA anotó otra rueda consecutiva con saldo vendedor, esta vez por USD 84 M, acumulando ventas por USD 1.169 M en lo que va de marzo. Así, las reservas brutas disminuyeron en USD 24 M, cerrando en USD 26.222 M.

El dólar oficial subió 21 centavos diarios hasta los $1.072,29. De esta manera, el ritmo de devaluación en lo que va de marzo corre al 1,0% promedio mensual. Los dólares financieros, por su parte, operaron con bajas marginales: mientras el MEP (GD30) cayó un 0,3%, el CCL bajó un 0,2%, cerrando en $1.292,9 y $1.295,9, respectivamente. Con esto, las brechas con el dólar oficial se mantuvieron en 21% para ambos tipos de cambio.

El Merval retrocedió un 1,1% en pesos y un 1,0% en dólares, cerrando en un nivel de USD 1.861. El sector financiero, de construcción y utilidades fueron los principales en caer. En acciones, Supervielle, Edenor y Macro lideraron las bajas, con retrocesos superiores al 3,5%. Del otro lado, BYMA ganó un 2,7%, IRSA un 2,6% y Cresud un 1,4%. Entre las acciones que cotizan en la Bolsa de Nueva York, Bioceres rebotó un 10,5%, Adecoagro ganó un 2,2% y Cresud un 1,9%, en tanto que Supervielle, Macro y Galicia perdieron en torno al 3%.