Es aún demasiado pronto para estimar el impacto de la epidemia en la economía global, y de China en particular. Hasta el día de hoy la situación no está bajo control y el ritmo de aparición de nuevos casos se acelerado.
Si la historia es de ayuda, el impacto de otros virus en el pasado ha sido transitorio (SARS, MERCS, H1N1, Ebola, Zika).
Por lo tanto, si el pánico se llegase a apoderar de los mercados, la corrección podría transformarse en una buena oportunidad de entrada dado que la mortalidad hasta ahora ha sido baja y las autoridades chinas están realizando un esfuerzo mayúsculo de contención.
Recordemos que cuando apareció la epidemia (a fines de 2019), la economía global comenzaba a dar signos de estabilización, e incluso de recuperación como en el caso China y países emergentes, fruto de los esfuerzos monetarios y fiscales que están haciendo los EE.UU., Europa y la propia China y a la firma de un acuerdo (Phase one) en la contienda comercial que llevan disputando China y los EE.UU. desde 2018.
¿Cómo reaccionaron los mercados?
El más afectado ha sido el índice MSCI ACWI Airlines acumula una caída de -6,5% desde principios de año, mientras
que el petróleo por su parte acumula un retroceso de -12,8%. Otras materias primas como la soja (-5,4%) y el cobre (-8,6%) también han registrado caídas.
La mala performance de las compañías aéreas se ha intensificado desde el 20 de enero cuando se conoció que se restringiría los movimientos dentro la propia China (con epicentro en la ciudad de Wuhan y la provincia de Hubei).
También se han visto afectadas por la suspensión de vuelos hacia China (Lufthansa, British Airways, American Airlines, etc.).
En el pasado, también las aerolíneas fueron las más castigadas. Durante la crisis del SARS ocurrida entre noviembre y
el marzo/abril de 2003 (pico de la crisis) estas cayeron un -12,7% frente a sólo un -4,9% del índice global de acciones.
Nuestra recomendación es reducir marginalmente la exposición a los activos de mayor riesgo (acciones Emergentes) para reducir la volatilidad durante las próximas semanas, ya que si bien consideramos que los efectos serán transitorios y la epidemia se terminara controlando gracias a la proactividad del gobierno chino, el flujo de noticias será negativo e ira empeorando.
Cambios en la cartera
Reducimos la exposición de acciones en un 2% de la cartera COHEN GAM Income y un 3% de COHEN GAM Growth.
Ambos excedentes se invertirán en SPDR Gold Shares.