Luego de la reunión mensual de la OPEP+ que se llevó a cabo ayer, la entidad anunció un nuevo aumento en la producción de petróleo para los meses de julio y agosto. La suba proyectada es de 648.000 barriles diarios cada mes, muy por encima de las expectativas del mercado.
El objetivo de esta suba continúa siendo el control de los precios energéticos, que tienen incidencia directa en la inflación, que está afectando a todas las economías a nivel global. Este aumento en la producción reduciría parcialmente los inconvenientes que está teniendo la oferta energética desde la invasión de Rusia a Ucrania.
La noticia impactó principalmente en las compañías energéticas, con el ETF XLE resultando el único perdedor de la jornada. Sin embargo, el sector continúa siendo el mayor ganador del año, al avanzar un 57,9% en lo que va del 2022, superando ampliamente tanto al S&P 500 como al Nasdaq.