El mercado mostró cautela en medio del prolongado cierre parcial del gobierno y una nueva tanda de balances mixtos. Las acciones retrocedieron, lideradas por el Nasdaq. La expectativa de próximos recortes de tasas por parte de la Fed mantuvo las tasas de los Treasuries con leves bajas, mientras que en commodities el oro extendió su corrección ante una mayor toma de ganancias y señales de distensión comercial entre EE. UU. y China. En contraste, el petróleo rebotó impulsado por la posibilidad de un acuerdo energético entre EE. UU. e India y una caída mayor a la esperada en los inventarios estadounidenses.
Las acciones retrocedieron en el marco de la continuidad del shutdown y la presentación de balances. El S&P 500 y el Dow Jones bajaron 0,8%, mientras que el Nasdaq fue el de peor performance, con una caída de 1,4%. Netflix se desplomó 10% tras verse afectado por una disputa fiscal en Brasil. Tesla perdió 1,4% antes de la publicación de sus resultados, luego de informarse que algunos vehículos recientemente fabricados podrían sufrir una pérdida repentina de energía en la batería. En cuanto a balances, Texas Instruments cayó 6,6% debido a un guidance decepcionante, lo que presionó al resto del sector de semiconductores, con bajas en torno al 4% en Intel, AMD y Micron. En el lado positivo, Thermo Fisher Scientific rebotó levemente 1,1% tras presentar ganancias y ventas mejores a lo esperado, mientras que Intuitive Surgical se disparó 13,9% luego de publicar sólidos resultados.
La expectativa de nuevos recortes de tasas y la continuidad del cierre parcial del gobierno presionaron levemente a la baja las tasas de interés. La UST2Y y la UST10Y cayeron ambas 1 pb, cerrando en 3,44% y 3,95%. De esta manera, el índice de bonos del Tesoro operó sin cambios, al igual que los bonos Investment Grade. En tanto, los High Yield y los bonos de mercados emergentes cayeron 0,1% y 0,2%, respectivamente.
En este contexto, el dólar se mantuvo neutral a nivel global, mientras que el oro perdió otro 0,8%, cerrando en USD 4.092 la onza, impulsado por la continuidad en la toma de ganancias y las expectativas de distensión en las tensiones comerciales entre EE. UU. y China.
El petróleo WTI rebotó 2,0% hasta USD 59 el barril, gracias a que EE. UU. podría haber alcanzado un acuerdo con India mediante el cual esta última reduciría sus importaciones de crudo ruso. En paralelo, se espera que la Unión Europea apruebe un decimonoveno paquete de sanciones contra Rusia tras la retirada de objeciones por parte de Eslovaquia. Los datos de la AIE también mostraron que los inventarios de crudo en EE. UU. cayeron casi 1 millón de barriles la semana pasada, registrando su primera baja en cuatro semanas, mientras que las existencias de combustibles –incluido el de gasolina– también disminuyeron más de lo esperado.