Noticias globales: el mundo hoy.
La encuesta JOLTs de ofertas de empleo mostró que el dato de abril se ubicó en 11.400 M de puestos de trabajo, disminuyendo levemente desde los 11.855 M de marzo. Sin embargo, el dato aún se mantiene cercano al máximo del mes previo, superando ampliamente el promedio de 7.000 M registrado hasta 2021.
Esto genera preocupación en los mercados, ya que, ante la gran oferta, las compañías continúan aumentando los sueldos para atraer así nuevos trabajadores. Esto termina impactando en el nivel inflacionario, al dificultar la intención de la FED en su afán por llevar la suba de precios a su objetivo de 2%.
A pesar de darse a conocer este dato, el presidente de la Reserva Federal de Richmond, Thomas Barkin, indicó que “sería necesario un gran cambio en las perspectivas económicas para aumentar el ritmo actual de suba de tasas de interés”, descartando así una suba mayor a los 50 pb, que se venía pronosticando desde la suba anterior.
Cierres y primeros movimientos del día.
A diferencia de la última semana de mayo, la primera jornada de junio terminó con un retroceso de los principales índices norteamericanos. La incertidumbre por los efectos de la suba de tasas continúa afectando a los mercados, lo que decantó en caídas el índice S&P 500 (-0,8%), el Nasdaq (-0,7%) y el Dow Jones (-0,6%).
Ante este contexto, dentro de los sectores que componen el S&P, el energético fue el único que terminó al alza (1,6%), mientras que por el lado contrario el sector financiero fue el más golpeado (-1,6%), seguido por el sector salud (-1,4%). A su vez, a pesar de que compañías como United Airlines indicaron que la reactivación de la actividad en las compañías aéreas se acerca a los niveles prepandemia, este sector no logra despegar, retrocediendo un 3,1% en la jornada de ayer y acumulando una baja de 8,7% en los últimos 30 días.
Ante este contexto, las tasas de Treasuries volvieron a avanzar – hasta 2,91% – el día en el que la FED inició la recompra de bonos por USD 47.500 M. Este proceso continuará hasta septiembre, donde según la entidad el monto de recompra pasará a USD 95.000 M mensuales.
Por el lado de los commodities, el petróleo volvió a avanzar (+0,2%), hasta alcanzar los USD 114,9, luego de que China anunciara el final del confinamiento establecido en Shanghái. Por su parte, tanto el trigo como el maíz mostraron retrocesos ante las expectativas de que aumenten las exportaciones desde Ucrania, aprobadas por el gobierno ruso.
Los futuros de los mercados norteamericanos operan al alza esta mañana, con el índice Nasdaq avanzando un 0,7%, seguido por el S&P y el Dow Jones, que muestran subas respectivas de 0,6% y 0,5%. La razón sería la caída que está marcando el petróleo, lo que genera una suba en los principales mercados de renta variable. Esto hace retroceder levemente a las tasas de Treasuries, aunque aún se ubican cercanas a 2,92%.
La mira del día estará puesta en la reunión de la OPEP+, especialmente luego de darse a conocer la noticia de que distintos países miembros están analizando sustituir a Rusia en la organización. Arabia Saudita anunció que podría incrementar su oferta de crudo, lo que compensaría la baja en la producción producto de la invasión y las sanciones a Rusia. Esto impacta fuertemente en el petróleo, que viene retrocediendo un 2,8% en lo que va de la mañana.
Dicho suceso también beneficia a los mercados europeos, que operan todos al alza en lo que va de la mañana, encabezados por Francia. Por el lado asiático, los principales índices operan mixtos, con India marcando la mayor suba y China el principal retroceso del día.
3 datos clave para invertir.
Es el spread actual entre las cotizaciones de los bonos GD30 y AL30. Si bien nos ubicamos por debajo del máximo alcanzado en noviembre de 2021 (16,9%), el valor actual luce atractivo teniendo en cuenta el potencial de ajuste en relación a su mediana (7,1%). Creemos que, en la actualidad, el castigo por legislación es desmedido considerando que los escenarios de reestructuración empiezan a tomar protagonismo hacia 2024 y 2025.
Es lo que viene avanzando Dow Inc. en lo que va del 2022. La compañía de productos químicos no solo viene marcando buenos resultados en lo que va del año, sino que también tiene un precio sobre ganancias de 7,4, lo que la vuelve una interesante alternativa para el momento actual. La misma comenzará a cotizar como Cedear en el mercado local, lo que permite que pueda adquirirse tanto en dólares como en pesos.
Es lo que avanzó Electronic Arts Inc en el último mes, mientras en el acumulado anual marca un alza de 5,1%. La compañía desarrolladora de videojuegos también comenzará a cotizar en el mercado local como Cedear, posicionándose como una opción alternativa a las empresas digitales actuales. Cabe destacar que actualmente presenta un precio sobre ganancias de 50, pero su reciente repunte la convierte en una opción atractiva para aquellos que busquen posicionarse en este sector.
Noticias locales: el país hoy.
Ayer se conoció que el BCRA finalizó su balance cambiario con un saldo negativo de USD 190 M. Su balance mensual de acumulación de divisas cayó a los USD 790 M. Con este resultado, la meta cambiaria del acuerdo con el FMI para el 2T22 luce más lejana, por lo que podríamos tener el primer pedido de waiver al Fondo. La razón principal que afectó al balance cambiario – según fuentes del mercado – son los compromisos de pago por importaciones de energía.
No consideramos que dicho incumplimiento tome por sorpresa al FMI, si partimos de un acuerdo que desde sus inicios parecía ambicioso, aunque llama la atención lo temprano que llega, especialmente en un contexto de precios internacionales a favor.
El mercado, en respuesta, reaccionó demandando más instrumentos dollar linked, que finalizaron la jornada 0,8% en alza, con el TV23 como principal beneficiado. Actualmente el bono presenta un rendimiento de devaluación -4%.
De la mano con la devaluación del BCRA, ayer el tipo de cambio oficial anotó una suba de 16 centavos, equivalente a una tasa efectiva mensual de 4%, para así cerrar mayo con una variación de 4,2%, por encima del 3,9% que había devaluado en abril.
En relación a los bonos en dólares, observamos un freno respecto al rebote que venían acumulando en ruedas anteriores: ayer retrocedieron 0,6%, con el GD30 como el más afectado (-1,5%). Esto último también pudo deberse a lo alto que se encontraba el spread entre legislaciones.
Por el lado de los instrumentos CER, la curva volvió a mostrarse con la mayoría de los bonos a la baja. Particularmente, ayer tuvieron una caída de apenas 0,1%, con el TX26 resultando el más perjudicado (-0,7%), aunque la tendencia de inestabilidad es la misma que la semana pasada. Por el lado de las LECER, el flujo se mantuvo positivo, pese a que las correspondientes a abril y mayo cayeron.
Los que también se mostraron a la baja son los tipos de cambio financieros, que cayeron 1,7% para el dólar MEP ($207,35) y 0,8% para el CCL ($212,13).
A pesar de la volatilidad que marcó durante el día, el índice Merval no logró repuntar, por lo que terminó retrocediendo un 1% en moneda local y un 0,3% medido en USD (llegó hasta los USD 438,4).
El panel líder cerró la jornada con resultados mixtos. Solo cinco compañías terminaron con resultados positivos, entre las que se destacaron Mirgor y Ternium Argentina, que avanzaron 11,6% y 2% respectivamente. Sin embargo, aún ambas compañías marcan retrocesos de 10,2% y 5,8% en lo que va del año. Por el lado contrario, Telecom Argentina y BBVA Banco Francés presentaron las mayores caídas, con retrocesos respectivos de 4,9% y 4,2%.
Noticias globales: el mundo hoy.
La Administración de Información Energética (EIA) dio a conocer ayer que Estados Unidos marcó una suba de 3% m/m en su producción de crudo durante marzo. Esto hizo que el país alcanzara su máximo nivel desde noviembre del año previo, con 11,7 millones de barriles diarios (vs 11,3 millones en febrero).
A pesar de esta suba, continúa la recuperación luego de la desaceleración que había sufrido la industria producto de la pandemia. Esto se observa al comparar el ritmo actual con los 12,3 millones de barriles por día que producía el país en diciembre de 2019. Sin embargo, persiste la preocupación por los costos energéticos actuales, especialmente en el inicio del verano, que suele ser una temporada de alta demanda energética para el país.
Cierres y primeros movimientos del día.
Tras conocerse el embargo de petróleo ruso por parte de la Unión Europea, dicho commodity empezó el día al alza, lo que generó preocupaciones por el efecto que esta medida tendría sobre la inflación mundial. A pesar de que el crudo terminó finalizando el día a la baja, esta volatilidad hizo retroceder a los principales índices bursátiles: mientras el Dow Jones y el S&P cayeron 0,7%, el Nasdaq retrocedió 0,4%.
A excepción del sector de consumo discrecional (0,5%), todos los sectores que componen el S&P terminaron la jornada a la baja. Amazon fue el principal impulsor, al avanzar un 4,3%, diferenciándose así de las principales compañías, que cerraron todas a la baja. Por el contrario, entre los perdedores del día se ubicaron el sector de materiales (-1,5%) y el energético (-1,6%). A pesar de haber iniciado al alza, la contracción en el precio del crudo al final del día llevó al sector energético a ser el mayor perdedor al cierre de mercado.
Por el lado de los commodities, el crudo inició el día al alza, pero finalmente terminó retrocediendo (-1,8%) luego de que la OPEP indicara que está considerando excluir a Rusia del acuerdo de producción. Esto permitiría que miembros como Arabia Saudita o Emiratos Árabes puedan bombear una mayor cantidad de crudo, lo que terminó impulsando a la baja al WTI, que llegó a los USD 115. El oro también retrocedió (-1%), en este caso producto del fortalecimiento del dólar durante la jornada de ayer, que se vio beneficiado por una mayor aversión al riesgo por parte de los mercados. El trigo, por su lado, también terminó al alza después de que Rusia indicara que está considerando aumentar la cantidad de envíos desde el mar Negro.
Bajo este contexto, las tasas de Treasuries también se vieron afectadas y terminaron avanzando 5 pb, hasta alcanzar el 2,86%.
Los futuros norteamericanos operan al alza esta mañana, con el Dow Jones y el S&P avanzando 0,4% y 0,2% respectivamente, mientras que el índice Nasdaq asciende un 0,2%. Las tasas de Treasuries también marcan subas, de 4 pb en este caso, hasta alcanzar el 2,88%, lo que representa una suba de 13 pb para los últimos tres días.
Por el lado de los commodities, el oro cae un 0,9%, mientras que el petróleo continúa avanzando en un 0,9%. Esto ocurre no solo por el anuncio de la Unión Europea, sino porque ayer se dieron a conocer nuevos cortes de envíos de gas hacia Europa provenientes de Moscú. Ante la negativa de aceptar los pagos en rublos, la compañía Gazprom detuvo varios de sus contratos con Alemania, Países Bajos y Dinamarca, lo que acentúa la problemática energética del continente. Entre las compañías afectadas, se encuentra la alemana Shell, aunque la firma indicó que la decisión de Gazprom solo afecta a pequeños volúmenes en el país.
Este contexto beneficia al dólar, que continúa avanzando frente al euro, con el índice DXY ubicándose en los 102 puntos.
Los principales mercados europeos operan mixtos ante este escenario, con Francia marcando la principal suba y España la mayor caída. Lo mismo ocurre con los índices asiáticos, donde Hong Kong marca el mayor retroceso del día.
¿Es momento de dolarizar las carteras? ¿Qué activos adquieren valor?
La dinámica mensual del BCRA en el mercado cambiario es la mejor desde mayo de 2021: al día de hoy, acumula unos USD 938 M, aunque se ubica lejos de los USD 2.089 M de aquel entonces. Por dicho motivo, aumentan los temores de incumplimiento con el FMI, dado que se necesitarían compras por USD 2.800 M hasta fin de junio. En consecuencia, empiezan a crecer las posturas que se inclinan por aumentar la dolarización de las carteras.
Creemos que la decisión de rotar parte de la cartera debería tomarse a mediados de junio, donde no solo podremos evaluar el desempeño del mes corriente, sino también lo ocurrido en mayo. Sin embargo, brindaremos alternativas para importadores e inversores que prefieren posicionarse ya mismo en activos dolarizados.
En primer lugar, y para el caso de importadores, debemos tener en cuenta que la cobertura debe apuntar a lo que ocurra con el tipo de cambio mayorista. Partiendo de aquí, las alternativas involucran bonos dollar linked, contratos de dólar futuro y/o sintéticos.
Dentro de los bonos dollar linked, podemos posicionarnos en riesgo soberano mediante el TV23, que actualmente presenta un rendimiento de devaluación -1,7% y, a criterio nuestro, generaría mayores retornos en un escenario donde se evidencie un aumento sostenido del ritmo devaluatorio. Saliendo del riesgo soberano, aunque con menor liquidez, encontramos instrumentos corporativos, donde nos gustan PAE23 Clase 2 y Aluar23 Serie 3.
Sobre la curva de futuros de dólar, preferimos optar por los contratos de julio, ya que de momento consideramos bajo el riesgo de un salto cambiario, pero no así el riesgo político, por lo que creemos necesaria la cobertura de corto plazo. La decisión de posicionarse en julio se vincula también con que la cosecha suele mermar hacia fines de dicho mes, con su consecuente incremento de expectativas devaluatorias.
Para inversores, priorizamos reducir la volatilidad en el contexto de incertidumbre actual hasta tener más información sobre la revisión del 2T22. Por este motivo, consideramos oportuna la dolarización mediante bonos corporativos de buen crédito.
Aquí las opciones incluyen a Pampa 29 (12% de TIR y cupón de 9,125%), YPF26 (TIR de 14%), que está garantizado por exportaciones, TGS25 (10% de TIR y modified duration de 2,55) y Macro 26 (11% de TIR y modified duration de 3,6). Hay que tener en cuenta también que tanto el bono de TGS como el de Macro operan con un mínimo de 150 mil nominales.
Para el caso de bonos soberanos, la relación riesgo - retorno se puso más que atractiva, con paridades que van desde el 25% al 30%, incluso si descontamos escenarios potenciales de reestructuración hacia 2025. Los intereses corrientes se vuelven más que interesantes si tenemos en cuenta el próximo step-up de los cupones. Recomendamos alocar no más del 10% de la cartera, y solo si el inversor se encuentra dispuesto a asumir la volatilidad propia de estos activos. Dentro de este segmento, nos inclinamos por el bono global 2038 por su jurisdicción, volumen y estructura de cupones.
En conclusión, si bien consideramos que es pronto para comenzar a dolarizar carteras, no descartamos brindar alternativas para aquellos inversores que deseen anticiparse a los próximos movimientos.
Noticias locales: el país hoy.
Finalmente, el Tesoro logró captar $19.658 M en la segunda vuelta y, de esta manera, finalizar el mes con una tasa de refinanciamiento de 108%. La mayor cantidad de ofertas estuvieron vinculadas a la LEDE S31G2, que cortó a 51% de tasa (TNA). Con este resultado, en lo que va del año el financiamiento neto alcanza los $647 MM, equivalentes a una tasa de rollover de 122%.
Al mismo tiempo, se conoció una nueva asistencia al Tesoro por parte del BCRA en concepto de adelantos transitorios por $4.385 M ($380.500 M en lo que va del año), reduciendo a $54.000 M el margen de emisión para lo que queda del 2T22.
En cuanto a lo operado en el mercado, en una jornada con bajo volumen debido al Memorial Day en EE.UU, los bonos en dólares mostraron un avance de 1,7%, impulsados por el GD38, que marcó una suba de 7,6% en la jornada. De todas maneras, el riesgo país continúa por encima de las 1.900 unidades (1.916), denotando la desconfianza sobre la deuda dolarizada local.
En la curva CER, los bonos operaron mixtos, finalizando el día neutros respecto a la jornada anterior. Aquí no se presentaron grandes movimientos, ya que lo más destacado fue la suba de 1,2% que marcó el TC23, y lo peor fue la caída de 0,4% del TX24. La falta de combustible en la curva CER en las últimas dos semanas fue tan notoria que el rendimiento del TX23, que llegó a cotizar en CER -10%, ahora lo hace en CER neutro. Según informes privados, mayo estaría finalizando con un flujo a FCI CER neutro, situación que no se veía desde septiembre del año pasado.
Los bonos dollar linked tuvieron una jornada positiva, ya que cerraron 0,4% en alza, con el TV23 a la cabeza (+0,7%), en un contexto en el que siguen creciendo las voces que recomiendan aumentar la dolarización de carteras frente a la magra dinámica del BCRA en el mercado cambiario. Ayer la entidad monetaria logró terminar el día con un balance a favor de USD 45 M (USD 983 M en el mes), muy por debajo de los USD 140 M promedio que debería comprar de aquí a fin de julio para cumplir con la meta de reservas netas (USD 6.400 M).
Dentro de la curva de bonos Badlar y tasa fija, los movimientos fueron dispares y con bajo volumen, ya que las tasas reales negativas continúan profundizándose y, por ende, reduciendo la competitividad de dichos instrumentos.
Por su parte, el dólar MEP apenas subió 0,3%, cerrando en $210,95, y se encamina a cerrar el mes con un avance 2,4%.
El índice Merval no logró avanzar luego de la jornada de ayer, terminando así en una caída de 0,5% medido en moneda local (llega a las 93.239 unidades), mientras que la caída medida en USD CCL fue de 1,1% (hasta los USD 439,5).
Entre las acciones que componen el panel líder, Sociedad Comercial del Plata y Loma Negra lograron destacarse, al avanzar 2% y 1,1% respectivamente. Sin embargo, ambas compañías difieren fuertemente en lo que va del año, ya que mientras Sociedad Comercial acumula una suba de 53,7%, Loma Negra aún retrocede un 6,6%. Por el lado de las perdedoras, Cresud y Banco Supervielle encabezaron las caídas, al retroceder 2,5% y 1,4% respectivamente.
Noticias globales: el mundo hoy.
El bloque europeo venía intentando disminuir la financiación de la invasión rusa mediante la prohibición de las exportaciones energéticas de ese país. Sin embargo, Hungría, Eslovaquia y República Checa continuaban resistiéndose a la medida, por los efectos que la misma tendría sobre su economía local.
A pesar de esto, ayer la Unión Europea dio a conocer la efectivización de la sanción, lo que evitaría que los 27 miembros de este bloque puedan adquirir petróleo proveniente de Rusia. Esto fue confirmado por el presidente del Consejo de la Unión Europea, Charles Michel, quien indicó que la medida cubriría más de dos tercios de las importaciones de crudo ruso y que se buscaría efectivizar a fines del año actual. El embargo se realizaría al crudo que proviene del mar, mientras que se haría una exención para las importaciones que llegan por oleoducto.
Según distintas estimaciones, esta medida reduciría el 90% de las importaciones de petróleo hacia finales del año 2022, mientras que se seguirá analizando la prohibición del 10% restante que se transporta por oleoducto. Cabe destacar que actualmente el 36% de las importaciones energéticas del bloque provienen de Rusia, lo que afectaría fuertemente a la oferta energética necesaria.
A esta sanción se le sumó la exclusión del principal banco ruso, el Sberbank, del código SWIFT, lo que imposibilitaría que la entidad pueda recibir o emitir transacciones con bancos financieros europeos. De esta manera, se efectivizaría el sexto paquete de sanciones hacia Rusia, con el objetivo de detener la invasión contra Ucrania.
Cierres y primeros movimientos del día.
Con los mercados estadounidenses inactivos por el feriado del “Memorial Day”, la mira estuvo puesta en los mercados asiáticos y europeos: los principales índices bursátiles de ambas regiones cerraron al alza, donde Japón y Hong Kong lograron las mayores subas del día, con alzas respectivas de 2% y 2,1%. El impulso en ambas zonas se debió a la relajación de las restricciones en las ciudades de Shanghái y Beijing, en vistas a la reactivación económica del gigante asiático, que de a poco parece dejar atrás su política de “cero COVID”.
Por el lado de los commodities, el petróleo marcó un fuerte repunte y cerró la jornada con una suba del 2%, hasta alcanzar los USD 117. El crudo no alcanzaba este precio desde inicios de marzo del 2022, y el impulso se debió tanto al levantamiento de las restricciones en China como a la prohibición de la Unión Europea del petróleo ruso. Esto generó preocupación por el abastecimiento energético futuro, que se suma al inicio de una mayor demanda por parte de EE.UU, producto del principio del verano. De esta manera, el precio del petróleo vuelve a aparecer en el centro de la escena, tanto así como los efectos que una suba futura podría generar en la inflación a nivel global.
Los futuros de los mercados norteamericanos operan en caída esta mañana, encabezados por el Dow Jones, que retrocede un 0,6%, seguido por el S&P (-0,5%) y el Nasdaq (-0,1%). Por su lado, las tasas de Treasuries avanzan 6 pb y se ubican en 2,81%.
Esto ocurre luego de darse a conocer el embargo parcial del petróleo ruso desde la Unión Europea. La noticia continúa impactando en el petróleo, con sus futuros avanzando un 3% en lo que va de la mañana, acercándose nuevamente a los USD 119.
Esto impacta fuertemente en los mercados europeos, con todos sus principales índices retrocediendo desde la apertura de los mercados. Lo mismo ocurre en la región asiática, con excepción de China y Hong Kong, que continúan registrando ganancias luego de darse a conocer la noticia de la reapertura en las ciudades chinas.
Este contexto favorece al dólar, que vuelve a fortalecerse por sobre el euro y la libra esterlina, con el índice DXY avanzando nuevamente hacia los 102 puntos.
Sector monetario y financiero.
- La política monetaria sostiene su gestión contractiva durante abril, aunque con menor intensidad respecto a marzo. La gestión contractiva no está libre de costos, considerando los intereses que se devengarían del stock de pasivos monetarios del Banco Central.
- Las reservas internacionales netas volvieron a descender durante abril, a pesar del contexto favorable derivado de los altos precios internacionales. Las estimaciones de los activos netos de abril disminuyeron respecto al mes previo, situándose en torno a los U$S 4.101 millones.
- Los excesos monetarios de los años 2020 y de 2021 en un contexto de desajustes de precios relativos y desequilibrios macroeconómicos se presentan como condiciones favorables para el sostenimiento de la inflación.
- En la segunda semana de mayo el Banco Central reiteró la suba del nivel de tasa de interés de política monetaria con el objetivo de intentar establecer incentivos en el mercado local y afectar la inflación, situándola en 49% y a la tasa de referencia efectiva anual en 61,7%.
- La tasa de interés BADLAR (depósitos mayoristas) asciende a 54,5% lo cual genera una rentabilidad incipiente si se observa al mercado de cambios pero se matiza con la pérdida de la menos 3% respecto a inflación interanual de abril.
- Desde el objetivo de contraer la cantidad de dinero la autoridad monetaria sigue constituyendo deuda con el sector bancario (LELIQ/NOTALIQ) la cual asciende a $ 5,06 billones en el inicio de mayo, nivel sustancialmente superior respecto al promedio del año 2021, $ 2,01 billones.
- La Base Monetaria del mes de abril se contrajo, ajustada por estacionalidad y a precios constantes, en 5% respecto al mes anterior, desde una contracción nominal promedio de 0,9% (-$31,6 miles de millones).
- Dados los pasivos monetarios del Banco Central, el aumento de la tasa de interés de política monetaria, si bien es un instrumento a los fines de afectar la dinámica inflacionaria, el efecto no deseado es la generación anual de intereses de aproximadamente $3,08 billones.
- El sostenimiento del torniquete monetario intermensual de abril, aunque menor al de marzo, se sostiene en el contexto de estabilizar el mercado monetario vía la eliminación gradual de la asistencia al sector público, contraer la cantidad de dinero y la convergencia hacia tasas de interés reales positivas.
- Durante abril el nivel de Reservas Internacionales brutas presentó una disminución de 2,6% respecto de marzo 2022, registrando una caída de U$S 1.130 millones y a pesar del ingreso de U$S 6.247 millones del desembolso del FMI durante marzo.
- Las Reservas brutas se registran en los U$S 42.007 millones en el cierre de abril, representando un aumento acumulado de U$S 2.880 millones respecto de diciembre 2021.
- La estimación del nivel neto de reservas internacionales resultaría en U$S 4.101 millones en el cierre de abril, registrando una marcada recuperación en relación al primer bimestre, período en el que resultaron negativas.
- La asistencia al Tesoro Nacional en concepto de adelantos transitorios y utilidades correspondiente al período enero-abril 2022 resultó en $ 202.000 millones. Esto representó un aumento de 6,3% respecto del mismo período de 2021.
- La gestión cambiaria continuó bajo el sistema de pequeñas depreciaciones diarias (crawling peg) en 0,2% promedio en el segmento formal generando mayor atrasado respecto a la variación mensual del índice de precios minorista (6%).
- Durante el mes de abril las presiones sobre el mercado de cambios informal evidenciaron cierto retroceso respecto a lo ocurrido en el primer bimestre del año. Hacia el final de abril la cotización se situó en $/U$S 200,5, constituyendo una brecha de 66% respecto a la cotización oficial.
- El riesgo país medido por el EMBI+Arg se registró en los 1.801 p.b. en el cierre de abril y en ascenso debido a que en la segunda semana de mayo se establece en 1.894 p.b. Nivel alto respecto a la región y se espera mayor volatilidad durante el resto del año el panorama político nacional y las condiciones macrofinancieras de nuestro país.
- El nivel de tasa de política monetaria reiteró un ascenso hacia el inicio del mes de mayo para establecerse en 49%, es decir, dos puntos porcentuales por encima del 47% de abril. Las expectativas en relación a un nuevo aumento vuelven a activarse dada la necesidad del programa monetaria del año en curso.
- En ese mismo sentido, la tasa de interés por depósitos mayoristas se presenta con cierta rentabilidad frente al mercado de cambios pero en retroceso real respecto a la inflación mensual e interanual. Concretamente, la tasa BADLAR se establece en 54,5% en su valor efectivo anual, mientras que la inflación interanual de abril registró un nivel de 58%.
- Durante el primer cuatrimestre del año la asistencia al Tesoro Nacional en concepto de adelantos transitorios y utilidades ascendió a $ 202.000 millones, representando un crecimiento del 6,3% respecto del promedio del mismo cuatrimestre de 2021, el cual se había situado en los U$S 190.000 millones.
- Las Reservas Internacionales brutas registran un saldo de U$S 42.007 millones en el cierre de abril lo cual se traduce en una disminución mensual de U$S 1.130 millones a pesar de las mejores condiciones de precios de exportables, aunque en un contexto de incertidumbre de mercado dadas las tensiones políticas y los desequilibrios macroeconómicos no resueltos.
- Durante el primer cuatrimestre del año se produjo un aumento neto de reservar en torno a los U$S 2.880 millones, representando una recuperación de U$S 1.898 millones respecto al mismo período del año 2021 y un mayor crecimiento respecto al año 2020, esto es, U$S 4.093. La recuperación se deriva principalmente del primer desembolso correspondiente al acuerdo con el FMI y, en menor medida, del mejor nivel de precios de los bienes agrícolas exportables como el trigo y la soja.
- La estimación del nivel neto de reservas internacionales correspondiente con el descuento de asignaciones por derechos especiales de giro del FMI, obligaciones monetarias con otras entidades (swaps) y los depósitos por encajes en moneda extranjeras de entidades financieras resultaría en U$S 4.101 millones en el cierre de abril. Esto a pesar del aumento registrado durante agosto debido a la recepción de los DEG del FMI de U$S 4.319 millones y de U$S 6.752 millones pues, ambas partidas se contabilizaron como aumento bruto de reservas.
- La gestión monetaria del mes de abril sostuvo su sesgo contractivo en aras de afectar el impulso inflacionario. En ese sentido, la Base Monetaria se ubicó en $3.628,7 miles de millones, lo que se tradujo en una caída nominal promedio de 0,9% (-$31,6 miles de millones). En efecto, se sostienen dos meses consecutivos de contracción nominal.
- El sostenimiento del torniquete monetario intermensual de abril, aunque en menor medida respeto al de marzo, se establece en el contexto de estabilizar el mercado monetario vía la eliminación gradual de la asistencia al sector público, contraer la cantidad de dinero y la convergencia hacia tasas de interés reales positivas. Aspecto que en el mediano plazo no está libre de riesgo en relación a incumplimientos derivados de un mayor peso relativo de los servicios de deuda.
- Desde la estrategia de contraer la cantidad de dinero para digerir los excesos monetarios, el Banco Central sigue constituyendo pasivos con el sector bancario (LELIQ/NOTALIQ) devengando intereses. Estos pasivos en el inicio de mayo se establecen en $ 5,06 billones lo cual representa un nivel superior de 152% respecto del promedio del año 2021, $ 2,01 billones.
- La depreciación nominal de abril registró un promedio diario de 0,2%, nivel similar al primer bimestre del año y menor a la dinámica de los demás precios de la economía, generando un atraso respecto al nivel de precios minorista. A su vez, el mercado minorista en el cierre de abril registró una depreciación de 12% respecto de principios de año y la inflación del mismo período fue 23%. La cotización promedio de cierre fue $ 120,6 aunque luego del impuesto País y la nueva retención, la cotización efectiva resulta en $ 199.
- En el mes de abril se establecieron menores presiones cambiarias sobre el mercado informal. En concreto, la cotización informal en el cierre de abril se registró en los $/U$S 200,5 desde los $/U$S 200 de marzo. Esto como consecuencia del sesgo restrictivo de la gestión monetaria y el influjo de divisas. No obstante, la cotización en este mercado sigue influenciada por el ciclo político, la incertidumbre sobre el rumbo inflacionario y económico.
- El riesgo soberano medido por el EMBI+Arg se registró en los 1.801 p.b. en el cierre de abril y en ascenso debido a que en la segunda semana de mayo se establece en 1.894 p.b., nivel alto respecto a la región y se espera mayor volatilidad durante el resto del año el panorama político nacional y las condiciones macrofinancieras de nuestro país lo cual, a su vez, establece un mayor nivel de incertidumbre de mercado.
Sector externo.
- Las derivaciones del conflicto entre Rusia y Ucrania exponen impulsos inflacionarios y de incertidumbre sobre la economía mundial. Los países con condiciones iniciales de fragilidad están expuestos a recibir dichos efectos con mayor intensidad.
- El tipo de cambio real evidenció una disminución promedio mensual de 2% durante el mes de abril de 2022 (base 2010=1). En tanto, respecto del promedio del año 2021 se registró una apreciación de 14%.
- Las derivaciones de la invasión de Rusia a Ucrania plantean complejidades en la economía mundial desde la extensión temporal del conflicto, las potenciales derivaciones hacia otros países y la inflación de las commodities agrícolas.
- La inflación se sostiene en Estados Unidos volvió a impulsarse durante abril 2022 con una variación interanual de 8,3%, constituyendo una disminución marginal respecto del mes anterior.
- En ese contexto de inflación inédita de los últimos 40 años en Estados Unidos, la Reserva Federal anunció la suba de tasa en 50 puntos básicos, estableciéndose entre 0,75% y 1%.
- El intercambio comercial de marzo 2022 se incrementó 30,7% en relación con el mismo mes del año 2021, registrando un valor de U$S 14.425 millones, valor similar al del mes de junio 2013 (U$S 14.126 millones).
- El saldo de la balanza comercial de marzo 2022 fue superavitario en U$S 279 millones, representando una disminución de 30,3% (U$S 121 millones) respecto del mismo mes de 2021.
- El nivel de exportaciones del primer trimestre del año registró un crecimiento interanual de 25,6% respecto al mismo período de 2021, alcanzando los U$S 19.352 millones. Debido principalmente a un incremento interanual de los precios de 21,7%.
- Las estimaciones de mercado resultan en un saldo comercial positivo para este año de U$S 11.419 millones. Asimismo, el nivel de exportaciones se estima en U$S 79.181 millones, mientras que las importaciones se situarían en U$S 67.763 millones.
- El nivel del tipo de cambio real (TCR) promedio durante abril 2022 registró una apreciación respecto de marzo 2022 de 2% (diciembre 2010=1). Mientras que en lo transcurrido de mayo la apreciación intermensual real sería 1,7%.
- El tipo de cambio real (TCR) se ubica 23% por debajo del promedio histórico enero 1959- abril 2022, es decir, en promedio histórico, el nivel actual también registra una apreciación real.
- Las derivaciones de la invasión de Rusia a Ucrania plantean complejidades en la economía mundial desde la extensión temporal del conflicto, las potenciales derivaciones hacia otros países, inflación de las commodities agrícolas, interrupciones en la provisión de materias primas y un escenario de mayor conflicto que pueden determinar características de mayor deterioro para algunas economías.
- Las complejidades en la economía internacional debido al conflicto se materializan con mayor intensidad en economías con condiciones de inestabilidad como Argentina. Concretamente, el aumento el costo de la energía y costos transaccionales asociados pueden generan impulsos inflacionarios adicionales, en efecto es lo que se observa en el caso de la economía argentina.
- La dinámica inflacionaria en Estados Unidos registró se sostuvo durante abril, aunque con un aumento mensual menor respecto de marzo. El crecimiento del índice de precios fue 0,3% respecto de marzo 2022. Ciertamente menor al crecimiento intermensual del mes de marzo, como consecuencia de una caída en el precio de la gasolina de 6,1% respecto de ese mes.
- Mientras que la dinámica interanual de precios de Estados Unidos registró un crecimiento de 8,3%, principalmente como un efecto directo del aumento de los costos de la energía en 30,3%. Se constituye en un nivel similar al registro en enero de 1982 (8,3%), período aún con efectos derivados de la segunda crisis de oferta de petróleo de 1979, los precios se habían casi triplicado.
- Dado el contexto de inflación en Estados Unidos, el mayor desde principios de la década de 1980, la FED anunció la suba del costo del dinero en 50 puntos básicos constituyendo a la tasa de referencia en 1% anual. La necesidad de estabilizar los precios internos y de morigerar los efectos de la guerra Rusia-Ucrania determina que la política monetaria de la FED se revierta a un sesgo contractivo que se proyecta hasta al menos fin de año.
- El intercambio comercial (exportaciones más importaciones) correspondiente al primer trimestre de 2022 presentó un crecimiento interanual de 32% alcanzando un valor de U$S 37.310 millones, dado el mejor nivel de precios de los exportables y un aumento incipiente de las cantidades.
- Durante marzo 2022 las exportaciones alcanzaron U$S 7.352 millones y las importaciones, U$S 7.073 millones. En comparación al mismo período del año 2021, las exportaciones ascendieron 28,5% (U$S 1.632 millones) debido principalmente al aumento en 22,6% de los precios. Mientras que por el lado de las importaciones, durante ese período se registró un aumento interanual de 33% (U$S 1.753 millones) por suba en cantidades de 16,7% y un aumento de precios de 13,7%.
- La balanza comercial del primer trimestre del año registró un superávit de U$S 1.394 millones lo cual representa una contracción de 45% (U$S 1.136 millones) respecto del mismo período de 2021. Se observa que si hubiesen prevalecido el nivel de precios del primer trimestre de 2021 el saldo de comercio habría arrojado un menor superávit que se registraría en los U$S 424 millones.
- Por lo tanto, ante el incremento del índice de precios de las exportaciones de 21,7% por encima del índice de precios de las importaciones en 16,1%, el país registró una ganancia en los términos del intercambio de U$S 777 millones de dólares es decir, el efecto precio generó ese excedente comercial.
- Las estimaciones de mercado suponen un balance de comercio externo positivo para este año en torno a U$S 11.756 millones que representaría una caída de -20,3% respecto al año 2021; esto se traduciría en una pérdida derivado de un menor ingreso de divisas comerciales por –U$S 2.995 millones.
- Mientras que se proyecta un nivel de exportaciones en U$S 85.032 millones, las importaciones serían de U$S 73.276 millones. En comparación con el año 2021 ese desempeño representaría un crecimiento interanual de las exportaciones en 9,1% y, por otro lado, un crecimiento de 16% en las importaciones.
- Respecto a la demanda de divisas, el mercado informal presentó una menor varianza respecto a los meses previos lo cual descomprimió temporalmente la brecha cambiaria promedio del mes que se estableció en 66%. No obstante, las tensiones políticas respecto a la gestión económica, la descoordinación del espacio político de gobierno y el nivel de incertidumbre respecto a las variables nominales de la economía generan un potencial desalineamiento.
- La cotización oficial sigue situándose por debajo de los valores observados en el mercado informal. El valor de cierre del mes de abril en el mercado informal se situó en $/U$S 200,5 y del tipo de cambio oficial promedio minorista fue $/U$S 120,6, no se observó variación intermensual en la cotización informal y, por otro lado, en la cotización oficial la variación respecto del mes anterior fue 4%.
- El nivel del TCR del mes de abril, estimación para el comercio y la competitividad, se encuentra en un nivel menor respecto del promedio del año 2021, notando una apreciación de 14%. Mientras que si se observa la apreciación parcial de mayo es 15,3%. Esto debido a las variaciones incipientes del tipo de cambio nominal y una elevada variación mensual del nivel de precios de la economía, es decir, que la variación de precios claramente deteriora a la ganancia de competitividad de la depreciación de la moneda nacional.
- A su vez, si se observa el promedio histórico de la cotización oficial del período enero 1959 - abril 2022 (base diciembre 2010), se ubica un 23% por debajo de ese promedio, es decir, un nivel de TCR con una apreciación en perspectiva histórica.
- El dólar de “equilibrio” estimado por el IAE-Austral (valor del dólar según el TCR promedio del período diciembre 2010-abril 2022) en la cotización formal efectiva del mercado minorista sería de $/US$ 226 (incluyendo gravámenes). Por lo tanto, el tipo de cambio actual estaría 14% por debajo de ese valor y dependiente de la inflación futura, es decir, un mayor atraso cambiario.
Sector fiscal.
- Las restricciones para la política fiscal se derivan principalmente de las tensiones políticas dentro del Gobierno. Esto establece un mayor nivel de incertidumbre de mercado, que dificulta con mayor intensidad la gestión económica.
- Se torna con dificultades el programa fiscal acordado con el FMI que establece una disminución gradual del déficit fiscal primario y minimizar el financiamiento monetario. Debe notarse que, en el corto plazo, el conjunto de medidas de política necesarias como el ajuste tarifario, pueden transformarse en una mayor escala.
- Se evidencia la sostenibilidad de restricciones sobre la gestión fiscal derivadas del espacio político de gobierno. Un programa de estabilización es dependiente de la cohesión para lograr los objetivos, en este caso, principalmente de quiebre de la inercia inflacionaria.
- La corrección de precios de los servicios públicos plantea mayores tensiones para el programa fiscal y la dinámica de precios. Si bien la necesidad de ajuste tarifario es evidente, el traslado a los demás precios de la economía debe ser matizado por medidas de gestión fiscal.
- Las metas establecidas en el acuerdo con el FMI en relación a las tres variables clave, déficit fiscal primario, reservas internacionales y emisión monetaria, estarían cumplidas para el primer trimestre del año. No obstante, se debería recalibrar los objetivos para el segundo trimestre del año, principalmente respecto a la gestión inflacionaria.
- La recaudación impositiva de abril de 2022 totalizó $1.341.595 millones lo cual se tradujo en un crecimiento de 64% respecto de marzo de 2021. El aumento nominal interanual de la recaudación se sostiene por encima del aumento de precios.
- El poder adquisitivo interanual de la recaudación tributaria evidencia una recuperación de 6% debido a que la inflación interanual en ese mismo período se situó en 58%. Esto genera una recuperación relativa para los ingresos fiscales.
- El resultado primario de marzo 2022 registró un déficit de $99.753 millones y un déficit financiero de $172.029 millones luego de incluir los intereses netos de deuda pública de $72.276 millones.
- Durante el primer trimestre del año el déficit primario acumulado se sitúa en los $ 192.735 millones, mientras que el resultado financiero es de -$459.595 millones, lo cual constituye un aumento de 150% respecto al mismo período del año 2021.
- Es evidente que la sostenibilidad de restricciones sobre la gestión fiscal derivadas del espacio político de gobierno y, en menor medida, del contexto internacional, marcado por el conflicto Rusia-Ucrania, dificultan el cumplimiento de los objetivos. Un programa de estabilización que intente lograr un quiebre de expectativas y un sendero de desinflación, es dependiente de la cohesión.
- Emergen mayores dificultades en el desempeño de la política fiscal, pues la corrección de precios de los servicios públicos plantean mayores tensiones para el programa fiscal y la dinámica de precios. Si bien la necesidad de corrección tarifaria es evidente, el traslado a los demás precios de la economía debe ser matizado por medidas de gestión fiscal.
- Las metas establecidas en el acuerdo con el FMI en relación a déficit fiscal primario, reservas internacionales y emisión monetaria, estarían cumplidas para el primer trimestre del año.
- Concretamente, el déficit acumulado fue menor en $29.529,17 millones al pautado, se generó una acumulación de reservas internacionales por U$S 4.010 millones siendo que la meta era de aumento en U$S 1.200 millones y los adelantos transitorios al Tesoro nacional sumaron $122.000 millones del máximo acordado por $236.000 millones.
- La recaudación impositiva de abril de 2022 totalizó $1.341.595 millones lo cual se tradujo en un crecimiento de 64% respecto de abril de 2021. El aumento nominal interanual de la recaudación nuevamente estuvo por encima del aumento de precios del mismo período.
- El poder adquisitivo interanual de la recaudación tributaria evidencia una recuperación de 6% debido a que la inflación interanual anual del período se situó en 58%. Mientras que el crecimiento mensual de los ingresos registró 8%. Esto genera una recuperación relativa para los ingresos fiscales.
- Ante la escasez de inversión en el sector energético y los costos derivados del conflicto Rusia-Ucrania el peso relativo de los subsidios puede determinar una mayor necesidad de recursos fiscales, pues los últimos años el peso promedio fue del 2% del PIB. Esto circunscripto en el programa de meta fiscal puede ser un factor de desalineamiento sustancial y nueva necesidad de emisión monetaria.
- El resultado primario de marzo registró un déficit de $99.753 millones donde las prestaciones sociales explican el 55% del gasto corriente total. Mientras que los intereses netos de deuda registraron $72.276 y, en consecuencia, el déficit financiero fue $172.029.
Actividad económica.
- La dinámica de la actividad económica se presenta positiva en los primeros meses del año, aunque el escenario autogenerado por la política la expone frente a dificultades no esperadas. El desacuerdo y las tensiones sobre el curso de la gestión económica expone al desempeño futuro de la economía a un potencial sesgo contractivo.
- Las proyecciones de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) están determinadas por la gestión y los resultados en materia de estabilización. Esto ciertamente se emerge como un panorama de fragilidad frente a las tensiones internas del gobierno.
- Si bien la actividad económica se sostiene en un desempeño mensual positivo en el primer cuatrimestre del año, el alto nivel de incertidumbre de mercado respecto a la gestión económica, los futuros ajustes de precios relativos y la dominancia política generan complejidades para su sostenimiento.
- El Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central proyecta un crecimiento de la actividad aunque se sostiene dependiente de la coyuntura política e internacional. Se estima un crecimiento de 3,4% anual para este año y de 1,8% y 1,9% para los años 2023 y 2024, respectivamente.
- Las estimaciones del Producto Interno Bruto (PIB) en términos trimestrales proyectan un mejor crecimiento para el primer trimestre respecto a la edición anterior que se sitúa en 1,1%. Mientras que para el segundo y tercer trimestre de 2022 se proyecta -0,7 y -,03%, respectivamente.
- El último dato sobre actividad derivado del estimador mensual de actividad económica (EMAE) correspondiente a febrero de 2021 registró una marcada variación interanual de 9,1%. Mientras que desde el indicador desestacionalizado se observó una recuperación de 1,8% respecto al mes anterior.
- El Índice de producción industrial manufacturero (IPI manufacturero) correspondiente a marzo 2022 registró una suba de 3,6% respecto a igual mes de 2021. Mientras que durante este mes el índice de la serie desestacionalizada muestra una variación positiva de 0,7% respecto al mes anterior.
- De acuerdo a la CAME, durante marzo de 2022 la producción de PYMES Industriales creció 8,5% respecto del mismo mes de 2021. Por otro lado, en la comparación respecto de febrero de 2022 la dinámica industrial muestra un aumento de 2,1%.
- Según el relevamiento de ventas minoristas pymes realizado por la CAME las ventas a precios constantes registraron un aumento mensual de 0,3% durante abril de 2022 y una expansión de 6% frente al mismo mes del año 2021.
- El desacuerdo y las tensiones sobre el curso de la gestión económica exponen al desempeño futuro de la actividad económica a un potencial sesgo contractivo. La evidente falta de cohesión sobre un programa de estabilización macroeconómico que se asociada al ajuste de variables nominales, principalmente en la gestión sobre la inflación, afecta no solo a la gestión sino al éxito del mismo.
- En las estimaciones del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que realiza el Banco Central se informa una proyección favorable sobre la actividad. El crecimiento correspondiente al año 2022 sería 3,4%. Mientras que para el correspondiente a los años 2023 y 2024 se produjo un ajuste situándose en 1,8% y 1,9%, respectivamente.
- Las proyecciones de mercado respecto al crecimiento de la economía dependerán de la coordinación de la política económica, del programa de estabilización macroeconómico y del espacio de gestión, incluido el político, para el cumplimento de las metas propuestas. En efecto, ante la ausencia de acuerdos y cohesión respecto al programa económica, menor será la probabilidad de éxitos de las políticas.
- Durante febrero de 2022 el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) registró un crecimiento de 9,1% respecto al mismo mes de 2021. A su vez, el indicador desestacionalizado presentó una suba de 1,8% respecto al mes anterior, mientras que el indicador tendencia-ciclo registró una variación incipiente de 0,3%.
- Las actividades con mayor incidencia positiva en la variación anual del EMAE fueron Comercio Mayorista, Minorista y Reparaciones e Industria Manufacturera. Mientras que el crecimiento de mayor dinámica estuvo en el rubro Hoteles y Restaurantes con una variación interanual de 31,9%. Por otro lado, la única rama de actividad con incidencia negativa y retracción anual fue Agricultura, Ganadería, Caza y Silvicultura, con un retroceso de -0,8%.
- El Índice de producción industrial manufacturero (IPI manufacturero) de marzo 2022 registró una suba de 3,6% respecto a igual mes de 2021, acumulando un crecimiento de 3,6% durante el primer trimestre del año. Ciertamente, un menor nivel al que se había observado en la recuperación acumulada del primer trimestre de 2021, la cual se había registrado en 12,7%.
- Se destaca que doce de las dieciséis divisiones de la industria manufacturera relevadas por el IPI presentaron subas interanuales. Se destacan los desempeños en Vestimenta (27,3%) y Maquinaria y Equipo (5,9%).
- La producción de PYMES Industriales, relevada por la CAME, presentó una recuperación interanual de 8,5% durante marzo 2022. En esa dinámica, el uso de la capacidad instalada se ubicó en 71,6%, 1,6 puntos porcentuales por encima de febrero.
- Desde ese relevamiento se desprende que el 60,6% de las pymes encuestadas evaluó la situación actual de su empresa como buena o muy buena, disminuyendo 6 puntos porcentuales con relación al mes anterior. En ese sentido, los ajustes de los costos fueron superiores a lo esperado y presionaron sobre los niveles de rentabilidad de cada empresa.
- De acuerdo al relevamiento sobre las ventas minoristas del segmento PYME realizado por la CAME, durante abril se registró una expansión interanual de 6% a precios constantes y un crecimiento de 0,3% en relación a marzo 2022. Mientras que en el acumulado del primer cuatrimestre del año se registra una suba de 7,6%.
- En lo que respecta al panorama del sector y de acuerdo a la encuesta de CAME, de los 980 comercios relevados del país, el 56,4% de los empresarios informaron que sus ventas del mes fueron entre buenas y muy buenas. A su vez, el 42,2% informó que las utilidades registradas en marzo fueron buenas o muy buenas.
Precios.
- La inflación mensual minorista de abril tuvo un nuevo ascenso, aunque menor al mes anterior, ubicándose en 6%. En términos interanuales el crecimiento del índice de precios registró una variación de 58%, la mayor desde enero de 1992.
- Las proyecciones de inflación se sostienen en un mayor nivel promedio respecto al año anterior. El Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central estima un crecimiento anual notablemente mayor al nivel de precios del mes pasado, situándolo en 65,7% para el año en curso.
- La dinámica inflacionaria mensual se sostiene en ascenso frente a la insistencia de la gestión no convencional y la ausencia de resultados, las tensiones en el espacio político de gobierno y los impulsos externos.
- Expectativas de inflación que se corrigen hacia niveles mayores se asociación con una gestión difusa e incierta en relación a sus objetivos. En efecto, se sostiene la necesidad de un conjunto de medidas de mayor alcance y cohesión para evitar mayores desalineamientos de precios.
- De acuerdo al mensual relevamiento (REM) del Banco Central este año la inflación se situaría en 65,7%, en el 2023 sería 52,3% y hacia el año 2024 se proyecta 44,6%. Las proyecciones del comportamiento de precios se sostienen elevadas frente a un año de ajustes tarifarios e impulsos por una nueva fase de inflación derivada de los costos energéticos futuros.
- El aumento de las proyecciones de mercado respecto a la inflación anual para los próximos tres años se circunscribe ante la necesidad de una gestión de mayor alcance y cohesión.
- El nivel general del Índice de Precios al Consumidor (IPC) registrado en abril de 2022 muestra una variación mensual de 6%. Mientras que en términos interanuales, el aumento es 58%, constituyéndose en el mayor desde enero de 1992.
- El Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM) registró un crecimiento interanual de 50,3% en el mes de marzo 2022 sosteniéndose en un nivel mensual relativamente alto desde octubre de 2020.
- La dinámica inflacionaria mensual se sostienen en un nivel moderadamente alto frente a la insistencia de la gestión no convencional de control de precios, las tensiones en el espacio político de gobierno y los evidentes impulsos derivados del conflicto en Europa. Será necesario el abandono de la gestión dominada por la política para optar por una gestión de mayor alcance combinando aspectos monetarios y fiscales.
- Nuevamente destacamos que expectativas de inflación en niveles más elevados configuran decisiones de precios sesgadas por el entorno, lo cual hace costoso y complejo la gestión de la política de estabilización. Decisiones de precios en niveles inflacionarios mediano y alto, no solo inducen mayores costos en toda la estructura económica sino que ralentizan decisiones económicas y financieras. Por lo tanto, pueden ralentizar la recuperación de la actividad económica.
- La inflación del mes de abril marzo de 2022 registra un aumento mensual de 6%, acumulando 23,1% en el año. Se destacan subas mensuales por encima del promedio en rubros tales como Vestimenta (9,9%), Restaurantes (7,3%) y Salud (6,4%).
- El registro de inflación mensual de abril aún está en un nivel moderado-alto, similar al de enero de 2014 y septiembre 2019, períodos en los que se generaron depreciaciones abruptas del tipo de cambio a los efectos de corrección, como en el año 2014 y con la crisis derivada de las elecciones PASO 2019.
- En términos interanuales la inflación de abril se estableció en 58%, la mayor variación desde enero de 1992 cuando se había registrado 76%. En esta dinámica se destacan el crecimiento en Vestimenta (73,4%) y Alimentos y Bebidas (62,1%), rubros con mayor peso relativo de la canasta de ingresos bajos y medios lo cual deteriora la capacidad de consumo.
- Las proyecciones informadas en el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), realizado por el Banco Central, estiman que la inflación minorista de mayo sería 4,4%, nivel inferior al promedio proyectado para el primer semestre del año (5%). A su vez, la inflación anual para el año 2022 se proyecta en 65,7%. Mientras que para el año 2023 la proyección es 52,3% y hacia el año 2024 sería 44,6%.
- Las proyecciones para el segundo trimestre de 2022 reiteran un nivel ascendente de la dinámica de precios. En concreto, en el período abril-junio 2022, el aumento acumulado de precios minoristas se situaría en 14,4%, nivel superior al del mismo período de 2021 con un registro de 10,6%.
- La dinámica mensual del Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM) correspondiente a marzo de 2022 registró un aumento del orden de 50,3% respecto del mismo mes de 2021. Mientras que en términos intermensuales la dinámica volvió a acelerarse al notar un aumento de 6,3% respecto de febrero 2022.
- La variación intermensual del IPIM se explica como consecuencia de la suba de 6,4% en los productos nacionales, donde el factor manufacturas y energía eléctrica presentó un crecimiento similar de 6,3%. Mientras que los precios de los productos importados ascendieron 5,4% mensual.
La inflación, que ya es un problema mundial, se encuentra lejos de los niveles de Argentina...
Según el INDEC, la inflación mensual en Argentina alcanzó el 6,0% en abril. Los aumentos de precios mostraron una gran dispersión, con valores máximos de casi 10% en prendas de vestir y calzado y mínimos de 3,3% en bebidas alcohólicas y tabaco. Alimentos y bebidas no alcohólicas, un rubro especialmente importante por su impacto sobre el consumo básico y el bienestar, aumentó un 5,9%.
Como complemento a la variación mensual, conviene señalar que la inflación interanual (abril de 2022 contra abril de 2021) llegó al 58,0%, y que la acumulada en el año ya es del 23,1% (cuando en abril del 2021 estaba en 17,6%). Por último, la inflación núcleo, es decir, la que se obtiene extrayendo el comportamiento de precios de bienes estacionales y regulados, mostró un aumento del 6,7%.
Es cierto que desde la última parte del 2021 la inflación ha vuelto a convertirse en un problema mundial, aunque muy lejos en magnitud de los valores de la economía argentina. Por ejemplo, en octubre del año pasado, de un grupo de 36 países pertenecientes a la OECD, sólo 13 de ellos tenían inflaciones superiores al 5% anual, y sólo uno de ellos (Turquía) tenía una inflación por encima del 10%. En marzo de este año, únicamente seis países (Francia, Israel, Japón, Corea, Noruega y Suiza) registraron inflaciones por debajo del 5% y en siete de ellos la inflación superó el 10%. Por fuera de la OECD, la inflación alcanzó el 11,3% en Brasil, el 5,4% en India, el 16,7% en Rusia y el 6,1% en Sudáfrica, también en marzo. Sólo China (1,5%) parecía mantenerse al margen, aunque en abril ya se observó un aumento significativo (2,1%).
¿Cómo se origina la inflación? En Argentina el debate parece complejo, pero en realidad la experiencia internacional histórica de un amplio grupo de países en desarrollo (donde Argentina no es la excepción) ha permitido sistematizar el conocimiento y agrupar las causas en cuatro grandes grupos. En primer lugar, la inflación puede deberse a desequilibrios fiscales que obligan a aumentar el ritmo de creación de dinero (monetizando el déficit) o que conducen a una crisis de balanza de pagos forzando una depreciación del tipo de cambio. En segundo lugar, la inflación puede indicar que la economía está creciendo por encima del ritmo que es compatible con estabilidad de precios. Una tercera fuente de inflación puede examinarse desde el lado de la oferta de la economía (un shock de costos de producción). Por último, la inflación puede perdurar en el tiempo al tener un componente inercial que actúa sobre las expectativas y sobre salarios y contratos.
Estas causas actúan de modo distinto dependiendo de cada país y su importancia varía. En aquellos con inflaciones bajas (por ejemplo, por debajo del 5%) o moderadas (entre 5% y 10%) el componente inercial es muy importante y eventualmente puede sumarse algún shock de oferta. Pero en economías con inflaciones elevadas (como Argentina) las variables fiscales, la expansión monetaria y los movimientos del tipo de cambio juegan un rol importante y predominante. Y, por supuesto, cuanto más “flotante” o libre sea el tipo de cambio, mayor será el impacto de los cambios en variables fiscales y monetarias. De las cuatro causas mencionadas anteriormente, la única que en la actualidad no estaría incidiendo sobre la inflación es el ciclo económico, más allá de la rápida recuperación de la economía luego de la crisis motivada por la pandemia.
La implementación de una política de shock (como la dolarización) podría suprimir la inflación de modo muy rápido al actuar sobre las expectativas y eliminar la utilización del dinero y del tipo de cambio como elementos que contribuyen a la inflación, pero implicaría el costo de reducir demasiado el margen de maniobra con la política económica en tiempos internacionales muy complejos e inciertos, y esto hace que el resultado final de un análisis de beneficios y costos de dolarizar sea incierto, especialmente en el mediano y largo plazo. Es por ello que la alternativa de un programa amplio, que involucre metas fiscales y de inflación, pero también el debido apoyo político, aparece como la alternativa más viable. Son muchos los países que a través de ello lograron reducir de modo significativo la inflación, y Argentina no tiene por qué ser la excepción.
La coyuntura es la misma desde fines del año pasado, pero con un escalón mayor de inflación...
La coyuntura es similar a la que venimos observando desde la derrota del Gobierno a fines del año pasado, pero con el agravante de un escalón mayor de inflación, que incluso puede seguir ascendiendo. A su vez, el riesgo país es muy alto y el contexto político se encuentra muy trabado, con una coalición en abierto conflicto que no parece vaya a la reconciliación pero tampoco a un escenario generado por el entonces Vicepresidente Chacho Álvarez en octubre del año 2000, cuando se rompió la Alianza y empezó la debacle del régimen convertibilidad por vacío de poder.
En el mundo la inflación trepó a casi dos dígitos. En la región hemos vuelto a ver estadísticas preocupantes que tiene números más propios de los 90. Esto se va a corregir seguramente vía tasa de interés que es la receta como bien plantea Kiguel, más tradicional para contener las inflaciones de un dígito. La estrategia Biden-Powell en Estados Unidos irá por ese lado.
El gobierno insiste en que hay reactivación, los números no son contundentes. El dólar blue tranquilo, muy alto porque el dólar histórico desde Frondizi es $140. Es raro no se dispare más ante la ineptitud del peronismo en el poder. Este trimestre debería haber un respiro por los dólares ya que es el período clásico donde la cosecha suma liquidaciones. Pesce debería juntar más dólares en reservas que están virtualmente en cero. Mientras que la estrategia de Guzmán para bajar la inflación es tranquilidad macro que no consigue (frente monetario y fiscal), concertación (alineamiento de expectativas entre empresarios y sindicalistas-paritarias hacia la baja), modelo con el que Chile bajó la inflación de 20% a 2% en la década de 1990 con precios topeados.
La Estrategia Feletti, con resultado nulo. Sigue el enfrentamiento con las corporaciones que influyen, según ellos, en los precios. Llama la atención ese argumento, pues el único lugar del mundo en el que aparecería esta voracidad de rentabilidad es Argentina.
¿En los 90 los empresarios no querían sin inflación en el período 2001 y 1994 (entre puntas) ganar tanto dinero y tampoco especulaban? Apostaban por la equidad. Ahora hay que ponerlos contra las cuerdas para que cedan en su ímpetu de plusvalía. Es la visión Zaiat como representante de esa postura de empresarios especuladores que explican básicamente el 70% de la inflación. El foco del problema es la góndola y no el origen macro como relata, sin poder hacer mucho al respecto, un ministro de gran capacidad de diagnóstico aunque con reputación muy baja en lo concerniente a implementación.
¿Cómo sigue la película hasta las elecciones? Relato oficial de crecimiento que no será tal y una inflación que, en el cuarto oscuro, será de 9% mensual, muy lejos de la hiper pero altísima y muy eficaz para destruir voto kirchnerista. Pobreza creciente por baja actividad y por inflación al alza. Problemas energéticos por eventual falta de gas hasta que se termine el gasoducto Néstor Kirchner.
En definitiva, gran incertidumbre para invertir dejando el Frente De Todos una herencia compleja, un desafío para el arco opositor que aparentemente volvería a la cancha para mejorar la experiencia fallida en lo económico en el primer turno. En efecto, la oposición no luce blindada, hay internas fuertes entre los propios Pro, las clásicas con los radicales, las movidas asociadas al nuevo surgimiento en la política, que es Milei, y que corre el arco a la derecha liberal. Pues, a la derecha de Macri no había nada y ahora está Milei que, a su vez, atrae por pegarle duro a la casta, por levantar banderas liberales en un mar de intervencionismo estatal que fracasa día a día.
Es un tiempo de gran responsabilidad de la clase dirigente después de 12 años muy mediocres cuanto al funcionamiento del sistema institucional y macroeconómico pues, tenemos por delante muchos desafíos. El contexto político se enrarecerá tanto hacia una anarquía con ministerios loteados entre K y albertistas que quieren la reelección sin ningún mérito. ¿Seguirá complicado el frente externo por la guerra? ¿Se profundizará la crisis de precios energéticos? ¿Cuál será el candidato que se impondrá en las elecciones? ¿Dará confianza a un círculo rojo que invierte 16 puntos del PIB? ¿Cómo llevará el FMI el contralor de los números con cierta vista gorda o marcando los temas a trabajar? ¿Volverá el Covid con una nueva ola en este invierno y con confinamientos que frenen la oferta agregada como lo ocurrido en el año 2020?.
Disponemos de una gran diversidad de oportunidades que impulsen el crecimiento y desarrollo. En concreto, que la pampa húmeda se proyecte a 200 millones de toneladas de cosecha, que la Patagonia emule a la Pampa húmeda utilizando riego y generando 100 millones de toneladas hacia el año 2040. Vaca Muerta, bien viva, despachando gas y aprovechando este insumo para exportar petroquímica. Litio muy demandado para salir a la cancha en el esquema de autos eléctricos. Minería que emule a San Juan en todo el arco cordillerano, siguiendo la experiencia chilena, tan exitosa; sociedad basada en conocimiento que genere dólares por exportaciones. Ganadería que se siga recuperando en dólares y calidad. Pesca sacando todo el potencial, el sector automotriz volviendo a sus mejores momentos en relación al intercambio con Brasil. Turismo que pase de 6 millones de ingresantes al año al territorio argentino a 10 millones. Infraestructura, más modernizada, que permita sustentar el desarrollo.
Ya no hay inmigración europea, desde el primer peronismo la inmigración mayor es de países limítrofes a la que se suma Venezuela que no deja de ser relevante. Argentina no emigra a los limítrofes en 80 años, el destino es claro. Argentina es quien ofrece a los inmigrantes actuales, bienestar futuro. Debemos ser esa isla de prosperidad que supimos construir y que se nos ha complicado. Podemos inspirarnos en la región para lograrlo, sin buscar ejemplos en el sudeste asiático o en los bálticos. Para eso, la clase dirigente debe estar a la altura y la sociedad más madura para recrear la cultura del trabajo de nuestros bisabuelos inmigrantes.
Mis alumnos de ingeniería industrial que terminan la Carrera a los 22 años en la Universidad Austral me dicen: nos vamos muchos del país porque no podemos ahorrar y no hay rumbo. Paradoja, a fines de siglo sus bisabuelos por ese motivo llegaron al puerto de Buenos Aires, yendo a la ciudad o al campo para hacer la América, la mitad de ellos volvió a España o a Italia.
En suma, son muchos los frentes para invertir en un país con gente que hoy no está educada pero con potencial de estar mejor dentro de 10 años para enfrentar la revolución industrial 4.0.
El gasto público es excesivo, y es imperativo que se reduzca para revitalizar la economía...
El gasto público, a nivel de gobierno general, es excesivo, y es imperativo que se reduzca para revitalizar la economía. El país tiene un gasto muy por encima de los niveles de gasto de otros países comparables, y está entre los más altos de la región y de los países emergentes. El gasto primario, a nivel de gobierno general, que incluye el gobierno central y los gobiernos provinciales y municipales, creció de menos del 24% del PIB en 2005 a 40% en 2015. Después de una importante reducción a 35% en 2019, volvió a subir a casi 40% en 2020. Si bien en 2021 hubo un descenso a menos de 37%, sigue siendo muy elevado comparado con otros países. Si bien en 2005 el país tenía un nivel de gasto comparable con el promedio de las cinco economías más importantes de Latinoamérica, dicho promedio subió sólo gradualmente, nunca sobrepasando el 30% en los últimos quince años. Mientras tanto, la comparación con Asia es aún menos favorable, ya que las cinco economías más importantes del sudeste asiático tienen un promedio que osciló el 20% en el mismo período, y ahora se ubica en menos de 22%.
El problema de política económica más importante para el país es deshacer el tremendo aumento que se produjo durante el reinado kirchnerista. Entre 2005 y 2015, el gasto se duplicó, y tres cuartas partes del incremento se dio en el gasto nacional, impulsado por aumentos en jubilaciones, subsidios. El gasto provincial también subió en ese período por cerca de 5%, sin embargo, la razón del incremento fue diferente, ya que se debió al incremento del empleo público. Durante la gestión de Macri el gasto bajó entre 2016 y 2019 alrededor de 6% en una reducción que afectó los subsidios, los salarios y la inversión. Lamentablemente el gasto volvió a subir en 2020 por aumentos en salud, subsidios, inversión, gasto social.
Las jubilaciones, a 10% del PIB en 2021, son 40% del gasto primario nacional y 12% del gasto provincial. Son el doble del promedio de otros países comparables emergentes y de la región. Son también muy superiores al promedio de la OCDE. El gasto es elevado por lo extendido de la cobertura y lo generoso de los beneficios. Con jubilaciones otorgadas a menores edades que en otros países, hay 40% más jubilados que personas de más de 65 años, cuando la OCDE tiene sólo 9% más. La situación se agrava con regímenes que permitieron la incorporación de jubilados sin suficientes años de aportes, que actualmente son 30% del gasto jubilatorio. Y lo generoso de los beneficios se ve en tasas de reemplazo de más de 90% del salario, en comparación con menos del 60% para el promedio de la OCDE.
Las erogaciones salariales del sector público, a 10% del PIB, son el segundo mayor componente del gasto, y también son mayores que el promedio de Latinoamérica en más de un punto porcentual. Las provincias son responsables de 70% de este gasto, y en muchas de ellas, la proporción del empleo público es demasiado alta con respecto al empleo privado. Este indicador muestra que el país tiene un problema serio de desarrollo de las economías provinciales, con insuficiente dinamismo e inversión.
Los subsidios a la energía, a 2.3% del PIB, también son de los más altos en Latinoamérica. El actual esquema tarifario y de subsidios lleva a que la recuperación de costo energético es menos de la mitad. Es decir que no solo los subsidios son grandes desde el punto de vista del gasto público, sino que también son gigantescos desde el punto de vista microeconómico, con una tremenda distorsión entre costos y precios, ya que los precios no reflejan los costos y la mayor parte del costo de la energía es pagado por el fisco. Esto además significa una muy pobre asignación de recursos públicos, ya que los subsidios de la energía tienen por beneficiarios en gran parte a población de altos ingresos.
La dinámica del gasto es preocupante. Si bien el déficit fiscal primario nacional se redujo en 2021 a 3% del PIB con respecto a 2020, en que fue de 6.4%, la razón de la reducción fue la baja del gasto relacionado con la pandemia. Y la reducción fue mitigada por incrementos del gasto en varios de los segmentos, incluidos: subsidios, gasto social, transferencias a las provincias, otras transferencias e inversión. Es decir, el único componente que bajo fue el gasto de la pandemia. Y el gasto primario nacional excluyendo la pandemia creció en términos reales casi 12% en 2021. Así llegamos a fin de 2021 con un déficit nacional mayor que a fin del 2019, aún después de haber absorbido la disminución del gasto de pandemia. Mientras tanto, si observamos el déficit primario estructural, que excluye gasto de pandemia, y tiene en cuenta las condiciones cíclicas de precios, el déficit nacional aumentó de 1 a 2% del PIB potencial. Así, el déficit nacional total en 2021 fue de 4.5%, algo que la economía no está en condiciones de financiar.
La incertidumbre y la consecuente volatilidad de los mercados son los signos de estos tiempos...
La incertidumbre y la consecuente volatilidad de los mercados son los signos de estos tiempos, marcados, en seguidilla, por la pandemia y la invasión de Rusia a Ucrania. La pandemia amenaza con volver, aunque en un contexto de menor gravedad por la amplia presencia de vacunas, y la guerra puede ser más larga y amplia, al involucrarse más los países de Occidente. A esto se agregarían políticas más eficaces para reducir el cambio climático, con impacto probablemente negativo para el crecimiento.
En el plano estrictamente económico se destaca la alta inflación en EEUU y en otros países, principalmente causada, como acertadamente tituló The Economist “The Fed that failed”. Hemos dicho desde hace tiempo que la Reserva Federal postergó en demasía el aumento de sus tasas de interés, al tremendo costo de llevar la inflación anualizada en EEUU a cerca del 9%. En vez de reconocer su fracaso, el presidente de la Fed, Jerome Powell, dijo que no está en sus planes, por ahora, dar un salto grande en las tasas.
El IPC de abril se desaceleró levemente (de 8,5% a 8,3% anual). Sin alimentos ni energía, esta “inflación núcleo” creció 6,2% en el último año, pero, anualizando abril llegó a 7,4. Por su parte, el empleo aumentó en abril igual que en marzo, 428.000 puestos, una performance mediana y más aún por registrar menos creación de empleo privado que en marzo. En fin, para tener en cuenta y monitorear, el PIB, que había terminado el 2021 con un crecimiento de 6,9%, cayó 1,4% en el primer trimestre de 2022, claramente, un mal dato.
Las proyecciones del FMI de abril 2022, que ya incluyen algunos de los efectos de la invasión de Rusia a Ucrania (Cuadro 1), empeoraron para este año y el próximo salvo, para América Latina, sobre todo por las commodities de Argentina y Brasil. El mundo crecería 4,4% en 2022 (cayendo del 5,9% en octubre pasado), y sólo 3,8% en el 2023. El aumento del PIB global en el cuatrienio 2020-2023, caería a 2,7%. No está mal, dada la caída del 2020 por la pandemia, pero sí es bajo comparando con la pre-pandemia. Para la Argentina el FMI corrigió fuerte al alza, ubicando a nuestro país en un crecimiento superior al de América Latina (1,8% anual en 2020-23, el menor de los grupos del cuadro), y más que Brasil y Méjico. Hay que seguir esto con atención, porque podríamos estar en una nueva década perdida, o cerca, para la región o la mayoría de sus países.
En el cuadro 2 vemos que, previsiblemente, el dólar siguió afirmándose. De modo acorde, cayeron la mayoría de las monedas, salvo el dólar, las commodities, luego de grandes subas y todas las bolsas registradas en el cuadro. No hay que omitir, en fin, los peligros que conlleva la gigantesca deuda global, pública y privada, que supera, por primera vez, el 350% del PIB mundial.
El contexto global mencionado, ayudará a la Argentina por los altos precios de los commodities, principalmente los alimentarios. Pero la gran novedad del país es el acuerdo logrado con el FMI. No es el final de nada sino el inicio de una negociación permanente, al menos trimestre a trimestre, como ya se está viendo. En una mirada de mediano y largo plazo, la Argentina necesita acuerdos básicos que todavía no se avizoran. Seguimos jugando entre las grietas y reacios a acordar. Por cierto, el distanciamiento del “albertismo” y el “cristinismo” podría dar más lugar a acuerdos imprescindibles. Hace mucho tiempo que en esta columna sostenemos que sin acuerdos básicos será muy difícil, y hasta imposible, dejar atrás la última década sin crecimiento sostenido, transcurrida desde 2012 y la decadencia relativa, mucho más larga, de cerca de sesenta años. El ingreso per cápita de nuestro país ha caído desde un ranking cercano al vigésimo a principios de los setenta del siglo pasado, hasta debajo del sexagésimo puesto en la actualidad (sic).
Insistimos hasta el cansancio que tener y mostrar un rumbo claro es esencial, pero la Argentina va en dirección contraria y pocas veces ha sido tan confuso nuestro ¿quo vadis? Esta carencia de rumbo impide maximizar la calidad y cantidad de las inversiones en capital humano y en capital físico, para así crear todos los empleos productivos necesarios para erradicar la pobreza y reducir, más lentamente, la desigualdad. Evitando el riesgo de seguir bailando en el Titanic, hay que buscar acuerdos como los que ayudaron a salir de parecidos atolladeros, en el siglo pasado, a España en los setenta, a Israel en los ochenta, a Chile en los noventa y, en el siglo XXI, a Sudáfrica en los 2000.
Noticias y mercado: lo que pasó y lo que viene en el plano local e internacional.
Luego de siete semanas consecutivas a la baja, los mercados se vieron impulsados por distintos resultados empresariales y la publicación de datos económicos que superaron las expectativas. A esto se le sumó la reacción positiva que tuvo el mercado luego de las minutas de la FED, que fueron vistas con buenos por los inversores. Esto no solo dio un respiro a los bonos del Tesoro, sino que llevó a que Wall Street sorprenda y marque su mejor semana en lo que va del 2022.
China relaja las restricciones en Shanghái. Durante la última semana, el gigante asiático continuó con la liberación de las restricciones en Shanghái, producto de su política “cero COVID” impuesta a inicios de abril. Los casos se ubicaron cercanos a los 1.000 diarios – vs 30.000 un mes atrás –, lo que muestra que la ciudad ya se encontraría en la parte baja de la curva. Se espera que el país avance con la reapertura desde inicios de junio, por lo que la mira estará puesta en cómo continúan las restricciones en Beijing y el resto de las ciudades.
A la espera del voto de Hungría. La Unión Europea continúa con su intento de prohibir la importación de energía rusa, aunque aún necesita la aceptación de Hungría para establecer su sexto paquete de medidas contra el país conducido por Putin. Sin embargo, ya se está analizando embargar las entregas para así retrasar el pago a Rusia, lo que impactaría fuertemente en la economía de Moscú, cuya mayor debilidad continúa siendo la falta de divisas extranjeras para realizar sus pagos pendientes.
Commodities al alza. A pesar de la falta de sanciones, el petróleo continuó marcando un sendero alcista, al avanzar un 4,5% la semana previa, llegando a los USD 115, a lo que se le suma que el mercado estadounidense está iniciando su temporada de alta demanda, producto del inicio del verano. Esto podría impulsar aún más el precio del crudo, que ya marca un alza de 11,2% durante el último mes y 74% i.a. Por el lado de los granos, la atención estará puesta en si Putin acepta comercializar el trigo que está acumulándose en Ucrania. Esta noticia llevó a retroceder al commodity un 1% durante la semana previa, mientras que la soja terminó avanzando un 1,6%.
Balances sorprenden al mercado. A pesar de que la temporada de balances no venía sorprendiendo, muchas compañías lograron superar las expectativas en la última semana. Entre estas, se destacaron Costco (COST) y Alibaba (BABA), al obtener ingresos por encima de las proyecciones, además de Broadcom (AVGO) y NVIDIA (NVDA), que también superaron las ganancias por acción esperadas. A esto se le sumó la noticia de que JP Morgan actualizó al alza sus ingresos esperados para el 2Q22, producto de la suba de tasas establecida por la FED. Dicho suceso terminó impulsando fuertemente al sector bancario, que marcó una suba del 8% la semana anterior.
Minutas de la FED dan respiro al mercado. La reunión mensual de la Reserva Federal que tuvo lugar la semana previa llevó calma a los mercados, luego de que – por unanimidad – los integrantes consideren que la economía norteamericana mantiene una fuerte posición a pesar de la inflación al alza, por lo que descartan una recesión futura del país. Esto fue visto con optimismo, no solo por la unificación de opiniones, sino también por la incertidumbre que estaban sufriendo los mercados respecto a la estanflación que afectaría a EE.UU. De esta manera, los mercados vieron con buenos ojos la respuesta, a pesar de que aún se esperan mayores subas de tasas en lo que resta del año.
PMI y PBI a la baja. La semana pasada se dio a conocer el segundo avance del PBI del 1Q22, que terminó en una contracción de 1,5%, levemente por debajo de las expectativas (-1,3%) y del dato anterior (-1,4%). Sin embargo, esto no afectó en gran medida a los mercados, que ya descontaban esta caída para los primeros tres meses del año. Lo mismo ocurrió con los datos del PMI de mayo, el de servicios (53,5) y el manufacturero (57,5), ubicándose ambos por debajo de sus pronósticos. Sin embargo, las declaraciones de la FED – descartando una recesión para la economía norteamericana de cara a los próximos meses – evitaron que los mercados se vean afectados fuertemente por estos resultados.
Datos de consumo mixtos. El índice de confianza del consumidor de la Universidad de Michigan no logró repuntar, al resultar en 58,4 puntos, debajo de las expectativas (59,1) y del mes previo (65,2). Además, se observó una caída en el dato de ingresos personales. Sin embargo, a pesar de que el dato de abril terminó en 0,4% m/m – vs las expectativas de 0,5% m/m y el dato de marzo de 0,5% m/m –, la gran sorpresa fue el dato de gasto personal, que resultó en 0,9% m/m y, a pesar de que no alcanzó el dato de marzo (1,4 m/m), superó ampliamente el pronóstico de 0,7% m/m. A esto se le sumó que el PCE, dato que utiliza la FED como termómetro de los precios del consumo, retrocedió fuertemente, llegando 0,2% m/m – vs 0,9% m/m el mes previo –. A pesar de que el dato de marzo se había visto afectado por la suba en el precio del petróleo, estos resultados fueron vistos con buenos ojos, dada la preocupación que existía respecto a la caída en el consumo. La sorpresa de este dato llevó calma a los mercados de renta variable, que tuvieron su mayor entrada de flujos de capital de las últimas 10 semanas.
Retroceden los rendimientos. Las tasas de los bonos del Tesoro volvieron a retroceder la semana pasada hasta ubicarse en 2,74%, experimentando una baja de 10 pb, luego de ver en aumento su demanda. Por su parte, el tramo corto de la curva también retrocedió, en este caso 2 pb hasta 2,49%, lo que acentúa aún más la lateralización de los rendimientos. Los bonos emergentes, los de mayor calidad y los de alto rendimiento tuvieron subas en sus precios, avanzando 2,3%, 2,6% y 4,9% respectivamente.
Wall Street tuvo su mejor semana desde noviembre de 2020. El contexto optimista impulsó la compra de activos a lo largo de la última semana, lo que llevó a que los tres principales índices norteamericanos terminaran su mejor semana del año: mientras el Nasdaq avanzó un 7,1%, el Dow Jones y el S&P lo hicieron 6,3% y 6,6% respectivamente. Esto ocurrió luego de siete semanas a la baja, la mayor cantidad de semanas bajistas consecutivas de las últimas dos décadas. Todos los sectores se vieron beneficiados por el escenario y culminaron al alza, con el de consumo discrecional y el energético marcando las mayores subas: 9,5% y 8,3%, respectivamente. A pesar de esto, solo el sector energético y el de utilidades marcan rendimientos positivos en lo que va del año, con avances respectivos de 59,5% y 5,3%.
Semana positiva para el mundo. El índice MSCI All World registró una suba de 5,2% la semana previa, donde mientras los países emergentes avanzaron un 2,2%, Latam se destacó al hacerlo 6,2%. Todos los países de esta región marcaron una semana en verde, con Chile (9,4%) y Brasil (6,2%) mostrando las principales subas de la zona.
La última licitación de mayo no logró renovar la totalidad de los vencimientos, lo que en conjunto con la baja acumulación de divisas por parte del BCRA, pone cada vez más en duda el cumplimiento de las metas establecidas por el FMI para el 2T22. Ante este contexto, los activos indexados a la inflación de corto plazo continúan destacándose, pese a que los ganadores de la semana fueron los bonos soberanos.
El Tesoro, con lo justo. La última licitación del mes dejó un sabor amargo ya que, mientras en la primera vuelta no logró renovar el 100% de los vencimientos, en esta segunda logró una absorción total de $156 MM sobre los $166 MM a vencer. De esta forma, marcó un financiamiento neto del mes de $54,1 MM, logrando así un rollover de 106%, aunque no fue suficiente para alcanzar el ratio de rollover de 125% establecido por el FMI. Nuevamente el principal instrumento demandado fue la Lecer de mayo-23, que explicó el 58% de lo emitido, ofreciendo una tasa de CER +0,06%, mientras que por detrás se ubicó la LEDE de agosto, que representó un 20% de la emisión. Mientras los activos CER explicaron el 64% del financiamiento, continúa preocupando la falta de apetito por instrumentos con ajustes alternativos y a plazos poselecciones. Esta situación lleva a que el Tesoro deba convalidar tasas mayores a las observadas en el mercado secundario. La próxima licitación será el 14 de junio, mes donde se vencen unos $596 MM.
El BCRA no logra conseguir divisas. Pese a la buena liquidación de divisas que viene realizando el agro, el BCRA no consigue acumular dólares en uno de los últimos meses de cosecha gruesa. La semana pasada culminó con un balance de USD 170 M a favor, que se comparan con los USD 231 M que había comprado la semana anterior. En lo que va del mes, la autoridad monetaria logró acuñar un total de USD 938 M. Una de las principales razones por las cuales el BCRA no logra acumular más divisas tiene que ver con los compromisos de pagos vinculados al sector energético, que buscan hacer frente al aumento de la demanda invernal. En esta línea, el último viernes se conoció el balance cambiario del BCRA de abril, donde se pudo ver que tanto la performance de la balanza comercial (cayó 27% a/a en el abril) como la cuenta turismo (-USD 502 M) llevaron a que en el primer cuatrimestre de 2022 el BCRA haya comprado USD 3.500 M menos que en el mismo período del año anterior.
Metas al límite. Por la dinámica que muestran el balance cambiario y la emisión monetaria, pareciera que las metas del acuerdo para el 2T22 quedarían al borde del incumplimiento. Por el lado del balance cambiario, se estima que el BCRA debería comprar un aproximado de USD 2.800 M para cumplir con la meta, un objetivo ambiciosa si consideramos la dinámica cambiaria de los últimos meses. Por el lado financiero, el margen de emisión para cumplir con el acuerdo es de $58.000 M ($438.000 M de meta para el 2T22), ya que lleva emitido en lo que va del año unos $380.500 M, de los cuales $178.500 M corresponden a mayo.
Rebotaron los bonos soberanos. En línea con lo ocurrido en el plano internacional, los bonos en dólares locales mostraron un rebote de 1,9% promedio en la última semana (a excepción del GD38, que cayó 1,2%). Como es habitual, los bonos ley global tuvieron una mejor performance que sus pares ley local (+2,6% vs +1,2%). Como resultado de lo mencionado, el riesgo país cayó 1,9%, para ubicarse en las 1.908 unidades.
Bonos en pesos con leves mejores. La curva de bonos en pesos cerró la semana levemente en positivo. Dentro del segmento CER, los cierres semanales se ubicaron en torno al 0,6%, con el DICP a la cabeza (+2,4%). Los bonos en cuestión recuperaron su demanda luego de conocerse que la oferta en la última licitación era reducida. El otro segmento que también logró cerrar levemente al alza fue el de bonos tasa fija y Badlar (+0,3%), aunque la dinámica dentro de esta curva fue dispar. El cierre de los bonos dollar linked también fue mixto, ya que cayeron el T2V2 (-0,2%) y TV23 (-0,8%), mientras que avanzó el TV24 (+1,2%).
MEP y CCL avanzan en el mes. La incertidumbre y el volumen de la deuda indexada se suma al flojo balance cambiario mensual, para que los tipos de cambios financieros (MEP y CCL) avancen un 2,5% en lo que va del mes, pese a haber subido un 0,5% en la semana. Así, el dólar MEP se ubica en $210,35 y el CCL en $212,84, ambos medidos con GD30. El canje también avanza, en este caso 0,7%, y ya cotiza en 1,2%. En este sentido, la brecha respecto al oficial se mantiene en 76%.
A pesar del feriado de hoy (lunes) en EE.UU, los inversores continuarán expectantes ante las declaraciones de distintos miembros de la FED. Además, la mira estará puesta en los distintos datos a publicarse esta semana, que podrían volver a generar volatilidad. Entre estos, se destaca el informe de empleo de EE.UU, que se dará a conocer el próximo viernes, y donde se pronostica una tasa de desempleo de 3,5% – vs 3,6% en abril –. Se trata de uno de los principales resultados que mira la FED para establecer su política monetaria, por lo que un dato que difiera fuertemente de las estimaciones podría afectar a los mercados bursátiles.
A su vez, se realizará una nueva reunión mensual de la OPEP. No se espera que la entidad establezca alguna modificación en su producción, aunque los mercados estarán atentos a las declaraciones de la entidad ante la suba que está volviendo a marcar el crudo.
Hoy (lunes) tendrá lugar la segunda vuelta de la licitación iniciada la semana previa, por lo que se espera que el gobierno alcance el 100% del rollover de mayo.
Adicionalmente, el foco del mercado local seguirá puesto en la compra de divisas del BCRA y en el cumplimiento de las metas del FMI, que lucen cada vez más inalcanzables.
En cuanto a los datos económicos, el miércoles se publicará la recaudación del mes de mayo, que se estima superior al dato de abril, que resultó en $1.341,6 MM. A su vez, el día viernes se publicará el informe de Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) del mes de mayo.