Las acciones estadounidenses ampliaron sus ganancias el jueves, impulsadas por el sólido desempeño del sector tecnológico. El S&P 500 y el Dow Jones subieron 0,8% y 0,7%, respectivamente, en tanto el Nasdaq volvió a ser el claro ganador de la rueda con una alza de 1,0%. Se destacaron las acciones de empresas tecnológicas de megacapitalización, con Nvidia avanzando 1,9%, y Alphabet y Meta Platforms aumentando 2,3% y 2,7%, respectivamente. Mientras tanto, todos los sectores cerraron en verde, con los servicios de comunicaciones y el consumo discrecional liderando las subidas.
Con los inversores consolidando sus expectativas de un recorte de 25 pb en la tasa de la Fed el próximo miércoles, los rendimientos de los bonos del Tesoro se mantuvieron estables, con una leve suba en el tramo largo. La UST2Y cerró en 3,65%, igual que el miércoles, mientras que la UST10Y aumentó 3 pb hasta 3,68%. En este contexto, el índice de bonos del Tesoro registró una caída de 0,2% y los corporativos Investment Grade de 0,1%, mientras que los High Yield y los emergentes tuvieron una rueda positiva, con alzas de 0,2% y 0,3%, respectivamente.
Lo más destacado de la jornada fue que, ante las perspectivas de recorte de tasas y desaceleración económica, el precio del oro subió 1,5% en la rueda de ayer, alcanzando un récord de USD 2.554 por onza el jueves. En lo que va del año, acumula un alza de 24%, y de 34% si se lo compara con un año atrás.
Respecto a los datos económicos publicados, se destacó que el índice de precios al productor (IPP) de agosto subió 0,2% m/m, ligeramente por encima de las previsiones que apuntaban a un alza de 0,1%. Los precios de los servicios se incrementaron 0,4% m/m, mientras que el costo de los bienes se mantuvo sin cambios. El índice de precios mayoristas core aumentó 0,3% m/m, revirtiendo la caída de 0,2% registrada en julio y superando también las expectativas de los analistas. Con este resultado, en el último año los precios mayoristas subieron 1,7% en la medición general y 2,4% en la medición core.
En cuanto a los datos de empleo, el número de personas que solicitaron prestaciones por desempleo subió en 2.000 respecto a la semana anterior, alcanzando 230.000 en el período que finalizó el 7 de septiembre, en línea con las expectativas del mercado.
Lo más destacado de la jornada fue la publicación del resultado fiscal de agosto del gobierno federal, que registró un déficit presupuestario de USD 380 MM, lo que representó un fuerte deterioro respecto al superávit de USD 89 MM del mismo mes del año pasado y en comparación con las previsiones de un déficit de casi USD 350 MM. Este fue el peor resultado desde septiembre de 2022, ya que los desembolsos aumentaron un 254% i.a. a un máximo de casi un año y medio, impulsados por un aumento en el gasto de Medicare y Seguridad Social, mientras que los ingresos crecieron solo un 8,3% i.a. Con este resultado, en los 11 meses del año fiscal 2024, el déficit aumentó un 24% i.a. respecto al mismo período del ejercicio anterior, pasando de USD 1.525 MM a USD 1.897 MM, ya que los costos de intereses de la deuda pública superaron el billón de dólares por primera vez.
En otras latitudes, el Banco Central Europeo recortó el tipo de la facilidad de depósito en 25 pb, hasta el 3,5%. Además, los tipos de interés de las operaciones principales de financiación y de la facilidad marginal de crédito se redujeron al 3,65% y al 3,90%, respectivamente, a partir del 18 de septiembre. Las proyecciones de inflación se mantienen en línea con pronósticos anteriores: 2,5% en 2024, 2,2% en 2025 y 1,9% en 2026, y se prevé que la inflación subyacente disminuya del 2,9% en 2023 al 2,0% en 2026. Las presiones inflacionarias internas siguen siendo elevadas debido al aumento de los salarios, pero la moderación de los costos laborales y las ganancias firmes ayudan a amortiguar el impacto.