Internacional
¿Qué pasó?

Las noticias en cuanto a la pandemia continuaron siendo alentadoras: los contagios siguen cayendo a nivel global al tiempo que el proceso de vacunación se acelera lo que seguramente profundice la baja de infectados en las próximas semanas. En los mercados financieros, la semana se destacó por la rápida  suba de las tasas de interés del Tesoro Americano y una pausa en los principales índices bursátiles que aprovecharon el contexto para toma de ganancias y rotación de carteras hacia el sector financiero (principal beneficiado de la suba de tasas de interés- y al sector energético) impulsado por la mayor demanda prevista por crecimiento económico, con ciertas limitaciones en la oferta de la OPEP y la ola de frio en Texas. Detrás de estos resultados están los muy buenos datos económicos que se conocieron en Estados Unidos -y en menos medida en Europa- que, sumado al plan de estímulo fiscal aprobado, mejoran las expectativas de crecimiento y alimentan las expectativas inflacionarias. En cuanto a la principal economía del planeta, lo más relevante fue el fuerte repunte que tuvieron las ventas minoristas que tras 3 meses de estancamiento, aprovecharon el cheque de USD600 del último paquete de estímulo de Trump y  subieron 5.5% en enero, la mayor suba desde junio pasado y le da una muy buena perspectiva para el consumo privado considerando la ayuda fiscal que se viene tras la aprobación del paquete fiscal de Biden. A los datos del consumo se destacó también el buen dinamismo que presentó la producción industrial que subió 0.9% en enero. La buena performance de la actividad manufacturera también se reflejó en los índices PMI tanto de EE.UU como de Europa, mientras que los servicios siguen estando rezagados. En este contexto, con mejores perspectivas de crecimiento con estímulo fiscal y política monetaria laxa, la expectativas de inflación siguen en ascenso y esto se tradujo en que la tasa de los bonos del tesoro a 10 años supere el 1.30% por primera vez desde febrero del año pasado.

Lo que viene

Si bien la tasa del Tesoro Americano se ubica en niveles muy bajos, la rápida suba que tuvieron en el último mes es un factor a seguir de cerca. Nuestra zona de confort es que no supere el 1,5% por lo que estaremos atentos a dicho nivel. La semana arranca con la votación del plan fiscal de Biden en el Congreso. También se publican datos relevante en EEUU como la segunda revisión del PBI del 4Q20, el índice de precio PCE (Personal Consumption expenditure), precio de viviendas y lo más importante pasa por ingresos y gastos personales y la confianza del consumidor, aspecto clave para analizar la fortaleza del consumo, especialmente de servicios. Del otro lado del Atlántico, se publica el dato del PBI de Alemania, en tanto que en Brasil se destacan la publicación de los indicadores de empleo y del balance de pagos.

Local
¿Qué pasó?

Lo más importante de la semana fue la caída de 5% que tuvieron el MEP y el CCL, lo que redujo la brecha con el tipo de cambio oficial que perforó el 60% por primera vez desde septiembre de 2020. Esta caída estaría siendo influenciada por las operaciones del gobierno en el mercado de bonos, como así también por el impacto que estaría el pago del impuesto a la riqueza dado que varios agentes estarían operando estos bonos para afrontar el vencimiento. Vale destacar que cuando la brecha estaba por debajo del 60%, los bonos rendían 12% por lo que la situación actual sugiere que, o bien los bonos están baratos (están en el peor valor desde la reestructuración), o que la brecha está relativamente baja.  Mientras tanto el tipo de cambio oficial aceleró su ritmo de devaluación al 54% anualizado (vs 43% la semana previa) pero no fue suficiente para detener la caída en el rendimiento de los bonos dollar linked que cayeron 2%, acumulando una baja de 5% desde que el Ministro Guzmán reconociera que el gobierno apuesta a una devaluación de apenas el 25% para todo 2021 para contener la inflación. En cuanto a esto, los últimos datos confirman que la inflación sigue estando muy elevada con precios mayoristas subiendo al 5%, los minoristas con un piso del 3.5% mensual y será difícil que baje al ritmo que desea el gobierno para cumplir con el Presupuesto.

Lo que viene

En la semana seguiremos viendo de cerca el ritmo de devaluación del tipo de cambio oficial y el comportamiento de la brecha cambiaria. Se publicarán datos importantes como el EMAE de diciembre que marcará cómo cerró el PBI del año pasado, y también se conocerán datos del sector externo como el saldo de la balanza comercial de bienes así como el balance cambiario de enero 2021, lo cual los dará una idea más concreta de los motivos por los cuales el BCRA está comprando divisas: si es por suba de las exportaciones o si es por restricciones a la demanda tanto para el pago de deuda como de la importaciones de bienes.