En la víspera de la publicación del dato de inflación de febrero, que se dará a conocer hoy a las 16 hs, el BCRA decidió reducir la tasa de interés de política monetaria, aplicable a los pases pasivos, de un 100% a un 80% de TNA (tasa efectiva mensual baja de 8,6% a 6,8%). Con un volumen de pases pasivos que excede los $29 billones, este ajuste representa un ahorro cercano a los $500.000 M por mes en concepto de interés por pasivos monetarios remunerados. Simultáneamente, se eliminó la tasa mínima para plazos fijos (que estaba en 110% de TNA o 9,2% mensual), permitiendo ahora que los bancos compitan por tasas para atraer depósitos. Como efecto inmediato, los bancos ya redujeron su tasa a 70% de TNA o 5,8% mensual. Se considera que, con esta medida, el gobierno busca incentivar la adhesión al canje de deuda, al tiempo que es probable que se observe un incremento en la presión sobre los dólares financieros y la brecha cambiaria.
En el mercado cambiario, a pesar de que la liquidación del sector agrícola se mantiene en niveles reducidos, el BCRA continuó beneficiándose de la escasa demanda y registró compras netas por USD 271 M. Durante el transcurso de marzo, la autoridad monetaria ha sumado adquisiciones por un total de USD 1.370 M. Por otra parte, el stock de reservas internacionales experimentó un incremento de USD 141 M, alcanzando los USD 28.357 M, mientras que las reservas netas se situaron en casi USD 3.000 M en negativo.
El dólar oficial registró un aumento del 0,2%, equivalente a un 1,8% en términos mensualizados, hasta alcanzar los $848,3. Durante los últimos cinco días hábiles, la devaluación se situó en una tasa efectiva mensual del 2,0%. Los dólares financieros retomaron su tendencia a la baja, con el dólar MEP experimentando una caída del 1,9% hasta situarse en $981, lo que representa una brecha del 16%, mientras que el dólar CCL disminuyó un 1,1% hasta los $1.024, marcando una brecha del 21%.
En la jornada de ayer, los contratos de futuro de dólar registraron una caída general del 0,2%. Se observaron incrementos en los contratos de junio y julio, ambos con un alza del 0,1%. Por otro lado, las caídas más significativas se presentaron en los contratos de octubre y noviembre, con un retroceso del 0,4% cada uno, y en septiembre, con una disminución del 0,3%. De esta manera, la devaluación implícita se posiciona en el 2% hasta marzo, en el 35% hasta julio y alcanza el 80% hasta diciembre.
Las curvas soberanas en pesos experimentaron una jornada mayormente positiva. En el marco del canje, los bonos ajustados por CER se incrementaron en promedio un 1,0%, destacándose aquellos instrumentos elegibles con vencimiento en 2024, que subieron un 1,9%. Por su parte, los bonos CER con vencimientos a partir de 2025 experimentaron un crecimiento del 0,5%, y las LECER registraron una ganancia del 0,4%. En lo que respecta a la curva de tasa fija, el TO26 concluyó la sesión con una tendencia alcista del 2,5%. Los bonos duales, por su lado, lograron una ganancia del 1,1%, mientras que los DLK marcaron una caída del 0,6%.
Los bonos soberanos en hard-dollar registraron una pérdida del 0,6%, debido a una caída del 0,8% en aquellos regidos por la ley de Nueva York y un retroceso del 0,4% en los sujetos a la ley argentina. De este modo, acumulan una ganancia del 0,7% en lo transcurrido del mes y un incremento del 17% en lo que va del año. Así, las paridades promedian el 42,9%, mientras que el riesgo país experimentó un aumento de 23 pb, situándose en 1713 pb.
El impulso que venía experimentando la curva BOPREAL se detuvo, y en la primera sesión de la semana, los bonos registraron una caída promedio de 0,1%. El strip A fue el único que mostró un desempeño positivo, con un incremento del 1,2% hasta USD 84,5, lo que representa una TIR del 23,2%. Por otro lado, el resto de los instrumentos sufrieron caídas que oscilaron entre el 0,3% y el 0,5%, cifras que resultan considerablemente más moderadas en comparación con las registradas por los bonos del Tesoro. Hasta el momento, no se han observado negociaciones del BOPREAL Serie 3 en el mercado BYMA.
El índice S&P Merval cerró con una pérdida del 4,3% en pesos y del 2,6% en dólares, ubicándose en los USD 942, con las bajas más notables en los sectores energético y financiero. En el mercado local, las acciones que experimentaron las mayores caídas fueron Grupo Supervielle y Telecom, ambas con un retroceso del 7,8%, seguidas por Mirgor con un -7,6%, BBVA con un -6,9% y Banco Macro con un -5,1%. En Wall Street, las acciones argentinas registraron caídas promedio del 1,6%. Las más afectadas fueron BBVA con un -4,6%, Telecom con un -4,2% y Galicia con un -3,2%. Sin embargo, hubo excepciones que registraron ganancias, siendo Mercado Libre con un +1,8% y Despegar con un +1,7% las únicas que cerraron en positivo.