Ante mayores preocupaciones respecto a la desaceleración económica, el petróleo WTI volvió a retroceder y marcó su valor más bajo desde principios de febrero. De esta manera, el crudo perdió todo el rally alcista que había marcado luego de la invasión rusa a Ucrania, iniciada a finales de febrero. Ante este escenario, los principales índices resultaron con datos mixtos ya que mientras que el Nasdaq retrocedió un 0,2%, tanto el S&P como el Dow Jones avanzaron 0,2% y 0,7% respectivamente.
Walmart presentó tanto ingresos como ganancias por encima de las estimaciones, lo que terminó impulsando al sector de consumo defensivo un 1,1%, llevándolo a ser el ganador de la jornada. La compañía avanzó 5,1% luego de despejar las dudas respecto a cómo la inflación pudo haber afectado las ganancias netas durante el 2Q22. Estos resultados terminaron por impulsar a las empresas Value (0,6%) por encima de las Growth, que cerraron casi sin variaciones (-0,1%). Sin embargo, cabe destacar que la firma mantuvo peores expectativas para los resultados del trimestre en curso. Por el contrario, los malos datos respecto al sector inmobiliario golpearon al real estate y fue el sector con mayor caída de la jornada de ayer (-0,4%).
Las tasas de Treasuries se mantuvieron casi sin variaciones en 2,81% mientras que la tasa a 2 años avanzó 7pb, lo que acentúa la reversión que la curva viene marcando desde hace más de dos meses. Esto demuestra que el mercado aún pronostica altas expectativas de inflación para el corto plazo en relación a la desaceleración económica que mantiene para el largo.
Respecto a los datos económicos, ayer se dio a conocer el dato de inicios de viviendas de julio que resultó ser el menor desde septiembre de 2020. La suba de tasas empieza a afectar al sector inmobiliario ante un encarecimiento de los créditos hipotecarios que afecta fuertemente a la demanda de nuevas viviendas. Esto se confirma con la caída en los permisos de construcción, que resultó en una contracción de 1,3% respecto al dato de junio.