La semana comenzó con un tono negativo para los activos locales, con fuertes caídas en las curvas en pesos y elevada volatilidad en las tasas, que volvieron a operar al alza. Los soberanos en dólares, que habían iniciado la jornada con subas, finalizaron en retroceso. También fue un día adverso para las acciones, que se movieron en dirección contraria al resto de los índices de renta variable a nivel global. Por último, los tipos de cambio financieros y los futuros cortos registraron bajas.
La renta fija en pesos parecería no encontrar piso y volvió a cerrar la rueda con caídas. Las tasas continuaron al alza, presionando los precios a la baja: en el tramo corto, las Lecaps pasaron a rendir 45% TNA (3,7% TEM), desde 37% TNA (3% TEM) la semana pasada, mientras que la tasa de caución a un día trepó a 45% TNA, desde 36% al cierre del viernes. En este contexto, la curva a tasa fija retrocedió 1,1%, aunque se registraron pérdidas más marcadas en el Bonte 2030 y los bonos duales, que cedieron 1,4%. Por su parte, los bonos CER también contrajeron un 1,4%, al tiempo que los dollar-linked mostraron mayor resiliencia, con una baja marginal de 0,1%.
Por su parte, el tipo de cambio oficial aumentó un 0,2% hasta $1.286. En cambio, los dólares financieros operaron con caídas: el MEP (GD30) retrocedió 0,7%, finalizando en $1.281,3, y el CCL cayó 3,2%, cerrando en $1.254. En el mercado de cambios, el BCRA terminó la jornada con un stock de reservas brutas de USD 40.650 M, con un incremento diario de USD 263 M.
Los contratos de dólar futuro en A3 se mantuvieron sin cambios en promedio, con bajas en el tramo corto y subas en el tramo largo. El volumen operado disminuyó significativamente en USD 493 M, hasta los USD 867 M. Sin embargo, el interés abierto continuó en alza y avanzó en USD 259 M. De este incremento, el 90% se concentró en el contrato de agosto, que retrocedió 0,5%. En cuanto a la curva de tasas, el contrato de julio cerró por debajo del A3500, lo que implica una tasa negativa, mientras que el de agosto cerró en 26%, muy por debajo de la curva de Lecap. De esta manera, la devaluación implícita mensual promedio para diciembre de 2025 se ubica en 2,6%.
La deuda soberana en dólares volvió a registrar una jornada negativa, con caídas marginales de 0,1%, impulsada por el tramo largo, que retrocedió 0,4% en promedio. Así, el riesgo país descendió hasta los 759 pb (-11 pb), en tanto que los BOPREAL cerraron con ganancias de 0,2%.
Por otro lado, el Merval operó a la baja, a contramano de Brasil y el S&P 500 que registraron subas de 0,8% y 0,3%, respectivamente. Concretamente, cedió 1,6% en pesos y 0,8% en dólares CCL, cerrando en USD 1.587. Utilidades, materiales e industria fueron los sectores más afectados. En acciones, Mirgor (-3,3%), COME (-3,3%) y Transener (-2,5%) sufrieron las mayores pérdidas, mientras que solo se destacaron positivamente Ternium (2,3%) y Loma Negra (0,2%). Para las acciones que cotizan en Nueva York, la caída promedio fue de 0,8%, siendo Vista (-2,9%), Telecom (-2,1%) y Pampa (-1,9%) las más perjudicadas. Del otro lado, Ternium (2,8%), Globant (1,6%) y Macro (0,8%) lograron mostrar ganancias.
En mayo, la actividad económica presentó una leve contracción de 0,1% m/m. Además, el INDEC ajustó las cifras de meses anteriores, marcando caídas en enero y marzo. Aun así, en la comparación interanual el nivel de actividad creció 5% y acumula una mejora de 6,1% i.a. en lo que va del año. Desglosado por sector, el crecimiento interanual se mantuvo generalizado, con fuertes avances en intermediación financiera, comercio, construcción y turismo. No obstante, algunos sectores clave, como la construcción y el agro, comienzan a evidenciar señales de desaceleración en su ritmo de expansión.