Noticias locales: el país hoy.
En el mercado cambiario, el BCRA registró ventas netas por USD 21 M en el MULC. En lo que va de noviembre, la autoridad monetaria adiciona compras por USD 405 M; en tanto, en 2023 acumula ventas por USD 1.575 M. Por otro lado, el stock de reservas internacionales se redujo en USD 6 M hasta los USD 21.533 M. Con esta información, las reservas acumulan una caída de USD 23.065 M en 2023.
El dólar oficial aumentó diariamente un 0,1% hasta $359,5. Esto significa un ritmo de devaluación mensualizado de 4,3%, que mantuvo el del lunes. En los últimos cinco días hábiles, la devaluación corrió a una TEM de 4,3%, mientras que en lo que va de noviembre corrió a TEM 2,8%.
Los dólares financieros operaron bajistas. Dentro de las cotizaciones libres, el MEP con ledes cayó 3,5% hasta alcanzar los $858, mientras que el CCL con ADRs disminuyó 6,2% hasta $853. De esta manera, sus brechas se sitúan en 139% y 137% respectivamente. Dentro de las cotizaciones intervenidas, el MEP con AL30 perdió 6,1% y quedó en $861 (brecha del 140%), y el CCL ganó 0,2% hasta los $863 (brecha del 140%).
Las curvas soberanas en pesos tuvieron una rueda negativa. Los bonos CER cedieron un 0,3%, mientras que las Lecer perdieron un 1,3%. En la curva de tasa fija, el TO26 cerró bajista en 5,6%. Por su parte, los duales registraron una pérdida de 1,4% y los DLK marcaron una caída de 3,0%.
Nuestro índice de bonos soberanos en hard-dollar perdió 0,8%, explicado por una caída de 0,5% en los de ley Nueva York y de 1,3% en los de ley Argentina. Así, acumulan una ganancia de 26,8% en lo que va del mes y de 32,4% en lo que va del año. De esta manera, las paridades promedian el 34,4% y el riesgo país aumentó 49 pb hasta los 2054 pb.
En el mercado de renta variable, el Merval continuó su caída por segunda jornada consecutiva, en medio del viaje a EE. UU. del presidente electo Javier Milei. De esta manera, retrocedió un -8,3% en moneda local, aunque aumentó un 1,6% en CCL Galicia, alcanzando un valor de USD 901. Se han registrado bajas generalizadas, destacándose Telecom Argentina con un -13,1%, Grupo Financiero Galicia con un -10,1% y Banco Macro con un -9,8%. Los sectores más afectados han sido Comunicaciones con un -9,5%, Financieros -8,8% y Materiales -8,5%. Los ADR registraron una disminución promedio del -3%, destacándose Telecom Argentina con un -6,8%, BBVA -9,1% y Edenor -5,2%. Desde las elecciones generales hasta la fecha, el índice acumuló un aumento del 13,9%, y durante el transcurso de 2023, muestra un crecimiento del 49,4% medido en USD CCL.
Noticias globales: el mundo hoy.
Con el final de noviembre aproximándose, las acciones tuvieron un cierre al alza tras una jornada de negociación relativamente tranquila este martes. En un ambiente de cautela, los inversores evaluaron diversas señales para determinar si el sólido desempeño observado durante el mes se mantendría. El optimismo en el mercado surge a raíz de la expectativa de que la Fed podría detener el incremento en las tasas de interés. Sin embargo, esta percepción se ve desafiada por las opiniones divergentes dentro del propio banco central.
En dos discursos separados, Michelle Bowman y Christopher Waller, miembros de la Fed, expusieron el martes visiones contrastantes sobre la necesidad de aumentar las tasas. Mientras algunos inversores interpretan estos comentarios como una señal de una posible pausa en la política de endurecimiento monetario, otros permanecen cautelosos ante la incertidumbre sobre la dirección futura de la política de tasas de interés.
En este contexto, el Dow Jones registró un incremento del 0,3%, mientras que el Nasdaq y el S&P 500 tuvieron ascensos del 0,1% cada uno. Los sectores más beneficiados fueron Real Estate (0,6%), Consumo Discrecional (0,5%) al igual que Utilidades. Por el contrario, Salud (-0,4%) y Tecnología (-0,1%) fueron los más perjudicados. Las acciones destacadas fueron Tesla (4,5%), Meta (1,2%) y Apple (0,3%), mientras que Nvidia cedió (-0,8%).
Además, el índice nacional de precios de viviendas S&P Case-Shiller en EE. UU. aumentó un 0,7% m/m hasta alcanzar un máximo histórico de 311,18 puntos en septiembre. Fue el octavo mes consecutivo de ganancias, ya que una relativa escasez de inventario para la venta ha estado respaldando los precios a pesar de las altas tasas hipotecarias. En términos interanuales, los precios subieron un 3,9%, en comparación con un aumento del 2,5% en agosto.
Respecto a los datos macro, los nuevos datos publicados por el Conference Board mostraron que la confianza del consumidor aumentó en noviembre. El índice general saltó a 102 en noviembre, frente al 99,1 revisado a la baja en octubre. Sin embargo, a pesar de la mejora, el índice de expectativas se mantuvo por debajo de 80 por tercer mes consecutivo, un nivel que históricamente indica una recesión dentro del próximo año.
El índice del dólar cayó a 102,7, el nivel más bajo en 15 semanas, y está en camino de terminar el mes de noviembre con una caída de alrededor del 3%, ya que los recientes discursos de la Fed reforzaron las apuestas de que han terminado de aumentar las tasas de interés y podrían comenzar a recortarlas a continuación. Los rendimientos de los bonos del Tesoro cerraron en forma negativa. La UST2Y retrocedió 15 pb, cerrando en 4,74%, mientras que la UST10Y cayó 5 pb y terminó en 4,33%. Esto generó una leve suba de los índices de renta fija del 0,4%.
Para los commodities, la soja avanzó 1,2% alcanzando los USD 494 por tonelada en el mercado de Chicago, mientras que el oro ganó 1,2%, situándose en USD 2.041 por onza. Por último, el WTI subió 1,2% para alcanzar USD 76,4 por barril. Las existencias de petróleo crudo en EE. UU. cayeron 0,81 M de barriles en la semana que finalizó el 24 de noviembre, tras un aumento de 9,1 M de barriles en la semana anterior, según mostraron los datos del Boletín Estadístico Semanal de API. Fue la primera semana de caída en los inventarios de petróleo crudo desde la tercera semana de octubre, en comparación con las expectativas del mercado de una disminución de 2 M de barriles.
Noticias globales: el mundo hoy.
El índice del dólar experimentó un descenso, alcanzando los 103,2, su nivel más bajo en tres meses. Este movimiento refleja la creciente convicción de los inversores de que la Reserva Federal ha finalizado su ciclo de incremento de tasas de interés y podría estar preparándose para implementar varios recortes durante el próximo año, a pesar de la naturaleza mixta de los datos económicos recientes. Este panorama se da en un contexto donde los Índices de Gerentes de Compras (PMI) globales de S&P revelaron una caída mayor a la esperada en el sector manufacturero, mientras que el sector de servicios mostró un crecimiento más acelerado de lo anticipado.
Contrastando con la debilidad del dólar, el precio del oro se fortaleció 0,58% en la jornada, alcanzando los USD 2.013 por onza. Este aumento llevó al metal a sus niveles más altos en más de seis meses, consolidando una ganancia en noviembre de aproximadamente 1,8%. El oro, a menudo visto como un activo refugio, se benefició de la depreciación del dólar, en un contexto donde los operadores especulan que las tasas de interés en Estados Unidos han llegado a su máximo.
En el mercado inmobiliario de EE. UU., las ventas de casas unifamiliares nuevas registraron una caída notable, descendiendo un 5,6% m/m para llegar a un total de 679.000 unidades en octubre. Esta cifra se sitúa considerablemente por debajo de las expectativas, que apuntaban a unas 723.000 ventas. Uno de los principales factores detrás de este descenso es el aumento en las tasas hipotecarias, que han alcanzado su nivel más alto en dos décadas, afectando directamente la capacidad de compra de los potenciales compradores. En cuanto a los precios, el valor de venta promedio se situó en USD 487.000, una disminución significativa en comparación con los USD 543.300 registrados hace un año. Al finalizar octubre, el mercado cuenta con una oferta de abastecimiento de aproximadamente 7,8 meses al ritmo actual de ventas.
Referido a indicadores macro, la actividad manufacturera en Texas experimentó una notable contracción en noviembre, de acuerdo con el informe del Banco de la Reserva Federal de Dallas. El índice de actividad empresarial general descendió a -19,9, marcando su punto más bajo desde julio. Por otra parte, el índice de producción se redujo a -7,2. Además, se observaron caídas en los índices de nuevos pedidos y de utilización de la capacidad. A pesar de una desaceleración en el crecimiento del empleo y una reducción en las horas de trabajo, se normalizó el crecimiento salarial y los costos de materiales se mantuvieron contenidos. Las perspectivas futuras para la manufactura en la región continúan siendo mixtas, lo que refleja la persistente incertidumbre en el sector.
Las acciones en EE. UU. terminaron en números rojos el lunes cuando los inversores regresaron de sus vacaciones a la espera de publicaciones económicas claves programadas para la semana, incluida la medida de inflación preferida de la Reserva Federal, el PCE. El Dow Jones perdió 0,14% y el S&P 500 cerró con una caída del 0,18%, mientras que el Nasdaq cedió 0,1%. Los sectores de energía (0,3%), Salud (0,6%) al igual que comunicaciones estuvieron entre los sectores con peor desempeño. Eli Lilly cayó un 1,5% y Exxon 0,6%. Entre las tecnológicas, Nvidia ganó 1% y Microsoft (+0,3%) experimentaron un movimiento positivo, mientras que Amazon añadió un 0,7% cuando comenzaron las ventas del Cyber Monday. Los minoristas estadounidenses señalaron un debilitamiento del gasto de los consumidores, a pesar de un aumento del 7,5% en el gasto en comercio electrónico en el Black Friday en comparación con el año anterior.
El rendimiento del bono del Tesoro estadounidense a 10 años cayó 9 pb a casi el 4,39% después de que las recientes subastas del Tesoro estadounidense mostraran una fuerte demanda y los inversores están aceptando que los recortes de las tasas de interés se producirán pronto a pesar de los datos económicos mixtos. Además, la tasa a 2 años retrocedió 7 pb y cotiza en 4,89%.
Por último, los precios del petróleo disminuyeron el lunes, influenciados por el anuncio de Qatar de una extensión de dos días en la tregua temporal entre Israel y Hamás. El WTI retrocedió 0,9% y cotiza en USD 74,9 por barril. La atención del mercado se centra ahora en la OPEP+, especialmente en los posibles desacuerdos sobre los recortes de producción y el papel de Arabia Saudita en las decisiones del grupo.
Noticias locales: el país hoy.
En el mercado cambiario, el sector agropecuario liquidó USD 30 M. Mientras, el BCRA registró ventas netas por USD 7 M en el MULC. En lo que va de noviembre, la autoridad monetaria adiciona compras por USD 426 M; en tanto en el 2023 acumula ventas por USD 1.554 M. Por otro lado, el stock de reservas internacionales se redujo en USD 22 M hasta los USD 21.539 M. Con esta información, las reservas acumulan una caída de USD 23.059 M en 2023.
El dólar oficial aumentó diariamente un 0,4% hasta $359. Esto significa un ritmo de devaluación mensualizado de 4,3%, que se desaceleró contra el ritmo de 4,4% del viernes. En los últimos cinco días hábiles, la devaluación corrió a una TEM de 4,3%, mientras que en lo que va de noviembre, corrió a TEM 2,8%.
Los dólares financieros operaron fuertemente a la baja. Dentro de las cotizaciones libres, el MEP con ledes cayó 6,2% hasta alcanzar los $890, mientras que el CCL con ADRs disminuyó 10,0% hasta $909. De esta manera, sus brechas se sitúan en 148% y 153%, respectivamente. Dentro de las cotizaciones intervenidas, el MEP con AL30 perdió 5,3% y quedó en $917 (brecha del 156%) y el CCL lo hizo en 11,2% hasta los $861 (brecha del 140%).
Durante la jornada de ayer, los contratos de futuro de dólar subieron un 1,9%. Las mayores subas se registraron en los contratos de marzo (+3,8%), mayo (+3,1%) y abril (+2,6%). Mientras que, la única caída fue en el contrato de diciembre (-0,1%). De este modo, la devaluación implícita se ubica en el 0% hasta noviembre, en el 123% hasta diciembre y en el 241% hasta abril del 2024. Se operaron 374.000 contratos, lo que significa un acumulado semanal de 1.916.000. El interés abierto se incrementó en USD 46 M hasta un stock de USD 3.932 M; lo que significa un decrecimiento mensual de 24,2% y un decrecimiento anual de 3,0%.
Las curvas soberanas en pesos tuvieron una rueda positiva. Los bonos CER se incrementaron un 3,9%, mientras que las Lecer ganaron un 0,3%. En la curva de tasa fija, el TO26 cerró alcista en 7%. Por su parte, los duales registraron una ganancia de 2,6% y los DLK marcaron una suba de 2,8%.
Nuestro índice de bonos soberanos en hard-dollar perdió 0,8%, explicado por una caída de 1,1% en los ley Nueva York y una de 0,3% en los ley Argentina. Así, acumulan una ganancia de 27,8% en lo que va del mes y de 33,4% en lo que va del año. Las paridades promedian el 34,7% y el riesgo país aumentó 45 pb hasta los 2.005 pb.
Después de un marcado rally alcista posterior al balotaje, el Merval cayó 8,1% en moneda local y 4,1% en CCL Galicia, cerrando en un valor de USD 887. Se observaron descensos en la mayoría de las acciones, siendo Cresud (-19,8%), Edenor (-18,9%) y Transportadora de Gas del Sur (-18%) las más afectadas. Los sectores más perjudicados fueron Materiales, con una baja del 11,3%, Consumo Discrecional, que descendió un 11,2%, y Energía, con una reducción del 10,3%. Por otro lado, los ADR mostraron un incremento promedio del 5% tras la visita de Javier Milei a EE. UU., destacándose Telecom Argentina con un alza del 11%, IRSA con 11,6% y Banco Galicia con 9,8%. Desde las elecciones generales hasta la fecha, el índice acumuló un aumento del 12,1% y, durante el transcurso de 2023, muestra un crecimiento del 47% medido en USD CCL.
En la primera semana tras la victoria de Milei, los contratos volaron y subieron 25,2% promedio...
En la primera semana tras la victoria de Javier Milei, los contratos volaron y subieron 25,2% promedio. El mercado pricea una agresiva devaluación inicial apuntando a una unificación cambiaria. Los precios no necesariamente reflejan la intención del presidente electo, que afirmó que pretende mantener el cepo inicialmente. Durante esta semana estaremos atentos a: nuevas definiciones sobre política económica, su equipo económico y en las negociaciones alrededor de la transición presidencial.
Las principales subas se dieron en los contratos de julio (+35,3%), agosto (+38,9%) y septiembre (+37,5%). En tanto que la única caída se dio en noviembre (-2,7%).
El contrato de noviembre cerró en $360, un ritmo mensualizado de crawling peg de 3,4% hasta fin de mes algo por debajo del 4,1% al que viene corriendo el A3500. Mientras, diciembre cerró en $800 y descuenta un fuerte ajuste cambiario de 122% contra noviembre. A partir de ahí, los contratos marcan una devaluación mensual del 15% en enero, de 9% promedio entre febrero y mayo; de 8% entre junio y septiembre.
La curva de tasas (TNA) se amplió en 18.591pb. El contrato de noviembre rinde TNA 40%. En diciembre tiene un salto discreto a TNA 1221%, donde la curva alcanza su máximo. Luego, a partir de enero (TNA 841%) se reduce gradualmente hasta alcanzar su nivel más bajo en septiembre (TNA 454%).
El volumen operado fue relativamente alto en la cuarta semana del mes: se comerciaron 4,1 millones de contratos. El viernes 24 de noviembre el interés abierto cerró en USD 3.886 M; una caída de 26% m/m y de 3% i.a.
Noticias y mercado: lo que pasó y lo que viene en el plano local.
El triunfo de Javier Milei en el balotaje le dio un fuerte impulso a los activos locales. Sus primeras declaraciones, llamando a resolver los desequilibrios macroeconómicos lo más rápido posible, y la probable conformación de un gabinete moderado, fueron una inyección de ánimo para los inversores. Los bonos soberanos y el Merval tuvieron una excelente semana, al anotar subas de más de 20%. Ante la expectativa de una corrección cambiaria más agresiva, reapareció con mucha fuerza la demanda por cobertura de tipo de cambio, lo que impulsó a los dólares financieros, a los contratos futuros y a los bonos ajustables al dólar oficial. Mientras se define la transición, las reservas internacionales se mantuvieron estables, al tiempo que la inflación vuelve a tomar impulso ante la expectativa del ajuste cambiario y el descongelamiento de precios regulados. Más allá de esta coyuntura y de la reacción favorable del mercado, aún nada está definido y durante el fin de semana no hubo definiciones concretas sobre quién conducirá el ministerio de economía y el BCRA, lo que deja incertidumbre sobre cómo será el plan económico a partir del 10 de diciembre. Así las cosas, las miradas de esta semana estarán en la dinámica del mercado de cambios, de la inflación y en las definiciones del futuro gabinete.
Conteniendo las reservas internacionales. La transición ha comenzado y la contribución del gobierno saliente es la de contener las reservas internacionales, un poco tarde considerando que en lo que va de 2023 cayeron más de USD 22.000 M. Fiel a su costumbre, lo hizo con más control de cambios, limitando la venta de divisas a los importadores y seduciendo a exportadores con un tipo de cambio diferencial. Ahora, con la posibilidad de liquidar el 50% en el mercado oficial y 50% en el CCL, lo que implica un tipo de cambio de $670, aunque hasta ahora con muy poco efecto. Concretamente, en la última semana el BCRA compró apenas USD 4 M, con ventas en el margen, y las reservas internacionales subieron en USD 56 M, cerrando la semana con un stock bruto de USD 21.561 M, mientras que las netas quedaron en USD 10.500 M negativas.
Se disparó la brecha cambiaria. Con la modificación del tipo de cambio para exportadores, permitiendo la liquidación del 50% en el CCL, el BCRA ajustó el tipo de cambio oficial –el A3500– a un ritmo de 4,3% mensual. De mantener este ritmo, terminaría noviembre en $361, en línea con lo que marca el contrato de dólar futuro de dicho mes. Por otro lado, los dólares financieros, ante la expectativa de un ajuste cambiario más agresivo en diciembre, marcaron fuertes alzas. Durante la semana, llegaron a romper el techo de los $1000. El MEP “libre” registró un aumento de 10,2% en la semana y cerró en $949, mientras que el CCL trepó un 15,9% hasta $1011. Como resultado, las brechas con el dólar oficial se ampliaron a 165% y 183% respectivamente, muy cerca de las que tuvieron posPASO, que habían marcado un máximo de 177% y 196%. En la misma línea, se dispararon las expectativas de devaluación, y los futuros de dólar en ROFEX a partir de diciembre en adelante se incrementaron en 28,0% promedio. El contrato de diciembre aumentó 20,0% y cerró en $800, lo cual implica un salto del 122% contra noviembre, mientras que el resto de los contratos señalan una devaluación promedio más atenuada de 9,1% m/m promedio hasta septiembre de 2024.
Fuerte suba de los dollar-linked y duales. Fue una muy buena semana para los bonos en pesos. En línea con los futuros y los dólares financieros, se observó una alta demanda por los segmentos atados al dólar oficial, lo que generó un salto del 25% en los bonos dollar-linked y los duales. Los instrumentos a 2024 operan en un rango de Tasa Interna de Retorno (TIR) de entre -84% a principios de 2024 y -25% a principios de 2025. Aunque algo rezagados, los instrumentos CER también registraron un buen desempeño, con subas del 10%, y las letras, del 7,2%. Sus tasas reales para 2024 operan entre TIRs de CER -9,6% a febrero de 2024 y de CER +2,5% a febrero de 2025. En cuanto a la tasa fija, a pesar de las expectativas devaluatorias, el TO26 subió un 16,9% y ofrece una Tasa Nominal Anual (TNA) del 100%.
Fuerte caída del riesgo país. El índice de bonos soberanos tuvo una excelente performance semanal, marcando un alza del 23%. El rally fue mayor en los bonos regidos por la ley argentina, que aumentaron un 30%, mientras que los bonos bajo ley de Nueva York subieron un 19%. Así, las paridades se elevaron al 35%, acercándose a su máximo de agosto, cuando habían llegado al 37%. Consecuentemente, el riesgo país perforó los 2.000 pb y cerró en 1.960 pb. A pesar de esta mejora, estos precios siguen descontando una reestructuración con importantes quitas. El buen ánimo también se contagió a los bonos provinciales y corporativos argentinos, que registraron alzas del 2,7% y 1,9% respectivamente. Dentro de la curva sub-soberana, destacó el bono de la provincia de Buenos Aires al 2037 con un incremento del 9,7%. Entre las obligaciones negociables, lideró la curva el bono de YPF, con un incremento promedio del 3,7%.
De leliqs a pases. Durante la semana, Milei declaró que no podrá levantar el cepo cambiario hasta resolver “el problema de las leliqs”, y mencionó que se está evaluando un programa de canje voluntario. Anticipándose a esto, los bancos –particularmente los privados– no renovaron sus tenencias y el stock de letras del BCRA cayó en $3,3 billones, llegando a $10,7 billones. La mayoría de estos pesos se destinaron a pases, que experimentaron un incremento de $3,2 billones, alcanzando los $13,2 billones. Con los bancos acortando sus posiciones, la tasa de caución a un día experimentó una caída de 24 puntos, llegando a 85% de Tasa Nominal Anual (TNA), el nivel más bajo desde principios de agosto.
Rally del Merval. La renta variable argentina cerró una semana excepcionalmente positiva, registrando un volumen de operaciones récord desde 2020 y el mejor día para el mercado desde 2001. El Merval avanzó un 42,9% en pesos y un 26,4% en CCL Galicia, alcanzando los USD 916. Los sectores más destacados fueron el Financiero, con un avance del 38,2%, Materiales con un 19,9%, y Construcción con un 19,7%. Entre las acciones que más avanzaron se encuentran YPF, con un 78,1%, Edenor, con un 75,1%, y Telecom, con un 69%. Los ADR también experimentaron un rally, con subas promedio del 25%, liderados por YPF con un 56%, Supervielle con un 47%, y Telecom con un 44%. En un contexto más amplio, el índice Merval mostró un aumento del 20% en dólares desde las elecciones generales y acumula una ganancia del 51% en lo que va del año.
La inflación toma envión. El salto en los dólares financieros y los ajustes de precios que se dieron luego del balotaje nos confirman que en noviembre la inflación se aceleró, dejando un piso más alto para la inflación de diciembre, que podría ser récord ante el ajuste del tipo de cambio oficial. De acuerdo al indicador del Ministerio de Economía, en la semana previa a las elecciones, los precios subieron un 2,3%. De mantenerse este ritmo semanal –aunque estimamos que hubo un fuerte aumento– la proyección del MECON indicaría un 10,6% m/m para noviembre. Con estos datos, mantenemos nuestra estimación de una inflación del 11% para noviembre.
Esperando definiciones del gabinete y el plan económico. La semana pasada, el mercado reaccionó favorablemente a los nombres mencionados para ocupar cargos en el Ministerio de Economía y en el BCRA. Esto se debe especialmente a que quedaron descartadas las visiones más extremas –el impulsor de la dolarización declinó ocupar el cargo– y a la inclusión de nombres del gobierno de Macri, como Caputo, lo cual transmite un mensaje de moderación y pragmatismo. Este último, principal candidato a ocupar el cargo de Ministro de Economía, plantea realizar un canje a bancos de leliqs por bonos del Tesoro, lo cual, aunque es básicamente un asiento contable, tiene la virtud de alargar la duración y la debilidad de aumentar la deuda del Tesoro a tasas más altas. La otra cara de la moneda es la falta de un equipo definido, lo que puede generar incertidumbre debido a la falta de consenso en el propio gobierno de Milei. Incluso aún no hay definiciones concretas en cuanto al gabinete, y podrían surgir más sorpresas que afecten el buen ánimo mostrado hasta ahora por los inversores. Está claro que no puede haber optimismo si no se presenta un plan fiscal concreto.
Noticias y mercado: lo que pasó y lo que viene en el plano internacional.
Los mercados financieros globales tuvieron otra buena semana, y noviembre se perfila a ser el mejor mes del año con fuertes subas en bonos y acciones. Las minutas de la última reunión de la Fed mostraron que, si bien decidieron dejar la tasa de referencia sin cambios y que probablemente no realicen más ajustes, siguen preocupados por la dinámica de la inflación; por lo que no tienen previsto recortes de tasas. Esto frenó la caída en los rendimientos de los bonos del Tesoro Americano, que tuvieron una semana levemente alcista, lo que le quitó impulso a la renta fija. Las acciones siguieron con su rally alcista en todos los sectores y regiones, permitiéndoles recuperar todo lo perdido entre julio y octubre, llegando al nivel más alto del año. En el mercado de commodities, la suba de inventarios en EE. UU. y la distensión en el conflicto en Medio Oriente volvieron a presionar a la baja al petróleo, que se diferenció del resto de las materias primas que tuvieron un comportamiento estable. Las miradas de esta semana estarán en la segunda revisión del PBI del 3Q23 y en los datos de consumo y de su derivado índice de precios implícito – PCE – correspondientes a octubre, que darán una mejor pista de cómo arrancó el 4Q23.
Sin novedades en el frente. Al ser una semana corta por los feriados, no hubo indicadores que puedan cambiar nuestra lectura de la coyuntura económica americana. Seguimos notando que la actividad continúa creciendo por encima de lo esperado, con una buena dinámica del mercado laboral y con la inflación en servicios impidiendo una convergencia más rápida al objetivo de la Fed. Si bien las expectativas de los consumidores continuaron cayendo –se publicó el Índice de Confianza del Consumidor de la Universidad de Michigan, que mostró la cuarta caída consecutiva debido al mayor pesimismo sobre la situación actual, con un repunte de la inflación esperada–, no se espera que se frene la buena performance económica. Las peticiones semanales por desempleo, que habían aumentado en las dos semanas previas, volvieron a retroceder, marcando el buen momento del mercado laboral. Además, la primera estimación del PMI Compuesto quedó en 50,7, reflejo de que la actividad privada sigue creciendo. Con todo esto, las estimaciones del PBI del 4Q23 del nowcast de Atlanta apuntan a un crecimiento de 2,1% t/t anualizado que, de cumplirse, marcaría una expansión de la actividad en todo el año de 2,5%, superando todas las expectativas.
La Fed se mantiene prudente. La semana pasada se publicaron las minutas de la última reunión de la Fed, en la que recordemos dejó la tasa de referencia en 5,5%. Estas marcaron que, si bien los directores destacan la baja de la inflación, aún ven riesgos al alza. Por lo tanto, Powell remarcó que no ven condiciones para bajar la tasa de interés hasta no asegurarse de que la dinámica de precios converja al objetivo de 2% i.a. Esto moderó las expectativas de los analistas que esperan que en mayo de 2024 comience a recortar la tasa: ahora, la probabilidad de que la baje a 5,25% cayó a 40%, desde 60% la semana pasada. Además, la Fed también mostró preocupación por los efectos en la hoja de balance de la suba de tasas, por lo que podrían volver a poner el foco en el quantitative tightening, como en 2017.
Tasas estables, dólar debilitado y petróleo en baja. Luego de tres semanas en retroceso, ante las declaraciones de la Fed y la menor probabilidad de baja de tasas, los rendimientos de los bonos del Tesoro Americano tuvieron un leve repunte. La UST2Y cerró en 4,95%, versus 4,91% de la semana anterior, y la UST10Y pasó de 4,445 a 4,47%, por lo que el spread entre ambas se mantuvo negativo en 48 pb. A pesar de esto, el dólar continuó perdiendo terreno frente a las principales monedas: el DXY cayó 0,5% en la semana, destacándose la caída semanal de 0,9% frente al Yuan, alcanzando el nivel más bajo de los últimos cuatro meses, y acumulando en noviembre una pérdida de 3,1%, ubicándose en el nivel más bajo desde julio. En cuanto al mercado de commodities, el precio del petróleo continuó con la tendencia de las dos semanas previas al anotar una caída de 1,7%, extendiendo a 10% la caída en lo que va del mes, mientras que el oro ganó 1% para superar los USD 2.000 la onza y la soja retrocedió 0,7%, tocando los USD 489 la tonelada.
Mercados en alza. Los mercados tuvieron una semana positiva, nuevamente liderados por la renta variable, mientras que los bonos tuvieron un comportamiento más estable. En cuanto a las acciones, el S&P 500 subió 1%, con todos los sectores anotando ganancias –esta semana se destacó el sector de salud, que ganó 2,2%– acumulando en el mes una ganancia de 8,9%, por lo que se encamina a ser el mejor mes del año. Es importante destacar que, a diferencia de los primeros 10 meses del año, la buena performance fue generalizada, y ello se refleja en el S&P 500 equiponderado que en la semana anotó un alza de 1,0% y 8,2% en lo que va del mes. La diferencia se nota en el acumulado del año, dado que el índice general subió 19,1%, mientras este lo hizo al 6,8%. También fue buena la performance de la renta variable global, excluyendo EE. UU., que en la semana ganó 0,9% –impulsada por Europa y China–, acumulando en el mes un incremento de 8,4%, entre los que se destaca Brasil con una suba de 13%, siendo la bolsa de mejor desempeño del año con una ganancia del 21%. En cuanto a la renta fija, las declaraciones de la Fed afectaron a los bonos del sector público americano que tuvieron una baja de 0,1% –en el mes ganan 3,1%–, aunque esto no detuvo la buena performance de los corporativos y emergentes que subieron 0,3% y 0,9% respectivamente, acumulando en el mes subas de entre 3,35 y 5,6% respectivamente.
Mirando el consumo y los precios. Las miradas de esta semana estarán en la segunda revisión del PBI del 3Q23, recordando que la primera marcó un alza de 4,9% t/t, muy por encima del 2% del primer semestre, y más importante aún, en el informe de ingresos y gastos del consumidor correspondientes a octubre. En cuanto a esto último, lo destacado pasará por la dinámica del consumo –el indicador de ventas minoristas conocido la semana pasada adelantó cierto estancamiento– y por la tasa de ahorro de las familias, dado que se ubica muy por debajo de la media histórica. Como resultado de lo anterior, lo más importante será el Índice de Precios Implícitos –PCE–, medida de precios de referencia de la Fed.
Análisis de las herramientas que tiene el presidente electo para lograr la gobernabilidad.
Aunque la mayoría de las encuestas previas a la segunda vuelta del 19 de noviembre daban ganador a Javier Milei, hasta el último momento pocos creían que pudiera derrotar a Sergio Massa. Sin embargo, una victoria de Massa desafiaba las leyes de la física y, para sorpresa de muchos, las leyes de la física también rigen en Argentina. ¿Qué explica el (para algunos, sorpresivo) triunfo de Milei? Varias razones:
En 45 años, ningún partido gobernante en América Latina ha logrado retener el poder cuando la inflación anual supera el 40% en el mes de la elección y cuando la tasa de inflación mensual se acelera en los meses previos a los comicios.
El mercado financiero ha recibido positivamente el triunfo de Javier Milei en las elecciones del 19 de noviembre. Milei encarna un giro copernicano respecto de la política económica desplegada por el último gobierno kirchnerista. Su constante elogio a las reformas de Menem, a la política económica de Domingo Cavallo en los años 90 del siglo XX y la reivindicación a Mauricio Macri, cuya fallida gestión intentó sin éxito dejar atrás las políticas estatistas del kirchnerismo, hace lógico que entusiasme al mercado.
Dentro del peronismo hoy derrotado, Massa era el candidato más pro-sector privado (no necesariamente pro-mercado) disponible, una suerte de garantía frente a las posiciones más radicalizadas del kirchnerismo. Y aunque, de cara a la estabilización que más temprano que tarde deberá encarar Argentina, Massa podía contar con mejores condiciones políticas, la gran duda que su candidatura planteaba era la credibilidad. Especialmente a la luz de lo que fue su política económica a lo largo de este año, cuyo único objetivo fue garantizar un triunfo electoral, que no llegó.
Si la ventaja de Massa pasaba por la mayor capacidad política para aplicar medidas que involucran un alto costo político y social, la ventaja de Milei pasa por su firme adhesión al libre mercado y a la ortodoxia económica. La principal duda, sin embargo, reside en la gobernabilidad y, pasado el entusiasmo inicial del mercado, disipar esa duda será toda una prioridad para Javier Milei.
La Libertad Avanza cuenta con un 10% y un 15% de las bancas del Senado y la Cámara de Diputados, respectivamente. A ello debe agregarse que no gobierna ni una sola de las 24 provincias de Argentina. Se trata del gobierno más débil en términos legislativos que haya visto Argentina en toda su historia. Incluso si se suman las bancas de los diputados del PRO que responden a Mauricio Macri, Milei no llegaría a contar con un tercio en ninguna de las dos cámaras del Congreso.
La cuestión no es menor. Los primeros meses de Milei en el gobierno estarán signados por medidas drásticas, tal como él mismo anunció en su primer discurso como presidente electo. La tarea que le espera no es sencilla. Debe encarar un plan de estabilización, algo que involucra no solo un ajuste fiscal, sino también la corrección de precios relativos fuertemente distorsionados, lo cual hará que al menos inicialmente la inflación no caiga, sino que más bien suba. Si su plan es exitoso, luego caería drásticamente. Pero a la par de la estabilización, Milei busca implementar reformas estructurales que permitan un fuerte crecimiento económico. Tanto la estabilización como la implementación de reformas requieren de apoyo político y capacidad para lidiar con las organizaciones que administran la protesta callejera, tradicionalmente afines al peronismo.
La gobernabilidad es, por todo ello, la pregunta del millón en este momento. En este sentido, las opciones de Milei, no necesariamente excluyentes entre sí, parecerían ser las siguientes:
Desde ya que la ampliación de la base de sustentación política no excluye ni el recurso al DNU ni tampoco la posibilidad de solicitar una delegación de facultades. De hecho, ambos instrumentos solo serían viables si Milei logra construir mayorías parlamentarias.
Si Milei adopta un estilo de confrontación abierta y busca gobernar en minoría, el entusiasmo del mercado, independientemente de las figuras que integren su equipo económico, será reemplazado por dudas acerca de la gobernabilidad. Si, en cambio, logra ampliar su base de sustentación, sacando partido del verdadero terremoto que su triunfo ha representado tanto para el peronismo como para Juntos por el Cambio, es probable que tenga una mayor tasa de éxitos a la hora de avanzar con su agenda de políticas públicas.
Milei siente una profunda admiración por Carlos Menem y Domingo Cavallo. Las transformaciones que ellos realizaron en los años 90, si bien se basaron en una utilización intensa de los poderes presidenciales y de la delegación de facultades legislativas por parte del Congreso, fueron posibles gracias al apoyo disciplinado de las mayorías peronistas en el Poder Legislativo y a la política de compensación implementada para los potenciales perdedores (y actores de veto) de las reformas. El ejemplo en contrario es el saliente presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, quien, a pesar de ser muy favorable al mercado, no pudo avanzar en su agenda de reformas y debió entregar el poder anticipadamente debido a su debilidad en el Congreso.
En las próximas semanas sabremos qué fórmula de gobernabilidad elige Javier Milei. De ello dependerá que continúe el entusiasmo y la confianza que su triunfo han despertado en los mercados. Pero más importante que la reacción del mercado, de la decisión que tome Milei dependerá la viabilidad de su plan de estabilización y de su agenda de reformas estructurales, así como el grado de éxito de su gestión al frente de Argentina.
Una difícil herencia: distorsiones en precios, desequilibrio cambiario y exceso monetario.
La corrección de las distorsiones de precios relativos y el exceso de pesos mantendrán alta la tasa de inflación durante los próximos meses. Ha acertado el presidente electo en adelantarle a la población que habrá meses duros por delante.
La normalización de la cosecha generará un alivio, pero no es suficiente para normalizar rápidamente el exceso de deuda comercial por las demoras en los pagos de importaciones de bienes y servicios, permitir el giro de dividendos al exterior pendientes de pago, recuperar reservas en el BCRA y atender los pagos de deuda financiera. De allí que sea necesario mantener el cepo por un tiempo, a menos que se consiga financiamiento adicional del resto del mundo.
En el mercado de pesos, la emisión para el Tesoro se suma a otras fuentes de aumento de la oferta monetaria como la compra de divisas para acumular reservas o pagar deuda del gobierno nacional. Si se elimina el déficit fiscal y se aleja la dolarización, el señoreaje podría permitir cubrir las otras dos fuentes de emisión. Eso sentaría las bases para un plan de estabilización que seguramente daría incentivos para que los depositantes en pesos se queden dentro del sistema, reduciendo los problemas que pueden generar las Leliq.
La agenda de desregulación y apertura de la economía es muy importante para dar señales a la inversión productiva de cambio de régimen. Ello requiere pasar de un esquema donde la rentabilidad depende más de los contactos con el gobierno a uno en el cual dependa más de la capacidad de las empresas de innovar y responder mejor a las demandas de los consumidores.
En suma, asegurar la solvencia fiscal y adoptar pasos concretos hacia la eliminación de las trabas anti inversión, como el régimen cambiario actual, son las claves para dar una señal contundente de cambio de régimen.
Análisis de instrumentos de renta fija y variable.
A continuación podrás descargar el informe semanal del mercado local, en el que analizamos los distintos instrumentos de renta fija con posibles escenarios de sensibilidad. Además, mostramos los índices de mercados accionarios locales e internacionales, y finalmente el mercado de renta variable local.
Descargar informe al 24/11/2023
¿Cómo seguir los pasos de este exitoso inversor norteamericano?
Warren Buffett es un legendario inversionista americano, ampliamente aclamado como uno de los más exitosos en Wall Street. Su enfoque y estrategias son considerados un ejemplo a seguir para muchos inversores, y esto lo posicionó como la sexta persona más rica del mundo detrás de empresarios como Elon Musk (Tesla), Jeff Bezos (Amazon) y Bill Gates (Microsoft). Buffett es dueño de Berkshire Hathaway, el mayor fondo de inversión de EE. UU. con un valor de mercado de USD 785 MM y un resultado operativo de USD 10,76 MM en el 3Q23.
La filosofía de inversión de Warren Buffett se enfoca en el Value Investing, una estrategia que implica seleccionar empresas que cotizan por debajo de su valor intrínseco y retener sus acciones a largo plazo. Buffett busca compañías con fundamentos financieros robustos, una gestión confiable y una posición competitiva sólida en el mercado. Además de identificar empresas subvaluadas, prioriza aquellas con ventajas competitivas duraderas. Esta aproximación procura no sólo una recuperación del precio de las acciones, sino también la capacidad de resistir volatilidades y generar retornos sostenibles a lo largo del tiempo. De esta forma, se intenta distinguir entre el precio, que es lo que un inversor paga, y valor, que es lo que realmente recibe.
Aunque las actuales valoraciones de las compañías son altas, ofrecen espacio para una expansión adicional, particularmente en sectores dinámicos como comunicación, consumo discrecional y tecnología. Este último sector se beneficia significativamente de la evolución en inteligencia artificial, la nube y la digitalización.
El reciente ajuste en el portafolio de Warren Buffett para el tercer trimestre de 2023 revela una marcada preferencia por Apple, que constituye la mitad de su cartera. Le siguen Bank of America y American Express, ocupando un 9% y un 7%, respectivamente. En el ámbito del consumo discrecional, Coca-Cola emerge con un 7%. En el sector energético, Chevron y Occidental Petroleum destacan con un 6% y un 5%. La distribución por sectores revela un fuerte énfasis en la tecnología, que representa el 53% del portafolio, seguido por el sector financiero con un 24%, el sector de energía con un 11% y el sector de bienes de consumo con un 9%, entre otros.
En lo que va del año, tanto el portafolio de Buffett como su empresa de inversiones, Berkshire Hathaway, han tenido rendimientos destacables, con aumentos del 23% y del 17%, respectivamente. Estos han superado tanto al S&P 500 como al índice accionario global. También fue notable el rendimiento desde fines de 2020, con aumentos del 41%, habiendo duplicado al índice SPY, un fondo que replica al S&P 500, e igualado al ETF de tecnología (XLK).
La trayectoria de Warren Buffett, reflejada en el buen desempeño de su cartera y de Berkshire Hathaway, reafirma la eficacia del Value Investing. Con rendimientos que superan consistentemente a índices de referencia, Buffett demuestra que una estrategia de inversión fundamentada y a largo plazo genera frutos. Para inversores que buscan emular su estrategia, los CEDEARs ofrecen una vía accesible y diversificada. Estos incluyen opciones como el CEDEAR de Berkshire Hathaway, así como la cartera WB de Cohen, la cual permite capitalizar la solidez y el potencial de crecimiento de empresas selectas, alineadas con los principios de inversión de Buffett.
Análisis de la curva de los bonos del Tesoro americano como indicador de una posible recesión.
La curva de los bonos del Tesoro americano suele ser un buen indicativo de las expectativas que tienen los inversores sobre las perspectivas futuras de la actividad económica, reflejada principalmente en la pendiente de la curva. La curva se invierte cuando el term spread es menor a cero, es decir, cuando las tasas cortas ofrecen un mayor rendimiento que la parte larga. Hay diversas formas de calcularlo, pero la más efectiva suele ser la diferencia entre la tasa que paga el bono del Tesoro a 10 años y la que paga una letra a tres meses. A lo largo de la historia, una curva invertida suele ser un poderoso indicador para predecir recesiones. En el siguiente cuadro, nos propusimos estudiar las últimas inversiones de la curva y evaluar dónde nos encontramos actualmente.
Como conclusión, podemos decir que de los últimos ocho periodos en donde se invirtió la curva de 10 años y tres meses, se materializó una recesión en la economía norteamericana. En las tres variables que estudiamos, actualmente nos encontramos excedidos al promedio histórico, aunque también encontramos casos de mayor magnitud. La pregunta sigue en pie: ¿entrará la economía norteamericana en recesión o conseguiremos el tan buscado soft landing?
Noticias locales: el país hoy.
En el mercado cambiario, el BCRA registró compras netas por USD 25 M en el MULC. En lo que va de noviembre, la autoridad monetaria adiciona compras por USD 460 M; en tanto, en 2023 acumula ventas por USD 1.520 M. Por otro lado, el stock de reservas internacionales aumentó en USD 19 M hasta los USD 21.554 M. Con esta información, las reservas acumulan una caída de USD 23.044 M en 2023.
El dólar oficial aumentó diariamente un 0,1% hasta $356,5. Esto significa un ritmo de devaluación mensualizado de 4,2%, que se desaceleró contra el ritmo de 4,4% del miércoles. En los últimos cinco días hábiles, la devaluación corrió a una TEM de 7,2%, mientras que en lo que va de noviembre corrió a una TEM de 2,5%.
Los dólares financieros nuevamente operaron al alza. Dentro de las cotizaciones libres, el MEP con ledes subió un 1,9% hasta alcanzar los $1.004, mientras que el CCL con ADRs trepó un 6,8% hasta $1.059. De esta manera, sus brechas se sitúan en 181% y 197% respectivamente. Dentro de las cotizaciones intervenidas, el MEP con AL30 ganó un 2,7% y quedó en $1.006 (brecha del 182%), y el CCL lo hizo en un 0,7% hasta los $998 (brecha del 179%).
Durante la jornada de ayer, los contratos de futuro de dólar subieron un 2%. Las mayores subas se registraron en los contratos de febrero (+3,4%), abril (+2,9%) y mayo (+2,9%). Mientras que la única caída registrada fue la del contrato de noviembre (-0,7%). De este modo, la devaluación implícita se ubica en el 1% hasta noviembre, en el 124% hasta diciembre y en el 245% hasta abril de 2024. Se operaron 318.000 contratos, lo que significa un acumulado semanal de 4.867.000. El interés abierto se redujo en USD 30 M hasta un stock de USD 3.848 M; lo que significa un decrecimiento mensual de 26,8% y anual de 4,2%.
Las curvas soberanas en pesos tuvieron una rueda positiva. Los bonos CER se incrementaron un 3,1%, mientras que las Lecer ganaron un 3,9%. En la curva de tasa fija, el TO26 cerró alcista en un 2,6%. Por su parte, los duales registraron una ganancia de 12,4% y los DLK marcaron una suba de 2,1%.
Nuestro índice de bonos soberanos en hard-dollar ganó un 2,7%, explicado por una suba de 1,9% en los ley Nueva York y una suba de 4% en los ley Argentina. Así, acumulan una ganancia de 25% en lo que va del mes y de 30,5% en lo que va del año. De esta manera, las paridades promedian el 33,9% y el riesgo país aumentó 1 pb hasta los 2.125 pb.
El mercado de renta variable volvió a subir, en una jornada marcada por el feriado en EE. UU. El Merval escaló un 4,8% en moneda local y 0,7% en CCL Galicia, alcanzando un valor de USD 869. Se registraron aumentos generalizados, destacándose Cablevisión con un 12,4%, Edenor con un 11,5% y Telecom con un 11,2%. Los sectores que más se beneficiaron fueron Utilidades con un 17,8%, Comunicaciones con un 11,3% y Energía con un 5,8%. Desde el balotaje, el índice acumuló un aumento del 20% y, durante el transcurso de 2023, muestra un crecimiento del 44% medido en USD CCL.
Noticias globales: el mundo hoy.
La jornada del jueves se vio marcada por el cierre de los mercados debido al feriado público del Día de Acción de Gracias en EE. UU. En este escenario, los minoristas se preparan para dar inicio, el viernes, a la temporada de compras navideñas con una variedad de descuentos y promociones. Existe una creciente preocupación entre los ejecutivos por una posible desaceleración del gasto, la cual podría impactar las ventas.
Por otro lado, el jueves los precios del petróleo Brent experimentaron una caída del 1%, situándose en USD 81,28 por barril. Esta disminución extiende las pérdidas ante las especulaciones de que la OPEP+ podría no intensificar los recortes de producción en el próximo año. Esta decisión surge tras el aplazamiento de su reunión de política. A esto se suman las incertidumbres sobre el suministro, evidenciadas por el aumento inesperado de las reservas de crudo de Estados Unidos, que registraron un incremento de 8,7 millones de barriles la semana pasada, superando ampliamente las expectativas de los analistas, que anticipaban un aumento de 1,16 millones de barriles.
En cuanto a otras regiones, el PMI manufacturero de Alemania mostró un incremento hasta alcanzar 42,3 en noviembre, marcando el nivel más alto en seis meses, comparado con 40,8 en octubre y superando ligeramente las proyecciones del mercado de 41,2. A pesar de esto, la cifra continúa indicando una contracción significativa en el sector manufacturero, aunque se observa una desaceleración en la tasa de declive. Se reportó una continua reducción en los pedidos pendientes y la mayor pérdida de empleo en más de tres años, reflejando una capacidad excedente entre los productores de bienes. Aunque las expectativas de los fabricantes han mejorado, siguen siendo predominantemente negativas.
Recalibramos nuestra recomentación a patir de nuestras perspectivas para el nuevo gobierno.
El 22,0% de la cartera total está asignada a instrumentos dollar-linked (soberanos y corporativos), 19,5% a bonos CER del Tesoro, 40,0% a instrumentos en dólares (Cedears, ONs y subsoberanos) y un 15,0% a acciones argentinas. La cartera incluye una posición vendida en el contrato futuro a febrero 2024 equivalente al 3% de la cartera, que se complementa con el bono dual a dicho mes.
A continuación, ofrecemos una visión más detallada del porqué detrás de esta cartera. Para esto, estudiamos la información implícita en los precios de mercado acerca de lo que esperan los inversores de cara al gobierno de Javier Milei. Conociendo lo que espera el mercado, analizamos cuáles son las oportunidades que aparecen para cada clase de instrumento.
Devaluación: contratos de ROFEX
La victoria de Milei disparó las expectativas devaluatorias y los futuros subieron hasta el 31,7%. La única excepción fue el contrato de noviembre, que cayó un 0,5% hasta los $368. Este valor asigna pocas chances a que el gobierno saliente se vea forzado a devaluar, visión con la que coincidimos. Así, el salto cambiario ocurriría en diciembre, tal como refleja el contrato de dicho mes, que cotiza a $790. Este valor señala que el mercado espera una salida agresiva del cepo a través de una devaluación directa del 115% contra noviembre. A partir de ahí, el nivel de devaluación se desaceleraría gradualmente desde el 12,9% mensual en enero de 2024 hasta el 3,4% mensual en septiembre de 2024.
Creemos que estos valores son demasiado elevados: una devaluación mensual del 115% no tiene precedente desde la salida de la convertibilidad. Con la inflación corriendo en torno al 200% anualizado, el riesgo de que el pass-through cambiario dispare una hiperinflación será muy elevado. Nos imaginamos una salida menos agresiva del cepo. Nuestra recomendación es no tomar posiciones o (para los más arriesgados) vender el contrato de febrero y en paralelo comprar al dual TDF24 para construir un sintético de tasa fija con una elevada TNA de 377%.
Tipo de cambio real: DLK vs. CER
Luego de la victoria de Milei, los bonos dollar-linked y duales subieron un 8,8% y un 5,7%, respectivamente, y operan en un rango de tasas en dólares de TIR -70% para los más cortos y TIR -20% para los más largos. Mientras, los bonos CER cayeron un 1,5% y operan entre tasas de entre CER +2% a principios de 2024 y CER +12% a 2028. Esto significa que el mercado espera que la devaluación supere a la inflación por un amplio margen y que ocurra una mejora en el Tipo de Cambio Real en 2024/2025: en torno al 36% hasta febrero, en un 44% hasta abril y agosto, en un 36% para septiembre y, finalmente, en un 64% para marzo de 2025.
A estos precios, preferimos instrumentos dollar-linked a principios del 2024 (como el TDF24) combinada con bonos CER a mitad del 2024/principios del 2025 (como T4X4 y T2X5). En primer lugar, porque a lo largo del 2024 la inflación debería recuperar terreno contra la devaluación inicial de diciembre. Esto es tanto por el traslado a precios de dicho salto, como por el ajuste de precios relativos del cuadro tarifario. Así, la ganancia en términos reales debería caer a lo largo del 2024, en vez de aumentar o mantenerse estable, como reflejan los precios de mercado. En segundo lugar, porque el tipo de cambio real multilateral implícito* parece demasiado alto: oscila entre 114 y 120 a lo largo de todo el 2024, mientras que alcanza un 134 a principios del 2025. Como referencia, un tipo de cambio real multilateral depreciado, como promedio del periodo 2018-2019 –un bienio con un tipo de cambio real marcadamente alto–, fue de 116. En otras palabras, los instrumentos vinculados al dólar oficial necesitan de un escenario optimista donde se logra contener el traslado a precios tan solo para empatar contra sus pares atados a inflación.
*asumiendo una inflación global de 5,8%
Brecha: ¿bonos en pesos o dólares financieros?
Los bonos en pesos siguen descontando una elevada brecha para 2024. En el siguiente cuadro simulamos un ejercicio donde comparamos el retorno en dólares del TV24 a abril del 2024 contra el retorno proyectado para distintas clases de instrumentos en dólares: el Cedear del S&P, un bono corporativo de Pampa a 2026, un bono provincial de Mendoza a 2029 y el AL30. Para el bono dollar-linked planteamos tres escenarios: uno donde la brecha persiste al 70%, y dos donde se produce una unificación cambiaria (brecha 0%) diferenciados porque en uno se honra la deuda en pesos y en el otro se le aplica una quita del 40%. Bajo este ejercicio, el TV24 presenta retornos en dólares de entre un 14% y un 16% de aquí a fines de abril, en todos los casos por encima de los retornos de entre un 2% y un 6% que proyectamos para el Cedear y los bonos corporativos y provinciales. En tanto que, incluso siendo pesimistas, su retorno empataría contra el AL30, regresando a sus máximos del 2023. En otras palabras, el carry trade con bonos en pesos sigue presentando como una gran oportunidad para obtener ganancias extraordinarias de corto plazo en dólares.
Sostenibilidad de la deuda en dólares
El martes después de las elecciones, los bonos soberanos hard-dollar subieron un 10,9% en dólares. Con sus paridades en torno al 31%, el riesgo país se mantiene elevado en 2.175 pb y los bonos argentinos continúan descontando escenarios sumamente pesimistas. Asumiendo una reestructuración a principios del 2025, los globales tienen implícitas quitas de entre un 23% y un 49% a una exit yield de un 15,0% en línea con países BBB como Kenia. Así, creemos que sigue habiendo valor en el largo plazo.
Sin embargo, nos mantenemos cautos para el corto plazo. La herencia del nuevo gobierno es crítica y su margen de acción se mantiene acotado. Por ahora, no hay definiciones sobre la reducción de subsidios, transferencias sociales y gasto en estructura del sector público nacional, aspectos clave para poder estimar una rápida y agresiva reducción del déficit primario. Seguimos priorizando bonos bajo ley Nueva York, particularmente GD30 que descuenta quitas demasiado agresivas de entre 37% y 41%.
Noticias locales: el país hoy.
En el mercado cambiario, el sector agropecuario liquidó USD 10 M. Mientras, el BCRA registró compras netas por USD 8 M en el MULC. En lo que va de noviembre, la autoridad monetaria adiciona compras por USD 435 M; en tanto en 2023 acumula ventas por USD 1.545 M. Por otro lado, el stock de reservas internacionales se redujo en USD 101 M hasta los USD 21.535 M. Con esta información, las reservas acumulan una caída de USD 23.063 M en 2023.
El dólar oficial aumentó diariamente un 0,1% hasta $356.5. Esto significa un ritmo de devaluación mensualizado de 4,2%, que se desaceleró contra el ritmo de 4,4% del martes. En los últimos cinco días habiles la devaluación corrió a una TEM de 7,2%, mientras que en lo que va de noviembre corrió a TEM 2,4%.
Los dólares financieros operaron al alza. Dentro de las cotizaciones libres, el MEP con ledes subió 9% hasta alcanzar los $986, mientras que el CCL con ADRs trepó 9,7% hasta $991. De esta manera, sus brechas se sitúan en 177% y 178%, respectivamente. Dentro de las cotizaciones intervenidas, el MEP con AL30 ganó 5,5% y quedó en $979 (brecha del 175%) y el CCL lo hizo en 6,5% hasta los $990 (brecha del 178%).
Durante la jornada de ayer, los contratos de futuro de dólar lateralizaron 0,5%. Las mayores subas se registraron en los contratos de abril (+2,1%), agosto (+2%) y septiembre (+1,9%). Mientras que las mayores caídas se registraron en los contratos de noviembre (-1,4%), enero (-1,1%) y diciembre (-0,8%). De este modo, la devaluación implícita se ubica en el 2% hasta noviembre, en el 120% hasta diciembre y en el 235% hasta abril de 2024. Se operaron 287.000 contratos, lo que significa un acumulado semanal de 5.279.000. El interés abierto se incrementó en USD 18 M hasta un stock de USD 3.878 M, lo que significa un decrecimiento mensual del 27,8% y un decrecimiento anual del 0,9%.
Las curvas soberanas en pesos tuvieron una rueda mayormente positiva. Los bonos CER se incrementaron un 2,1%, mientras que las Lecer perdieron un 1,2%. En la curva de tasa fija, el TO26 cerró alcista con un 7,6%. Por su parte, los duales registraron una ganancia de 5,2% y los DLK marcaron una suba del 8%.
Nuestro índice de bonos soberanos en hard-dollar ganó 4,6%, explicado por una suba del 3,8% en los de ley Nueva York y una suba del 6% en los de ley Argentina. Así, acumulan una ganancia del 21,7% en lo que va del mes y del 27% en lo que va del año. De esta manera, las paridades promedian el 33,1% y el riesgo país disminuyó 51 pb hasta los 2.124 pb.
El mercado de renta variable mantuvo su marcha alcista tras el balotaje. El Merval subió 5,8% en moneda local y bajó -1,1% en CCL Galicia, alcanzando un valor de USD 863. Se registraron aumentos generalizados, destacándose Cresud con un 19,6%, Agrometal con un 14,4% e YPF con un 11,5%. Los sectores que más se beneficiaron fueron Consumo Discrecional con un 15,5%, Utilidades con un 11,5% y Energía con un 9,7%. A diferencia, los ADR registraron una baja promedio del -1,8%, arrastrados por Galicia con un -12,6%, BBVA con un -7,3%, y Banco Macro con un -6,7%. Desde las elecciones generales hasta la fecha, el índice acumuló un aumento del 9,1% y, durante el transcurso de 2023, muestra un crecimiento del 43% medido en USD CCL.
Noticias globales: el mundo hoy.
Entre los indicadores de la actividad en EE. UU. publicados, destacamos que los pedidos de bienes duraderos cayeron más de lo esperado, sugiriendo una desaceleración económica, mientras que la confianza del consumidor de Michigan alcanzó su nivel más bajo en los últimos seis meses. Por otro lado, las solicitudes iniciales de desempleo resultaron menores a las previstas, aportando una nota positiva. Esto se produce un día después de que las actas del FOMC no proporcionaran información adicional sobre los planes de la Fed.
Por su parte, los nuevos pedidos de bienes duraderos manufacturados en EE. UU. cayeron un 5,4% m/m en octubre, revirtiendo el aumento del 4% en septiembre y superando las expectativas del mercado de una caída del 3,1%. Esta caída, la segunda más pronunciada desde abril de 2020 en los pedidos de bienes duraderos, fue impulsada principalmente por una reducción del 14,8% en la demanda de equipos de transporte, debido a una menor solicitud de aviones y vehículos. Paralelamente, los pedidos de bienes de capital no relacionados con la defensa y excluyendo aviones —un indicador clave de los planes de gasto empresarial— descendieron un 0,1% en octubre, después de una revisión a la baja del 0,2% en septiembre
Referido al mercado laboral, el número de estadounidenses que solicitaron beneficios por desempleo cayó en 24.000 a 209.000 en la semana que finalizó el 18 de noviembre, luego del máximo de tres meses de la semana anterior y muy por debajo de las expectativas del mercado de 225.000. Mientras tanto, las solicitudes continuas cayeron en 22.000 a 1.840.000 en la semana anterior, retrocediendo desde el máximo de dos años alcanzado en el informe anterior. El resultado indica que la desaceleración del mercado laboral aún no se ha materializado completamente, lo que permite a la Reserva Federal la flexibilidad para mantener las tasas de interés en niveles restrictivos.
Además, el sentimiento del consumidor de la Universidad de Michigan en los EE. UU. se revisó considerablemente al alza a 61,3 en noviembre desde un preliminar de 60,4, pero aún se mantuvo en el nivel más bajo desde mayo. Fue la cuarta caída consecutiva en la confianza del consumidor, ya que las expectativas actuales más favorables sobre las finanzas personales fueron compensadas por un deterioro notable en las condiciones comerciales. Mientras tanto, las expectativas de inflación para el próximo año aumentaron más de lo esperado hasta el 4,5%, por encima de las estimaciones iniciales del 4,4%, y alcanzaron el nivel más alto desde abril.
Para el mercado hipotecario, a raíz de la caída en la tasa de interés para hipotecas de tasa fija a 30 años en los EE. UU. cayó 20 puntos base a 7,41% en la semana que finalizó el 17 de noviembre, la más baja en ocho semanas y lleva una caída de 45 puntos base en lo que va de noviembre, siguiendo la caída de los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense a medida que la campaña de ajuste de la Reserva Federal está a punto de terminar. Aun así, la tasa se mantiene muy por encima del 6,67% hace un año y del 3,24% en el mismo período de 2021. Como consecuencia, las solicitudes de hipotecas en EE. UU. aumentaron un 3% en la semana, el tercer aumento consecutivo, extendiendo el repunte desde que alcanzó un mínimo de 28 años a finales de octubre.
Las acciones en Wall Street terminaron al alza el miércoles, mientras los operadores asimilaban los datos recientes y monitoreaban los rendimientos de los bonos antes del feriado por el día de Acción de Gracias. El S&P 500 y el Nasdaq ganaron un 0,4% cada uno, mientras que el Dow Jones subió 0,5%. Las ganancias estuvieron lideradas por los sectores de Tecnología (0,5%), Comunicación (0,8%) y Consumo Discrecional (0,7%).
Para las acciones individuales, Amazon subió un 1,9%, mientras que Microsoft lo hizo en un 1,3% luego de que Sam Altman regresara a OpenAI como su CEO pocos días después de su destitución. Por el contrario, NVIDIA bajó un 2,5% a pesar de que sus resultados superaron las expectativas. Sin embargo, la empresa señaló que las restricciones americanas a las exportaciones de chips a China afectarían los resultados. Por último, las acciones de Deere cayeron un 3% a raíz de un pronóstico de ganancias pesimista del gigante del equipamiento agrícola. Su advertencia de que los altos costos de endeudamiento afectarían la demanda hizo eco de un tema común en los resultados de los minoristas.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro cerraron de forma mixta. La UST2Y avanzó 1 pb, cerrando en 4,90%, mientras que la UST10Y cayó 1 pb y terminó en 4,41%. Esto generó una leve subida de los índices de renta fija del 0,3%.
Por último, los commodities tuvieron una caída promedio del 0,9% con la soja retrocediendo 1,5%, alcanzando los USD 498 por tonelada en el mercado de Chicago, mientras que el oro cedió 0,4%, situándose en USD 1.989 por onza. Por último, el WTI bajó 0,9% para alcanzar los USD 77,1 por barril cuando los datos de inventarios de crudo de EE. UU. indicaron un aumento de 8,7 M de barriles la semana pasada, superando las previsiones de un aumento de 3,5 M. Por otra parte, la reunión de la OPEP se retrasó para el 30 de noviembre debido a la insatisfacción de Arabia Saudita con las políticas de otros países miembros.
Noticias globales: el mundo hoy.
Las ventas de viviendas usadas en EE. UU. cayeron un 4,1% m/m a un monto de 3,7 M de unidades en octubre, el nivel más bajo desde agosto de 2010, y por debajo de las previsiones de 3,9 M. La persistente falta de inventario de viviendas y las tasas hipotecarias más altas continúan pesando sobre el mercado inmobiliario. Además, el precio medio de las viviendas existentes para todos los tipos de vivienda en octubre fue de USD 391.800, un aumento del 3,4% i.a.
Por otra parte, las minutas del FOMC mostraron que todos los participantes estuvieron de acuerdo en que debe haber una pausa en las tasas, aunque es necesario proceder con cuidado. Las decisiones políticas en cada reunión continuarán basándose en la totalidad de la información entrante y sus implicaciones para las perspectivas económicas, así como en el equilibrio de riesgos. Además, señalaron que la inflación se ha moderado, pero sigue siendo inaceptablemente alta y muy por encima del objetivo a largo plazo del 2%.
En noticias macroeconómicas, el índice de actividad nacional de la Reserva Federal de Chicago cayó a -0,49 en octubre, el nivel más bajo en siete meses, en comparación con -0,02 en septiembre. La lectura sugiere que el crecimiento económico disminuyó en octubre, arrastrado por las cuatro categorías, siendo la producción la más afectada con un -0,33, frente al -0,04 de septiembre.
La reacción de los mercados a las minutas fue limitada, con un ligero aumento en la rentabilidad de los bonos del Tesoro y una leve caída en las acciones. El S&P 500 perdió un 0,2%, el Nasdaq un 0,6%, mientras que el Dow Jones retrocedió un 0,2%. Los sectores más perjudicados fueron Tecnología (-0,8%) y Real Estate (-0,5%). Por el contrario, Salud (0,6%) y Materiales (0,4%) fueron los más beneficiados. Las acciones tuvieron un comportamiento dispar, con caídas en Amazon (-1,5%) y Microsoft (-1,1%), y subas en Tesla (2,3%) y Google (0,6%).
La publicación de resultados corporativos tuvo relevancia en el after market con NVIDIA informando ganancias del 3Q23. Superó las expectativas una vez más mientras el auge de la inteligencia artificial continúa alimentando la demanda de los chips de la compañía. El fabricante de chips informó ganancias ajustadas por acción de USD 4,02 sobre ingresos de USD 18,12 MM, cuando se esperaban ganancias por acción de USD 3,36. La guía de ingresos de la compañía para el trimestre actual también superó las estimaciones, alcanzando los USD 20 MM, un 12% más de lo proyectado. Sin embargo, la reacción del mercado de valores al informe fue moderada, ya que la empresa señaló que las nuevas restricciones a las exportaciones de chips a China afectarían los resultados. Las acciones caían un 2% luego del cierre de mercado.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro cerraron de forma negativa. La UST2Y retrocedió 3 pb, cerrando en el 4,88%, mientras que la UST10Y cayó 2 pb y terminó en el 4,40%. Esto generó una leve suba de los índices de renta fija del 0,2%. En cuanto a los commodities, la soja avanzó un 0,8%, alcanzando los USD 506 por tonelada en el mercado de Chicago, mientras que el oro ganó un 1%, situándose en USD 1.998 por onza. Por último, el WTI subió levemente un 0,2% para alcanzar los USD 77,8 por barril.
Noticias locales: el país hoy.
En el mercado cambiario, el sector agropecuario liquidó USD 10 M. Mientras, el BCRA registró un resultado neto neutro en el MULC. En lo que va de noviembre, la autoridad monetaria adiciona compras por USD 427 M; en tanto, en el 2023, acumula ventas por USD 1.553 M. Por otro lado, el stock de reservas internacionales se redujo en USD 403 MM hasta los USD 21.101 M. Con esta información, las reservas acumulan una caída de USD 23.497 M en 2023.
Los dólares financieros operaron al alza. Dentro de las cotizaciones libres, el MEP con ledes subió un 5,1% hasta alcanzar los $904, mientras que el CCL con ADRs trepó un 3,6% hasta $903. De esta manera, ambas brechas se sitúan en el 154%. Dentro de las cotizaciones intervenidas, el MEP con AL30 ganó un 8,5% y quedó en $928 (brecha del 161%), y el CCL lo hizo en un 6,1% hasta los $930 (brecha del 161%).
Durante la jornada de ayer, los contratos de futuro de dólar subieron un 22,9%. Las mayores subas se registraron en los contratos de julio (+31,7%), agosto (+31,3%) y junio (+31%). Mientras, las mayores caídas se registraron en los contratos de noviembre (-0,5%). De este modo, la devaluación implícita se ubica en el 3% hasta noviembre, en el 122% hasta diciembre y en el 229% hasta abril de 2024. Se operaron 418.000 contratos, lo que significa un acumulado semanal de 5.875.000. El interés abierto se incrementó en USD 605 M hasta un stock de USD 3.860 M; lo que representa un decrecimiento mensual del 28,1% y un crecimiento anual del 1,4%.
Las curvas soberanas en pesos tuvieron una rueda mayormente positiva. Los bonos CER cedieron un 1,5%, mientras que las Lecer ganaron un 2,7%. En la curva de tasa fija, el TO26 cerró sin variaciones. Por su parte, los duales registraron una ganancia del 5,7% y los DLK marcaron una suba del 8,8%.
Nuestro índice de bonos soberanos en hard-dollar ganó un 10,9%, explicado por una suba del 8,7% en los de ley Nueva York y una suba del 14,8% en los de ley Argentina. Así, acumulan una ganancia del 16,3% en lo que va del mes y del 21,4% en lo que va del año. De esta manera, las paridades promedian el 31,4%, y el riesgo país disminuyó 237 pb hasta los 2.175 pb.
Tras los resultados electorales y el feriado del lunes, el Merval registró un notable incremento del 22,8% en moneda local y del 2,8% en CCL del Banco Galicia, alcanzando un valor de USD 873. Se registraron alzas generalizadas, sobresaliendo Telecom Argentina con un 42,4%, Transener con un 39,9% y Transportadora Gas del Norte con un 39,4%. Los sectores más favorecidos fueron Comunicaciones con un 37,8%, Energía con un 35,1% y Consumo Discrecional con un 24,5%. Por otro lado, los ADR tuvieron una merma promedio del 1,1%, destacándose Cresud con un 5,3%, Despegar con un 5,8% y BBVA con un 4,4%. Desde las elecciones generales hasta la fecha, el índice acumuló un aumento del 10,3% y, durante el transcurso de 2023, muestra un crecimiento del 44,7% medido en USD CCL.
Noticias globales: el mundo hoy.
Los mercados continúan con la racha positiva. A la espera de las minutas de la Fed que se publicarán esta tarde, los rendimientos de los bonos del Tesoro siguieron en baja, lo que impulsa a los índices de renta fija y a las acciones, que alcanzan el nivel más alto desde julio pasado, mientras que el dólar continúa debilitándose.
Hoy se publican las actas de la última reunión de la Fed, algo esperado por los inversores para tener un mejor pulso de la visión de las autoridades sobre la actividad económica y la inflación. En la reunión de noviembre, la Fed había adoptado un tono más moderado y señaló que las tasas de interés habían alcanzado su punto máximo. Esto llevó a los inversores a considerar recortes de tasas ya en marzo mientras esperan nuevos datos que marquen un enfriamiento de la economía, con inflación en baja.
En este contexto, el rendimiento del UST10Y cayó un 4,44% y en el premarket ya se ubica en 4,1%, el más bajo en dos meses, alejándose más de los máximos del 5% alcanzados en octubre, que fueron los más altos desde 2007. Mientras tanto, la demanda de bonos del Tesoro con vencimiento a 20 años fue fuerte en la subasta del lunes, y los inversores aceptaron un rendimiento de 4,78%. Esto impulsó nuevamente a los índices de renta fija, entre los que se destacó el de Investment Grade, que subió 0,7%, ampliando la ganancia del mes a 5,7%. También fue un buen arranque para los bonos emergentes, que subieron 1%, acumulando en noviembre una ganancia de 4,4%.
En cuanto a las acciones, todos los índices cerraron al alza. El S&P 500 y el Nasdaq alcanzaron sus niveles más altos desde julio, sumando un 0,8% y un 1,0%, respectivamente, mientras que el Dow Jones cerró con un alza del 0,6%. Los sectores de servicios de tecnología y comunicaciones fueron los de mejor desempeño, liderados por un aumento del 2% en las acciones de Microsoft hasta alcanzar un máximo histórico de USD 377,44 después de que la compañía contratara al exjefe de OpenAI, Sam Altman, para dirigir un nuevo equipo de investigación de IA. Nvidia también alcanzó un máximo histórico de USD 504,2, con un aumento del 2,3%, antes de la publicación de sus resultados trimestrales mañana. Boeing saltó un 4,6% después de que Deutsche Bank subiera las acciones del fabricante de aviones a buy from hold y elevara el precio objetivo.
El índice dólar DXY cayó un 0,6% y cerró en 103,4, el nivel más bajo desde finales de agosto. La baja es generalizada, aunque se destaca la performance contra la moneda china, contra la cual perdió un 2,1% en la semana y un 2,6% en lo que va de noviembre.