China viene siendo afectada por una nueva ola de COVID-19, sumado a que Hong Kong alcanzó su mayor número de contagios desde que inició la pandemia. A pesar del crecimiento que viene marcando su mercado bursátil durante los últimos días (el Hang Seng avanzó un 6% la última semana), los inversores se encontraban preocupados por la nueva ola de contagios.
Sin embargo, tanto JP Morgan como Credit Suisse indicaron ayer que no esperan que los nuevos contagios afecten en gran medida a la tasa de crecimiento del país. El recorte podría ser sólo de 0,03% a 0,05% de crecimiento, gracias a que más del 80% de su población se encuentra vacunada.
Este mes, China indicó que proyectan un crecimiento de 5,5% para 2022, muy por debajo del 10% que venía promediando el país en los 30 años previos a la pandemia.
Las entidades financieras indicaron que las restricciones por COVID-19 afectarían a la demanda, lo que se ajustaría con la caída de la oferta producto de menores importaciones provenientes de Rusia y Ucrania. Esto sería un beneficio para el país en el corto plazo, aunque los especialistas esperan que el alza en los contagios solo se mantenga hasta mayo o junio.