Tras una difícil semana, en la que el dólar CCL había marcado una fuerte suba, desde $175 a $179,5 (para el promedio de las variantes alternativas), el lunes bajó a $179,3 y detuvo -al menos temporalmente- el fuerte rally en el que venía.

El sábado, durante un acto en el partido de Escobar, Cristina Kirchner mencionó que los DEGs (derechos especiales de giro que recibirá Argentina del FMI) no iban a poder ser usados para enfrentar las consecuencias de la pandemia, lo que fue visto por el mercado como un intento de llevar calma tras una semana de tensión cambiaria, dando a interpretarse que dichos fondos serían usados para pagar los vencimientos con el FMI.

Los bonos dollar linked también detuvieron sus alzas, con el T2V1 cayendo 0,3% y el TV22 bajando 0,1%. En los contratos de ROFEX está tendencia fue aún más marcada, con caídas promedio de 0,6%. Algunos de los contratos de 2022, como marzo y abril, tuvieron bajas de 1,2%.

El Merval también tuvo una buena jornada, subiendo 1,1% en un día en que la región también operó con mayoría de verdes (ETF EWZ de Brasil +1,6%). El papel más destacado fue Loma Negra (+3,5%), que acumula en julio una suba del 23,4%, solo superada por COME (+25,5% en julio). 

TX22: posible upside 

La semana que viene (5 de agosto) es el vencimiento del TX21. Allí vemos probable que una parte de dichos flujos migren al TX22, que es el siguiente bono CER con buena liquidez, por lo que es probable que en las dos semanas siguientes este bono se aprecie.

Creemos que en ese entonces puede ser un buen momento para empezar a migrar la posición de este bono al TX23. Esto sucede porque, debido al mecanismo de computo del CER, el TX22 (vence el 18 de marzo de 2022) devenga inflación solamente hasta enero. Considerando que las elecciones son el 14 de noviembre y que difícilmente haya una devaluación en las vísperas de las fiestas de fin de año, es más probable que el potencial ajuste del tipo de cambio llegue entre enero y marzo. Por ello, y contemplando que el pass-through de la devaluación a la inflación no se da 100% de golpe, sino que es paulatino, vemos en el TX22 el perjuicio de que quizás no se beneficie del todo del potencial salto inflacionario, que seguramente cause un ajuste del tipo de cambio. Por lo tanto, vemos una chance para migrar al TX23.