Aunque con movimientos mucho más moderados, las acciones en Wall Street volvieron a marcar nuevos máximos históricos. El S&P 500 cerró estable, manteniéndose en el nivel récord alcanzado el lunes y el Nasdaq subió un 0,4%, en tanto que el Dow Jones retrocedió un 0,2%. En lo corporativo, las acciones de US Steel Corporation cayeron un 8% luego de que el presidente electo Donald Trump prometiera bloquear su adquisición por USD 15.000 M por parte de Nippon Steel, citando planes de incentivos fiscales y aranceles para apoyar a la empresa. Por su parte, Tesla perdió un 1,6% tras la segunda negativa de un juez de Delaware al paquete salarial de USD 56.000 M de Elon Musk y los reportes sobre una disminución en los envíos de los modelos fabricados en China. En contraste, AT&T subió un 4,7% impulsada por las previsiones de flujo de caja, y Salesforce avanzó un 0,4% en la previa de sus resultados.
En cuanto a la renta fija, aunque la probabilidad implícita de que la Fed recorte la tasa de referencia en 25 pb en la próxima reunión el 18 de diciembre subió al 74% –desde el 62% del lunes y el 55% de hace una semana–, los rendimientos de los bonos del Tesoro mostraron un comportamiento mixto. La UST2Y retrocedió 3 pb hasta 4,17%, mientras que la UST10Y subió 3 pb, cerrando en 4,22%. En este contexto, el índice de bonos del Tesoro cayó un 0,2% y el de corporativos Investment Grade retrocedió un 0,4%. En paralelo, los corporativos High Yield y los bonos emergentes finalizaron sin cambios.
El dólar DXY cedió un 0,1%, principalmente por las expectativas de tasas en Japón. En este sentido, el rendimiento del bono japonés a 10 años subió a 1,08%, acercándose a su nivel más alto en 13 años, mientras que el presidente del Banco de Japón, Kazuo Ueda, afirmó que podría aumentar la tasa de referencia en otros 25 pb –con un 60% de probabilidades según el mercado–. Por otro lado, el dólar se fortaleció un 0,2% frente al yuan y un 0,3% frente al real brasileño, llevando al USDBRL nuevamente a máximos históricos de USD 6,08, en un contexto de persistente preocupación en Brasil por sus cuentas fiscales y expectativas de inflación.
En el segmento de commodities, se registró una jornada positiva con un alza promedio del 1,2%. El petróleo lideró las subas con un avance del 2,7%, alcanzando los USD 70 por barril de WTI. Este repunte fue resultado de las nuevas sanciones de EE. UU. sobre el petróleo iraní y señales de que la OPEP+ extenderá los recortes de producción. Según informes, la alianza estaría cerca de retrasar por tres meses un aumento en la producción, lo que calmó los temores del mercado sobre un incremento en la oferta. El oro avanzó un 0,1% y cerró en USD 2.642 la onza, en tanto que la soja subió un 0,7%, alcanzando los USD 364 por tonelada, a raíz de un aumento en la expectativa de demanda por parte de China y una escalada en el conflicto entre Rusia y Ucrania.
En los datos económicos del día, las vacantes abiertas de empleo (JOLTS) correspondientes a octubre en EE. UU. registraron un aumento de 372.000 puestos, llegando a un total de 7,744 M, frente a los 7,372 M revisados a la baja en septiembre, y superando las expectativas del mercado de 7,48 M. Las vacantes crecieron notablemente en los sectores de servicios profesionales y empresariales (+209.000), alojamiento y servicios de alimentos (+162.000) e información (+87.000), mientras que se redujeron en el gobierno federal (-26.000). Por otro lado, las renuncias alcanzaron los 3,3 millones, el nivel más alto en cinco meses, marcando un incremento del 2,1% m/m. A su vez, los despidos se mantuvieron estables en 1,6 millones.
Asimismo, el PBI de Brasil creció un 0,9% t/t en el 3Q24, en línea con las expectativas del mercado, desacelerando respecto al avance del 1,4% t/t registrado en el 2Q24. Entre los componentes de la demanda, destacó la inversión con un crecimiento del 2,1% t/t, seguida por el consumo privado que avanzó un 1,5% t/t y el consumo público con un incremento del 0,8% t/t. Por el contrario, las exportaciones netas retrocedieron un 0,6% t/t al tiempo que las importaciones aumentaron un 1,0% t/t. En términos interanuales, la economía brasileña se expandió un 4,0% en el 3Q24, marcando su mejor desempeño desde el 2Q23. Con este resultado, el crecimiento acumulado en los últimos cuatro trimestres fue del 3,1%, potenciado principalmente por el consumo privado (+4,5%) y la inversión (+3,7%).
Ya en la jornada de hoy, el índice PMI de servicios Caixin de China correspondiente a noviembre descendió a 51,5, desde el 52,0 registrado en octubre, ubicándose por debajo de las expectativas de 52,5 que el mercado proyectaba.