El índice de precios al consumidor norteamericano se incrementó un 0,8% durante noviembre, llevando la inflación acumulada en los últimos 12 meses al 6,8%, su mayor valor desde el año 1982. La inflación núcleo, que excluye precios volátiles de energía y alimentos, se situó en 0,5% mensual y 4,9% interanual.

Ambos datos, publicados al cierre de la semana pasada, agregan presión para que la FED acelere el retiro de estímulos monetarios, preparando el terreno para futuras subas de tasas. El mercado reaccionó con tasas cortas de Treasuries al alza, descontando que la FED decidirá acelerar el Tapering en su reunión de la semana en curso.

Los Treasuries a 2 años alcanzaron el 0,7% anual, su valor más alto desde iniciada la pandemia. Los Treasuries a 3 años ya rinden 1% anual, también en máximos de rendimiento desde 2020.

A pesar de la suba de rendimientos, las tasas reales continúan en terreno negativo. El mercado espera una inflación promedio de 2,8% anual en los próximos 5 años.


S&P 500 en máximos

El índice S&P 500 cerró el viernes en un nuevo máximo, dejando atrás una caída de 5,2% generada por la nueva variante de coronavirus. En lo que va del año, acumula un rendimiento de 25,9%.

Las grandes tecnológicas aportaron al sentimiento alcista. Apple subió 10,9% en la última semana, quedando a solo 2% de alcanzar los USD 3 trillones en valor de mercado. Microsoft subió 6% en la semana, cerrando con una valuación de USD 2,6 trillones y consolidándose como la segunda compañía más valiosa del mundo. Meta Platforms (+7,5%) y Alphabet (+4,2%) también operaron alcistas en dicho lapso.

Las subas, sin embargo, no fueron generalizadas. El dato de inflación y la expectativa de un retiro de estímulos acelerado continuó presionando sobre las compañías con mayores ratios de valuación. El ETF ARK Innovation cedió 1,6% el viernes, cerrando una semana neutral y acumulando una caída de 19% en el último mes.