Recomendación semanal
El oro constituye, desde los inicios de la historia, un refugio de valor en tiempos de incertidumbre. Su cotización se despierta cuando surgen temores de tragedias tales como guerras o inflación elevada.
Si bien su valor presenta una leve tendencia alcista de largo plazo, su principal ventaja no es el rendimiento sino su correlación con las acciones, que se vuelve negativa en momentos de pánico. En tiempos de crisis, mientras las acciones caen, los inversores buscan cobertura en el oro y su precio sube.
Debido a la razón mencionada arriba, los portfolios diversificados cuentan con entre 2% y 7,5% en activos ligados al metal precioso. Esto permite que, en tiempos de crisis, la cartera total experimente menor volatilidad y sufra menores caídas.
En la actualidad se suma un atractivo adicional. El experimento de tasas negativas en gran parte del mundo desarrollado, como Europa y Japón, junto con los enormes paquetes de emisión monetaria y estímulos fiscales que están aplicando las principales economías, logran el efecto deseado de recuperación económica en el mediano plazo. No obstante, la dinámica que tomarán los precios en el futuro es incierta, y bien podríamos dirigirnos a un contexto de inflación elevada, lo cual sería sumamente alcista para el oro.
Es por esta razón que diseñamos la cartera Cedear G, que busca replicar con la mayor fidelidad posible al ETF VanEck Vectors Gold Miners (GDX). Esta cartera se puede construir con menos de $ 10.000 y nuestra recomendación es que no explique más de 5% de la posición total de acciones.
La combinación Cedear G rindió 20% en dólares desde inicios de 2020 hasta la actualidad. No obstante, se encuentra corrigiendo a la baja un 22% en los últimos 6 meses, coincidentes con el rally de los mercados por el fin de la pandemia y la vuelta al crecimiento.
Se trata de una cartera que permite disfrutar del mercado alcista, con la tranquilidad que brinda saber que estamos cubiertos con activos que compensarán parte de las bajas cuando el panorama se vuelva a tornar incierto.